Por Theresa Phillips
Observé con mayor
profundidad en la visión, cuando pude ver carros y caballos. Me pregunté, “¿Esto podría ser algo nuevo?”. Instantáneamente estaba en la atmósfera de seres
angelicales que giraban a mi alrededor.
Salvación
Noté que muchos de
ellos estaban vestidos con cascos nuevos y lustrados. Sobre los cascos pude ver
la palabra salvación que se establecía desafiante. En su derecha había espadas,
en la izquierda había escudos y en el centro había un cortejo masivo de carros
que se transformaban en una pirámide que cruzaba el cielo. La parte inferior de
cada carro tenía llamas de fuego, aunque no eran destructivas.
“Señor, ¡ayúdame!”, dije con suavidad, temblando
ante la presencia que había delante de mí. Luego el Señor habló con mucha
claridad: “Estos mensajeros están trayendo
nuevas revelaciones sobre las batallas que vendrán. Los estoy enviando como
fuego y luz por toda la nación. Entregarán revelación y mi pueblo que es
llamado por mi nombre, se unirá para la protección de otros”.
“Voy a enviar a uno de mis arcángeles como el unificador de las
denominaciones. Sí, estoy por provocar una unidad que el mundo no vio en
décadas. Los arcángeles serán enviados en varios lugares hacia finales de
noviembre del 2019 y estarán en un continente como América durante un año”.
El Señor dice: “Prepárate para sentir la presencia que les impartí, porque en esta presencia el pueblo sentirá la necesidad de ver cómo se unen las iglesias que una vez estuvieron divididas. En esta presencia, la gente sentirá un asombro santo. En esta presencia comenzarán a clamar ‘Dios, rescátame de las fortalezas de la persuasión, el desafío y la división’”.
El Señor dice: “Te
amo, te amo América y haré que mi Iglesia se levante y sea una”.
Lustrando el ministerio quíntuple
“Les estoy enviando estos arcángeles para ayudarlos, pero no se engañen,
porque yo sé quiénes son míos e incluso comenzaré a definir grandes estrategias
y gran sabiduría, porque lustraré el ministerio quíntuple”.
Dice el Señor: “Una
vez más, le enseñarán a la gente con fervor, por las obras del ministerio. No
se desenfoquen, ¡manténganse enfocados!”.
Dice el Señor: “Sí, llegó el
momento para enviar a este arcángel. Es el tiempo de sanidad para las
denominaciones que estuvieron bajo ataques. Una sanidad de importancia nacional
ocurrirá en la Iglesia”.
“Estoy enviando arcángeles que no operarán solos, porque los carros y
los ángeles guardianes los acompañan para esta tarea monumental. Sin embargo,
Iglesia, hay algunas cosas que demando de ti y estos pasajes de las Escrituras
te fortalecerán”.
“Ora sin cesar (1 Tesalonicenses 5:17). Ora por los líderes (1 Tim.
2:1-2). Cuida tus alianzas, porque muchas están disfrazadas de ovejas (Mateo
7:15). Ora por discernimiento (Heb. 5:14). Ora por un corazón perdonador (Mateo
6:14). Enseña el Evangelio (2 Tim. 3:16)”.
El Señor dice: “Enfócate,
enfócate” (Salmo 111:7-8). Ora para mantenerte enfocado. Ora para reconocer a
los ángeles (Heb. 1:7, Heb. 13:2)”.
Sobre los arcángeles
1 Pedro 3:21-22 dice: “El bautismo que corresponde a esto ahora nos salva (no
quitando las inmundicias de la carne, sino como la aspiración de una buena
conciencia hacia Dios) por la resurrección de Jesucristo, quien habiendo subido
al cielo está a la diestra de Dios; y a él están sujetos ángeles, autoridades y
potestades”.
Hebreos 2:2 dice: “Porque
si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y
desobediencia recibió justa retribución…”.
2 Pedro 2:11 dice: “… mientras que los ángeles, que son mayores en fuerza y
en potencia, no pronuncian juicio de maldición contra ellas delante del Señor”.
Dr. Theresa Phillips
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