lunes, 31 de octubre de 2022

“¡Voy a hacerte girar como una llave!”

Por Chuck D. Pierce

Amados buscadores:

Cavar nuevos pozos es una de las guerras del año que se avecina. En consecuencia, ¡nuestro enfoque para el empoderamiento profético es prepararnos para cavar! En la Palabra de Dios, un pozo puede referirse a un manantial, a una fuente (una fuente viva alimentada por un manantial) y también a un pozo o una prisión.

Hay un gran poder en congregarse, particularmente cuando celebramos las Primicias y honramos al Señor con lo primero de nuestro tiempo y nuestro aumento. Cuando elegimos reunirnos y buscarlo a Él primero al comienzo de cada mes, recibimos la unción del Señor sobre “toda nuestra masa”.

El mes de Jeshvan está reservado para la unción, así que este es un “tiempo clave” para reunirse y recibir la revelación profética que nos permitirá movernos de bendición en bendición, hasta que las bendiciones nos sobrepasen.

Una palabra clave

¡Este es un tiempo de gran movimiento! Se formó un portal profético durante el culto del domingo e irrumpió una nueva corriente de revelación. ¡Mientras perseveramos más allá de nuestra temporada de Tabernáculos, declaren que están avanzando con un nuevo giro, un nuevo intercambio, un nuevo viento, un nuevo movimiento y una nueva medida de dar!

Palabra profética recibida el domingo 16 de octubre de 2022

Dios dice: “¡Te voy a hacer girar como lo hago con una llave! Voy a girarte como si girara una llave y haré que tus ojos y tus oídos se abran”.

“Mantén tus ojos abiertos cuando gires. Al mantener tus ojos abiertos, voy a provocar ese cambio en todo tu cuerpo para un cambio de giro, para que puedas ser como la llave que gira la cerradura que abre las puertas”.

“¡Estoy cambiando las llaves! Satanás usó una llave de muerte contra ti, pero yo soy el Dios de la muerte, del infierno y de la tumba”.

“Te estoy dando una llave para que la cambies por la estructura de la muerte que está trabajando en tu contra. Esta llave puede aparecer como un viejo llavero tipo cárcel, pero brillará y goteará oro. Los viejos lugares de cautiverio en tu vida y en tu linaje se están desbloqueando por Mi gloria”.

Mi segundo viento está soplando en esta hora

“Estuviste distanciado, pero ven hacia Mí. Ven a visitarme en Mi pozo y te mostraré cómo mirar a los demás a través de Mis ojos. Se amarán unos a otros, así como me aman a Mí y eso es un ejército invencible”.

“Porque el enemigo incluso vino a desgastar a los santos, pero Yo soy el Dios que está a punto de soplar un segundo viento. Incluso como sucede con un atleta. Cuando ese atleta siente que ya no puede terminar esa carrera, yo vengo con un segundo viento para traer fuerza y traer energía para que ese atleta pueda cumplir con la meta que se propuso”.

“Vengo con un segundo viento de Mi Espíritu y estoy a punto de soplar sobre ti de una manera nueva. Que el débil diga: ‘Soy fuerte’. Porque la fuerza del Señor te hará terminar la carrera que tienes por delante. Mi segundo viento está soplando sobre ti en esta hora”.

Una danza de alegría le ocultará tus huellas al enemigo

“Estoy cambiando tu huella en la tierra. Cuando no estás en la alegría, caminas y avanzas en línea recta, abriendo surcos en la tierra. El enemigo puede seguir estas líneas con facilidad. Pero cuando eso se convierte en alegría y empiezas a danzar, creas huellas en círculos por toda la tierra, hacia arriba y hacia abajo, hacia adelante y hacia atrás. Cuando te mueves con alegría y bailas, el enemigo no es capaz de ver en qué dirección vas y en qué dirección te mueves”.

¡Los portales se abrirán!

“El cambio comenzó y el viento está soplando. Tengo a Mi Judá (la compañía de Judá) en la línea a través de esta nación. Los portales se abrirán y Mi gloria será vista sobre Mi pueblo como nunca antes”.

¡Decreta que tu pozo se llenará!

“Tanto amé al mundo que le di... Hay una nueva dimensión de dar que está surgiendo y saliendo de Mi pueblo. Es la generosidad del sonido del amor con el que me estoy preparando para penetrar en este mundo como nunca antes”.

“Abre la puerta de tu corazón y deja que fluya el manantial de amor. Cuando elijas dar en esta temporada, decreta que tu pozo se llenará y beberás de él todo el año”.

“He creado una nueva ‘apertura’ de recursos y líneas de provisión para Mi pueblo en lo natural, y en lo espiritual. Continúa alabándome y las abriré más de muchas formas de manera sobrenatural”.

(Palabra del Señor decretada por Brian Kooiman, Norma Urrabazo, Chuck Pierce, Jamie Spears, Mark Waldrep, Barbara Wentroble, Lisa Lyons, Pasqual Urrabazo, Susan Shaulis y Eleanor Roehl)

En este tiempo debemos ascender hacia nuevas alturas en la adoración. Sigamos ascendiendo a través de este portal profético y reflejemos el plano del Cielo en la tierra.

Chuck D. Pierce y equipo

(www.elijahlist.com)

 

 

“Un anticipo del 2023”

Por Elaine Tavolacci

El Señor dice: “Les daré un ‘anticipo de lo que viene’ a mis profetas, mis videntes y a los que tienen dones proféticos”.

Un preestreno es una muestra especial de algo como una película, una obra de teatro o un producto, antes de estar disponible para el público en general. El Señor les estuvo mostrando a sus profetas que estamos al borde de un derramamiento poderoso del Espíritu Santo. El río en el que estamos a punto de adentrarnos, es más profundo de lo que jamás hemos conocido. Recibiremos palabras extremas para un tiempo extremo.

Encuentros y visiones espirituales extraordinarias

El Espíritu Santo les está dando visiones a algunos creyentes, mientras que otros están recibiendo encuentros espirituales como los que recibieron los profetas de la antigüedad. Uno de estos profetas fue Ezequiel. El Señor usó a Ezequiel de una manera inusual, dándole visiones, transportándolo y en otros encuentros. Fue llamado a juzgar, reprender y llamar al pueblo de Dios al arrepentimiento.

En Ezequiel 1, vio los cielos abiertos y visiones de Dios. Luego vio un torbellino “... Y miré, y he aquí venía del norte un viento tempestuoso, y una gran nube, con un fuego envolvente, y alrededor de él un resplandor” (verso 4). De ella irradiaba una luz brillante que parecía de color ámbar, brillando en medio del fuego.

Vio cuatro criaturas vivientes con apariencia de hombre. Cada una de ellas tenía cuatro caras y cuatro alas. Sus piernas eran rectas, sus pies eran como los de un ternero, y “... centelleaban a manera de bronce muy bruñido” (verso 7). Ezequiel describió esta experiencia fenomenal cuando el Señor le abrió los ojos en la dimensión de los videntes.

Vamos a experimentar encuentros espirituales extraordinarios en los días venideros. Cada creyente aprenderá el lenguaje único del Espíritu Santo y las formas específicas en que Él nos habla individualmente, como Cuerpo.

La fe que mueve montañas y el poder creativo de nuestras palabras

En Ezequiel 37, el Señor lo transportó en el espíritu y le mostró un valle de huesos secos. Se le dijo que les profetizara a los huesos secos porque volverían a la vida. Cuando Ezequiel profetizó, se oyó un ruido de traqueteo; los huesos se juntaron, y les salieron tendones y carne, pero no había aliento. Entonces el Señor dijo: “Espíritu, ven de los cuatro vientos (el ruaj), y sopla sobre estos muertos, y vivirán. Y profeticé como me había mandado, y entró espíritu en ellos, y vivieron, y estuvieron sobre sus pies; un ejército grande en extremo” (verso 10). Del mismo modo, pronto descubriremos la autoridad y el poder creativo de nuestras palabras.

Ezequiel 37:3-6: “Y me dijo: ‘Hijo de hombre, ¿podrán revivir estos huesos?’. Y yo le contesté: ‘Señor omnipotente, tú lo sabes’. Entonces me dijo: ‘Profetiza sobre estos huesos, y diles: ¡Huesos secos, escuchen la palabra del Señor! Así dice el Señor omnipotente a estos huesos: ‘Yo les daré aliento de vida, y ustedes volverán a vivir. Les pondré tendones, haré que les salga carne, y los cubriré de piel; les daré aliento de vida, y así revivirán. Entonces sabrán que yo soy el Señor’”.

Jesús nos entregó autoridad para llamar a las cosas a la existencia, según el Espíritu Santo nos dirija. Algunos de ustedes están a punto de recibir una fe que mueve montañas, tal y como enseñó Jesús: “Les aseguro que si alguno le dice a este monte: ‘Quítate de ahí y tírate al mar’, creyendo, sin abrigar la menor duda de que lo que dice sucederá, lo obtendrá” (Marcos 11:23). Algunos de ustedes comenzarán a hablarles a las cosas que son imposibles o inamovibles en lo natural, y verán la intervención divina del Señor.

La abundancia de lluvia, el río sanador y los cuatro seres vivientes

En Ezequiel 47, el Señor llevó a Ezequiel de vuelta a la puerta del templo y le mostró el agua que fluía por debajo del umbral. El agua entraba por todos lados. Continúa diciendo que había un hombre (representando a Jesús) que medía la profundidad de las aguas que iban desde los tobillos, hasta un enorme río que no podía cruzarse en lo natural. Dondequiera que este río fluyera traía vida. Dondequiera que este río fluía trajo sanidad.

El Señor está a punto de liberar una abundancia de lluvia que llenará los ríos hasta el desbordamiento y romperá las presas de la división. Él está a punto de traer muchos arroyos juntos para este gran derramamiento, y vamos a experimentar su gloria de una manera sin precedentes. Muchas cosas sucederán y multitudes serán arrastradas al Reino de Dios. Muchas personas experimentarán avances de proporciones significativas, y habrá grandes milagros que acompañarán este derramamiento.

Hay muchas similitudes y paralelismos entre el libro de Ezequiel y el libro de Apocalipsis. En Apocalipsis 4:1, el apóstol Juan vio una puerta abierta en el Cielo, y oyó una voz como de trompeta que le hablaba, diciendo: “... Sube aquí, y te mostraré las cosas que deben suceder después de esto”. Inmediatamente, entró en el Espíritu y describió lo que vio en el Cielo con detalles explícitos.

Juan también vio cuatro criaturas vivientes, pero eran diferentes de los seres espirituales que vio Ezequiel. La primera criatura viviente era como un león, la segunda criatura viviente como un ternero, la tercera criatura viviente tenía cara de hombre y la cuarta criatura viviente era como un águila voladora. Los cuatro seres vivientes (zóon): “cada uno de ellos tenía seis alas y estaba cubierto de ojos, por encima y por debajo de las alas. Y día y noche repetían sin cesar: ‘Santo, santo, santo es el Señor Dios Todopoderoso, el que era y que es y que ha de venir’” (Apocalipsis 4:8). Creo que el Espíritu Santo también va a abrir nuestros ojos para ver a los ángeles y a los seres vivientes, que no son lo mismo.

Apocalipsis 4:1-2: “Después de esto miré, y allí en el cielo había una puerta abierta. Y la voz que me había hablado antes con sonido como de trompeta me dijo: ‘Sube acá: voy a mostrarte lo que tiene que suceder después de esto’. Al instante vino sobre mí el Espíritu y vi un trono en el cielo, y a alguien sentado en el trono”.

En Apocalipsis 22, el apóstol Juan tuvo una visión similar a la de Ezequiel. También vio el río sanador de Dios que salía del trono: “Luego el ángel me mostró un río de agua de vida, claro como el cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero, y corría por el centro de la calle principal de la ciudad. A cada lado del río estaba el árbol de la vida, que produce doce cosechas al año, una por mes; y las hojas del árbol son para la salud de las naciones” (Apocalipsis 22:1-2).

La transformación que lleva al lugar más profundo

En Ezequiel 2:8-3:4, se le entregó a Ezequiel un pergamino que tenía lamentaciones, lamentos y aflicciones escritas en ambos lados. El Señor le dijo a Ezequiel que abriera la boca y se comiera el rollo que le habían entregado, y luego fuera a hablar a la casa de Israel. El abrió su boca, comió el rollo y entonces se volvió dulce como la miel en su boca.

En Apocalipsis 10:8-11, el Señor le dijo a Juan que tomara el pequeño rollo de la mano del ángel (que estaba sobre el mar y la tierra) y lo comiera, y cuando lo hizo, fue dulce como la miel en su boca, pero amargo para su estómago. El Señor le indicó entonces que les profetizara a los pueblos, naciones, lenguas y reyes. El Espíritu Santo puede usar a algunos de ustedes para liberar una palabra de corrección que puede parecer dura pero necesaria, y cuando el receptor la reciba, se volverá dulce y transformará su vida.

El Señor dice: “Mi unción será evidente en los profetas y los videntes en esta temporada para traer corrección, dirección y transformación; pero también estoy llamando a cada creyente a un lugar más profundo. Ahora es el momento de salir con fe a un lugar donde nunca has estado. Hay una dimensión que está disponible para ti; y cuando entres en este río, experimentarás un nuevo nivel de Mi gloria. Encontrarás que la gloria de esta última casa será mayor que la anterior, y en este lugar, traeré la paz”.

Elaine Tavolacci

(www.elijahlist.com)

 

domingo, 23 de octubre de 2022

“¡Pasaste la prueba! ¡Es tiempo para tu recompensa!”

 

Por Andrew Towe

La clave para tu próxima temporada

Pude oír al Espíritu del Señor que decía: “Fueron enviados los camellos que forman caravanas cargadas de bendiciones y provisiones. Espéralos con gran expectación, pues llevan la clave de tu próxima temporada”.

“He visto cómo Mis hijos soportaron temporadas de grandes pérdidas, desilusiones y angustias, pero esa temporada cambió y los camellos están aquí. Dile a Mi pueblo que se prepare, porque demostraré Mi poder de resurrección, trayendo vida a las promesas muertas. Encargué una liberación de Génesis 24 sobre Mis hijos e hijas. Diles que declaren: ‘Los camellos están aquí’”.

Cargado de bendiciones y provisión: Las promesas de Dios se están cumpliendo

Cuando el Señor me dijo esto, rápidamente comencé a estudiar Génesis 24. El capítulo comienza describiendo a Abraham como un anciano y cómo el Señor fue fiel, bendiciéndolo en todos los sentidos (Génesis 24:1). Sólo le faltaba una cosa a Abraham: una novia para su hijo Isaac.

Abraham llamó a su siervo principal para que le ayudara a encontrar la esposa de Isaac. Abraham le hizo jurar que no permitiría que Isaac se casara con una de las mujeres cananeas del lugar. Le pidió a su siervo que fuera a su tierra entre sus parientes y encontrara una novia para Isaac. “¿Qué pasa si la mujer no está dispuesta a venir conmigo a esta tierra?, respondió el criado. ¿Debo entonces llevar a su hijo hasta la tierra de donde usted vino? ¡De ninguna manera debes llevar a mi hijo hasta allá!, le replicó Abraham” (Génesis 24:5-8).

Al siervo le preocupaba que una joven no estuviera dispuesta a alejarse de su familia a una gran distancia, pero Abraham sabía que Dios ayudaría a su siervo a encontrar una novia para el hijo elegido. La voluntad de Dios era que Isaac se quedara en Canaán, para que se cumpliera la promesa que el Señor le hizo a Abraham, donde su descendencia poseería la tierra.

Al igual que con Abraham, las promesas de Dios para ti se cumplirán. No se olvidó de ti. Prepárate para que Dios te bendiga con los recursos que necesitas para mantenerte en su perfecta voluntad, de modo que puedas disfrutar del cumplimiento de su palabra en tu vida. “Luego tomó diez camellos de su amo, y toda clase de regalos, y partió hacia la ciudad de Najor en Aram Najarayin” (Génesis 24:10).

Fíjate en el papel especial que desempeñan los camellos a lo largo de esta historia. Iban cargados de bendiciones y provisiones. También escuché al Espíritu del Señor que decía: “Te estoy transfiriendo abundantes bendiciones. Estás entrando en un tiempo determinado, donde mostraré Mi bondad con manifestaciones elaboradas de Mis promesas”.

¡Pasaste la prueba!

La historia continúa relatando cómo la sierva llegó al pueblo donde vivía el hermano de Abraham y oró para que Dios usara los camellos como una señal de confirmación hacia su identidad. “Permite que la joven a quien le diga: ‘Por favor, baje usted su cántaro para que tome yo un poco de agua’, y que me conteste: ‘Tome usted, y además les daré agua a sus camellos’, sea la que tú has elegido para tu siervo Isaac. Así estaré seguro de que tú has demostrado el amor que le tienes a mi amo” (Génesis 24:14).

Dios también había llevado a Rebeca hacia una encrucijada. Ella estaba literalmente regando su futuro, y su semilla de servicio trajo favor y elevación. Rebeca pasó la prueba. “Cuando ya el criado había bebido, ella le dijo: ‘Voy también a sacar agua para que sus camellos beban todo lo que quieran’” (Génesis 24:19).

Observe que la excelencia de Rebeca al hacer una tarea promedio la calificó para la bendición que estaba a punto de recibir. El Señor dice: “Tú también estuviste en una temporada de pruebas. He visto tu fidelidad en las tareas mundanas que realizaste, y ahora te confiaré más. Ha llegado el momento de la recompensa”.

“Luego sacó joyas de oro y de plata, y vestidos, y se los dio a Rebeca. También entregó regalos a su hermano y a su madre” (Génesis 24:53).

Elevado a un nivel superior: ¡Vienen los camellos!

Los camellos que Dios te envió se inclinarán ante ti y te elevarán hacia un nivel superior. Dios dice: “No tendrás que esforzarte para ser elevado. Asigné los camellos para traer elevación y bendiciones inesperadas sobre tu vida. Los camellos se inclinan hacia abajo para facilitar el ascenso. En esta temporada que viene, tu destino se liberará con facilidad, porque te estoy dando conexiones divinas, un favor inexplicable y una influencia auténtica”.

“Una tarde, salió a dar un paseo por el campo. De pronto, al levantar la vista, vio que se acercaban unos camellos” (Génesis 24:63).

“Luego Isaac llevó a Rebeca a la carpa de Sara, su madre, y la tomó por esposa. Isaac amó a Rebeca, y así se consoló de la muerte de su madre” (Génesis 24:67).

Dios le prometió a Abraham que la bendición de su descendencia llegaría a través de Isaac. Rebeca era la clave para el cumplimiento de la promesa de Dios. Además, Isaac la amaba. Te va a encantar lo que Dios va a hacer a continuación por tu vida.

El Señor te anuncia: “Como Isaac estás entrando en tu próxima estación, que será de consuelo, elevación y cumplimiento de promesas. Él fue testigo de tu dolor, ya que experimentaste grandes pérdidas, heridas y dolor. ¡Él está trayendo un gran cambio! La próxima temporada está sobre ti”.

Dios dice: “¡Los camellos están aquí! Comienza a llamarlos hacia tu vida. Ellos están a tu alrededor, pero ahora es su tiempo para cumplir con su asignación. Hay una gran transferencia que viene para Mis hijos”.

Andrew Towe

(www.elijahlist.com)

 

“5783: Recibe restauración, renovación de los jóvenes y provisión de Pacto”

  

Por Dionne White

Un tiempo para afirmarse en la autoridad de gobierno

Recién celebramos Rosh Hashanah o “la cabeza del año”, uno de los cuatro años nuevos judíos. Aquí comienza el calendario judío y se miden los gobiernos de los reyes como terminados.

Esto tiene mucho significado espiritual ahora mismo. Los cambios de gobierno y la finalización de los períodos previos están sobre nosotros en el Cuerpo de Cristo. Muchos están por afirmarse en sus roles de gobierno, mientras la Ekklesia se está levantando en su autoridad de gobierno. Muchos en el Cuerpo están entrando en la plenitud del entendimiento de su identidad como justificados en Cristo Jesús; se están afirmando en la autoridad que Dios les entregó en Cristo Jesús, ¡aprendiendo a gobernar en su Nombre!

La clave de la restauración, la renovación de la juventud y la provisión del Pacto

Una de las cosas que estuve viendo continuamente en mis sueños y sintiendo en mi espíritu, es la renovación y la restauración de nuestra juventud, así como la provisión del pacto. El Salmo 103:5 dice: “Él colma de bienes tu vida y te rejuvenece como a las águilas”.

Estuve hablando y declarando esta Escritura durante años. Dios me mostró que aquellos que creen y confiesan tales verdades de su Palabra (como esta), ¡Él los restaurará y renovará, llevándolos a una vida increíblemente preservada de juventud! Lo que confesamos con nuestras bocas es importante (bueno o malo) y será establecido.

Así que, anímense si estuvieron orando por restauración, renovación y juventud. ¡Realmente creo que está llegando a tu vida, especialmente si te entregaste a las enseñanzas del Señor fielmente y las declaraste en voz alta!

El proceso de testificar lo que fue establecido por Dios

Ahora, pasando a lo que estuve sintiendo en este nuevo año 5783... Tengo algo de ánimo, pero también una palabra de precaución y sabiduría. Estuve viendo los números “1212” durante todo el año, que bíblicamente significa el gobierno o la autoridad perfecta de Dios. ¡Para mí, también simboliza la autoridad gobernante perfecta con un testigo, porque hay dos 12’s, lo que significa que se duplica! Una “duplicación” es como una ayuda extra o como ponerle un sello de aprobación a algo. Dos (de cualquier cosa) habla de un ‘testigo’ de algo, un ayudante (persona del Espíritu Santo), una unión de dos cosas simples o una multiplicación.

Quiero animarlos y advertirles con la siguiente palabra de sabiduría, al entrar en este nuevo tiempo de gran derramamiento, actividad espiritual y autoridad, ¡con una ración extra del Espíritu Santo! Estén armados con la verdad de la Palabra de Dios y sean sabios para juzgar y sopesar adecuadamente en estos tiempos. La Palabra de Dios y el Espíritu Santo tienen la última palabra.

La palabra del Señor, escrita o hablada (incluso las palabras rhema entregadas desde sus libros celestiales), ya fue establecida. Ya fue establecida antes de la fundación del mundo y sólo necesita una sola voz o un vaso para decretar su existencia, para decretar que se manifieste en la Tierra como está en el Cielo. Cuando su palabra es liberada por un hijo o un profeta de Dios, Él está buscando en la tierra nuestro acuerdo para darle vida; pero ¿adivina qué? ¡También lo está satanás!

Por eso debemos ser muy cuidadosos con lo que escuchamos, a lo que le damos voz y con lo que estamos de acuerdo. Nuestro acuerdo trae la aprobación de la fuente, dándole ‘credibilidad’ a su nombre en el nombre de Jesús. Debemos ser muy cuidadosos con lo que estamos de acuerdo y aprobamos. Nuestro trabajo como hijos del Espíritu de Dios y de sus profetas, es juzgarlo y pesarlo.

Probemos y sopesemos cada palabra y sueño que surja por nuestro Testigo interno (el Espíritu Santo). Y, sobre todo, por la Palabra de Dios. Dejemos que dé testimonio y sea apoyado por la Palabra; entonces sigamos al Testigo interno.

¡No temas! Dios tiene planes buenos, pacíficos y prósperos para ti en el 5783

Al entrar en el año 5783, sentí una increíble renovación y emoción en mi espíritu y en la atmósfera que me rodeaba, al comenzar a anticipar los diez días de sobrecogimiento (que comenzaron en Rosh Hashanah y terminan en Yom Kippur). Mientras que el mundo y otras voces estuvieron repartiendo fatalidad, pesimismo, recesión, carencia, inflación y dificultades (los planes del enemigo); Dios nos estuvo dando a mí y a mi familia un testimonio, una perspectiva y unas instrucciones completamente opuestas.

¡Estoy viendo un aumento increíble y bendiciones para aquellos que entraron en verdadero pacto con nuestro Dios! Oigo en mi espíritu: “...nunca he visto justos en la miseria, ni que sus hijos mendiguen pan” (Salmo 37:25).

Continúa hablándome por los siguientes pasajes. La Palabra de Dios dice que a los que temen y buscan al Señor, no les faltará nada bueno (véase el Salmo 34:9-10); toda dádiva buena y perfecta desciende del Padre de las luces, con quien no hay sombra de mudanza ni de cambio (véase Santiago 1:17); y “...mi Dios suplirá todo lo que necesiten según sus riquezas en gloria por Cristo Jesús” (Filipenses 4:19).

¿Estás viendo un patrón?

Entonces, ¡no temas! Dios tiene planes buenos, pacíficos y prósperos para ti en el 5783, y mientras terminamos el 2022 y entramos en el 2023 (ver Jeremías 29:11). Nuestro Rey Jesús está en el trono, la Iglesia de Jesucristo está en ascenso y el que prometió es fiel.

Una ración extra del Espíritu Santo y una declaración para el nuevo año

Al entrar en el año 5783, siento un gran entusiasmo por lo que el Señor va a hacer en nosotros, a nivel individual y corporativo. Sigo escuchando: “Una ración extra del Espíritu Santo”. Simplemente significa que vamos a ver el poder y la fuerza manifestados de su Espíritu derramado. Oh, qué gracia y poder, por su Espíritu, está ahora disponible para que corramos y no nos cansemos, si le permitimos hacerlo.

Los dejo con esto:

“‘No será por la fuerza ni por ningún poder, sino por mi Espíritu’, dice el Señor Todopoderoso. ‘¿Quién te crees tú, gigantesca montaña? ¡Ante Zorobabel sólo eres una llanura! Y él sacará la piedra principal entre gritos de alabanza a su belleza’” (Zacarías 4:6-7).

¡Declaro gracia, gracia, gracia sobre tu 5783/2O23! Avanzando con fe y autoridad, esas montañas que se interponían en tu camino caerán.

Profetizo la restauración, la renovación de la juventud y la provisión del pacto, ¡en el nombre de Jesús!

“Tendrás éxito en todo lo que emprendas, y en tus caminos brillará la luz” (Job 22:28)

¡Esta es tu herencia en Él! Amén. ¡Alabado sea el nombre de nuestro Señor Yahweh!

Dionne White

(www.elijahlist.com)

 

viernes, 14 de octubre de 2022

“¡Las puertas de la victoria ahora están abiertas!”

Por Lana Vawser

Pude oír al Señor que decía: “¡Las puertas de la victoria ahora están abiertas!”

Sentí que ahora el Señor está exponiendo las áreas que el enemigo retuvo (las cosas en las que el enemigo trabajó duro para mantener al pueblo de Dios fuera de su lugar de victoria). En este momento está ocurriendo un avance significativo. Un aumento significativo en la aceleración y el impulso para el avance de la victoria que está sobre ti. Las áreas donde el enemigo trató de mantenerte lejos de la victoria que es tuya en Cristo, están siendo desmanteladas. El Señor se está mostrando fuerte como tu gran defensor y te levantarás victorioso.

No te retraigas. El enemigo está haciendo todo lo que puede para mantenerte enjaulado y alejarte del lugar de la victoria manifiesta, pero sus ataques se están desarmando y desmantelando. El Señor está liberando una estrategia específica y una sabiduría divina sobre cómo combatir los ataques que vienen contra ti, moviéndote más hacia la victoria que ya es tuya en Cristo.

La razón por la cual la batalla fue tan fuerte, es debido a la gran magnitud de la victoria de avance que está sobre ti. ¡Te estás moviendo más hacia tu tierra de victoria! No te encojas. No te acobardes por miedo, debes mantenerte en pie. Ahora es el momento de estar de pie.

Efesios 6:10-13: “Por último, fortalézcanse con el gran poder del Señor. Pónganse toda la armadura de Dios para que puedan hacer frente a las artimañas del diablo. Porque nuestra lucha no es contra seres humanos, sino contra poderes, contra autoridades, contra potestades que dominan este mundo de tinieblas, contra fuerzas espirituales malignas en las regiones celestiales. Por lo tanto, pónganse toda la armadura de Dios, para que cuando llegue el día malo puedan resistir hasta el fin con firmeza”.

Las puertas de la victoria se están abriendo ahora sobre tu vida, sobre tu familia, sobre las ciudades y sobre las naciones. Muchos de ustedes están al borde de la mayor victoria que jamás hayan visto en su vida.

Un nuevo nacimiento

A medida que las puertas de la victoria se abren de par en par, liberando el avance y el triunfo de Cristo en tu vida de una manera más grande de lo que nunca viste, vi que ocurría un nacimiento nuevo y súbito (un nacimiento de lo que Dios puso dentro de ti y estableció para ti).

Gran parte de la batalla fue sobre la semilla del destino, y el avance que el Señor colocó dentro de ti y destinó para ti. Una mayor manifestación de la vida abundante que te fue dada en Cristo Jesús (Juan 10:10), va a estallar en mayores formas en tu vida. Se está liberando un gran despertar de vida y el poder de resurrección.

¡Ganaste y ganas!

Tuve una visión y vi a Jesús de pie sobre cada área de tu vida en la que estuviste creyendo para ver el avance y manifestación de la victoria de Cristo. La atmósfera estaba preñada con la verdad del Evangelio de Jesús como el Señor. Un sentido de la victoria de Cristo y la verdad de que todas las cosas que están desalineadas con lo que Él dijo y decretó, ahora se están inclinando ante el nombre de Jesucristo.

Mientras observaba esta visión, vi la sangre de Jesús derramándose por todas estas áreas que necesitaban una victoria de avance. Dijo: “¡Yo pagué por esto! Tú ganaste y tú ganas”. Vi las palabras “tú ganaste y tú ganas”, escritas sobre cada circunstancia y cada situación en su sangre. Estas cosas serán vencidas por el poder de la sangre de Jesús.

Apocalipsis 12:11: “Ellos lo han vencido por medio de la sangre del Cordero y por el mensaje del cual dieron testimonio; no valoraron tanto su vida como para evitar la muerte”.

Tomar la comunión es crucial en este momento y quiero recordártelo de nuevo. Tomar la comunión es una “llave vital” para avanzar y ver la victoria manifiesta de Jesús en tu vida ahora mismo.

“Te mostraré lo que escribí sobre tu vida”

Escuché al Señor que decía: “Te mostraré lo que escribí sobre tu vida”.

El enemigo estuvo trabajando muy duro usando el miedo, la intimidación, la niebla, la confusión y el desánimo, para evitar que “veas” y “escuches” claramente lo que el Señor está diciendo ahora mismo. El Señor te va a mostrar lo que escribió en el libro del destino sobre tu vida y las vidas de los miembros de tu familia.

En la batalla, muchos de ustedes estuvieron lidiando con el miedo y otras cosas, pero el Señor continuará revelando y hablando su verdad y su destino sobre tu vida. La niebla y las cortinas de humo comenzarán a despejarse. Verás con mayor visión y perspicacia los planes de Dios para tu vida y las vidas de los miembros de tu familia, en la nueva temporada en la que estamos.

“Escribirás sobre esto”

Escuché al Señor que decía: “Escribirás sobre esto. Escribirás sobre esta victoria”. Y vi la unción del escriba cayendo fuertemente sobre muchos de ustedes. Escribirán sobre lo que están caminando ahora y las batallas que estuvieron peleando.

Ahora mismo, hay nuevos libros, canciones y escritos que están naciendo dentro de ustedes, sobre los que escribirán mientras caminan a través de esta batalla. Los tesoros, la sabiduría, los conocimientos que están recibiendo del Señor en este tiempo. Escribirán sobre estas cosas y muchos serán animados, recibiendo grandes imparticiones y avances de la enorme unción de rompimiento que descansará sobre esos libros.

Estén atentos a un aumento significativo del favor

El Señor me mostró que a través de estos ataques que muchos de ustedes enfrentaron, el enemigo está trabajando duro para mantenerlos enjaulados. El Señor me habló: “El enemigo trató de enjaular a muchos, pero ahora estoy liberando un mayor favor sobre ellos”.

Debes estar atento a un aumento significativo de favor. Estén atentos a los ascensos significativos y a que el Señor les abra puertas que nunca hubieran podido soñar. Quedará muy claro por qué el enemigo estuvo tratando tanto para enjaularte, mientras el Señor continúa abriendo puertas efectivas grandes y poderosas, colocando un mayor favor sobre ti.

Esto no se trata de intentar esforzarse para que algo suceda. Se trata de descansar en Dios, rendirse a Él y ver cómo establece las cosas, abre puertas y oportunidades y te coloca estratégicamente en lugares donde nunca podrías haberte ubicado.

Un espíritu premonitorio de miedo estuvo atacando a muchos de ustedes sobre su futuro, pero el Señor está decretando: “Tengan esperanzas, porque hay sorpresas poderosas y maravillosas sobre ustedes. ¡Esta es la temporada de las cosas repentinas divinas! Estás en tu lugar de cambio. Observa cómo muchas cosas cambian, de la noche a la mañana. Mis planes para ti son buenos para prosperar y no para dañarte, sino para darte una esperanza y un futuro” (ver Jeremías 29:11).

“¡Estoy haciendo lo que sólo yo puedo hacer! El miedo intentó aplastarte y enjaularte, ¡pero Mi poder te va a dejar atónito!”

Lana Vawser

(www.elijahlist.com)

“¡Levántate y conviértete! Cruzando en la transición”


Por Dr. Sandie Freed

Creyentes

¿No parece que todos tenemos que aceptar un cambio continuo? Según las estadísticas, a la mayoría de la gente no le gusta nada los cambios. Podemos pensar que sí, pero cuando llega el momento de abrazar algo nuevo, se vuelve incómodo. La cuestión es la siguiente: Nos gusta saber hacia dónde vamos. Puede que necesitemos experimentar algo diferente, pero queremos saber cómo es ese “diferente”, ¿verdad?

Desgraciadamente, nuestros problemas anímicos (miedo, inseguridad, preocupación, ansiedad, temor al fracaso, etc.), surgen cuando nos conducen por caminos no transitados y desconocidos. Cuando no estamos seguros o no tenemos claridad durante los tiempos de transición, nos sentimos inestables. Muchos flaquean durante la transición debido a las tentaciones del alma (la carne). 

Sin embargo, queridos, a medida que el Reino de Dios avanza, se requieren más transiciones y cambios. Confiar en el Señor es obligatorio para un ejército que avanza, si se quiere experimentar la victoria y el avance. Sólo Él conoce la estrategia necesaria para cada uno de nosotros en este momento. Sigue leyendo, estoy yendo hacia alguna parte con esto, y sé que lo que Dios me mostró te dará poder, mientras cambias hacia una mayor realización.

Qué dice de ti el Gran Yo Soy

Muchas veces en nuestra mente, finalmente podemos visualizarnos a nosotros mismos llegando y experimentando nuestro avance. Ya sea que se trate de nuestra sanidad, un cambio financiero, que nuestros hijos vuelvan a casa, que nuestros hijos sean liberados de sus adicciones, de nuestra realización, etc.; nuestras claves de avance implican confiar en el Señor en todas las cosas (especialmente en sus directivas), para que lleguemos desde “aquí” hacia “allá”. Estamos en un cambio, pero para llegar allí debemos cambiar y hacer una transición. Todos queremos llegar “allí”, ¿verdad?

¿Dónde está ese lugar? Me refiero a tu tierra (tu tierra prometida). Los israelitas tenían su tierra prometida. Hoy la estudiamos como Canaán, la tierra de los gigantes que había que derrocar, y una tierra de descanso que Dios les había prometido a sus hijos. Hoy no representa necesariamente una tierra literal (aunque para algunos de nosotros podría serlo); sobre todo es una promesa.

Nuestra “tierra de la promesa” es el suelo de nuestras vidas, donde Dios plantó su Palabra (su semilla), y ese suelo produce la promesa que fue sembrada allí por Él. Quizá vino en la forma de una Escritura que Dios le habló a tu corazón, una palabra profética que te entregó o en la forma de un sueño o un ministro a través del cual Dios te habló. Independientemente de cómo lo hayas escuchado o recibido, fue una promesa de Dios en forma de semilla, que fue liberada en la tierra de tu corazón para producir tu “allí”.

En esta época se está revelando mucho sobre nuestra identidad espiritual. Debemos recordar quiénes somos realmente. Somos lo que Él dice que somos. Deja que eso se profundice. Sí, el gran Yo Soy dice: “¡Tú eres! Tú eres quien Dios dice que eres, y sólo el Yo Soy puede llevarte hasta allí”. Con esto quiero decir que Él siempre nos persuade de que somos sus hijos. Romanos 8:14 nos recuerda esta verdad: “Porque todos los que son guiados por el Espíritu de Dios, son hijos de Dios”.

Aquí la palabra “hijos” se refiere a todos nosotros, tanto hombres como mujeres. En los tiempos bíblicos, el hijo recibía la herencia familiar y no la hija. Pero en Cristo, a cada uno de nosotros se nos concedió una herencia real (todos somos “hijos” de un Padre amoroso). Como hijos de nuestros padres naturales, puede haber sido difícil confiar en ellos, pero nuestro Padre celestial es digno de confianza y es fiel. Nuestros padres naturales pueden habernos defraudado, ¡pero Dios nunca lo hará!

Gracias a su fidelidad, podemos apoyarnos firmemente en sus promesas. Sus promesas incluyen la protección divina, la dirección, la provisión y su presencia continua en nuestras vidas. Él es realmente el Guardián de las Promesas (el único en quien podemos confiar plenamente), especialmente durante los tiempos de cambio y transición.

Transición y cruce… ¡otra vez!

La otra semana le hablé a nuestra Iglesia sobre el capítulo 1 de Josué, cuando el Señor le ordenó a Josué que se levantara y cruzara el río Jordán. Era otro momento de transición para él, así como para toda la nación de Israel. Para que Josué siguiera a Dios, primero tenía que levantarse antes de dar cualquier paso en la dirección correcta hacia su destino.

Cuando experimentamos temporadas difíciles, nos deprimimos y nos abatimos, a menudo nos invade un espíritu de desesperanza. Pero de nuevo, si queremos avanzar tenemos que levantarnos, confiar y seguir a Dios. Todo tiempo de transición requiere un tiempo de levantamiento.

El capítulo 1 de Josué nos dice que fue un tiempo difícil para Josué y para todo Israel. ¿Por qué? Porque Moisés estaba muerto. Un día subió a una colina y nunca regresó. Josué y el pueblo de Israel estaban devastados. Lloraron y lamentaron esta pérdida durante treinta días (Deuteronomio 34:8). ¿Puedes imaginar sus pensamientos? Preguntas como estas debieron pasar por sus mentes:

·       ¿Quién nos guiará ahora?

·       ¡Nadie es tan poderoso como Moisés!

·       ¿Quién puede compararse con el hombre (Moisés), a quién Dios utilizó para hablarnos todos estos años?

·       ¿Quién intercederá por nosotros ahora? ¿Quién nos alimentará o nos dará agua?

·       Moisés era el único que podía escuchar a Dios por nosotros. ¿En quién podemos confiar ahora?

Moisés, su líder previamente ungido, estaba muerto y ahora tenían un nuevo líder y una nueva dirección. Cambio. Transición. Tenían miedo.

Sin embargo, Josué fue ungido por Dios para guiar a su pueblo hacia adelante. Fue elegido por Dios para ocupar el lugar de Moisés. Anteriormente fue el siervo y asistente de Moisés, pero ahora era el hombre clave. Su transición requería que se levantara y abrazara una transición de identidad, para entrar en una transición territorial. Lo mismo ocurre con nosotros hoy.

¡Levántate y conviértete!

Estuve hablando proféticamente sobre la revelación de nuestro ADN e identidad espiritual desde hace mucho tiempo. Sin repetir lo que se proclamó sobre nuestra identidad espiritual, permítanme ser contundente por el bien de este artículo: “Debemos levantarnos y convertirnos”. ¡Esta es la única manera de poder cruzar en esta temporada!

¡El Señor entendió el desafío de Josué! Como Josué probablemente estaba intimidado, desprevenido e inseguro, el Señor le dijo tres veces que fuera fuerte y valiente. Necesitaba recuperar la fuerza y el coraje que alguna vez tuvo. Si recuerdas, unos cuarenta años antes (cuando fueron enviados como espías a la Tierra Prometida), Caleb y Josué regresaron con un buen informe, diciendo que eran capaces de tomar la tierra. Aunque Josué vio gigantes en la Tierra Prometida, ¡confió plenamente en que Dios les daría la victoria!

Sin embargo, durante los siguientes cuarenta años en el desierto, soportó la muerte de toda una generación. Ahora se enfrentaba al reto de levantar una generación completamente nueva de guerreros que ni siquiera sabían luchar. Necesitaba coraje porque al mirar su situación en lo natural, parecería algo desesperado. Josué no había realizado ningún milagro y no había ninguna demostración externa de la gloria y el poder de Dios en su vida. ¿Cómo podría Josué convencer al pueblo para que lo escuchara y siguiera su ejemplo?

Piensa ahora en todo lo que Josué pudo haber estado pensando y diciéndole a Dios: “Señor, ¡esta gente me va a comparar con Moisés! ¡Yo no soy un Moisés! Moisés fue un líder impresionante, Dios. ¿No recuerdas todo lo que hizo? ¡Moisés tenía una vara impresionante! Todo lo que tengo es esta espada”

·       Moisés convirtió el Nilo en sangre

·       Lo usaste para proclamar las plagas en Egipto

·       Condujo a Tu pueblo en el Éxodo

·       Abrió el Mar Rojo y lo cruzaron en seco

·       Sacó agua de una roca, ¡de una roca! Y más...

·       ¡Dios! ¡No creo que pueda hacer todo eso!

Josué sabía que no podía llenar los zapatos de Moisés. Todo estaba cambiando y ellos estaban en una gran transición. Era el comienzo de una nueva temporada. Lo viejo se había ido, lo nuevo estaba allí.

Dios promete su presencia

¿Cómo consiguió Josué la fuerza para levantarse? ¿Cómo se levantó con el coraje necesario para dirigir a toda una nación hacia un nuevo territorio? Fue gracias a esto: Dios prometió estar con él. Si estudias detenidamente Josué 1, notarás que en el verso 5 Dios le aseguró: “... Así como estuve con Moisés, así estaré contigo. No te dejaré ni te abandonaré”.

En los versos 6-9, Dios le encargó a Josué estas directivas:

1) Sé fuerte y valiente

2) Sé obediente

3) Sigue sus directivas

4) No tengas miedo ni te desanimes

En el verso 9, Dios dijo estas palabras que sellaron el acuerdo para Josué: “... porque el Señor tu Dios estará contigo dondequiera que vayas”. Josué guiaría al pueblo de Dios porque se hizo fuerte y valiente. Se volvió obediente. Se convirtió en un líder que confiaba y seguía. Josué se convirtió en el líder que Dios dijo que sería: “fuerte, valiente, obediente y seguía sus directivas”. Pero, aún más importante, confió en Dios durante la transición porque, así como Él fue fiel con Moisés, ahora prometía ser fiel con él.

Lo mismo ocurre con nosotros hoy. Estamos en una transición de muchas maneras, pero la principal transición que estamos experimentando, es el proceso de convertirnos en lo que Dios dice que somos. Si creemos estar sanos, estamos confiando en Dios para nuestra sanidad. ¡Pero es más que eso! ¡Se trata de convertirse en el sanado!

La transición desde un lugar de enfermedad hacia una tierra de salud, puede requerir un milagro, sí. ¿Y no estamos agradecidos por eso? Por supuesto. Pero, en última instancia, es una transición, un cambio y un proceso de transformación, para llegar a ser todo lo que Dios quiere que seamos.

¡No recorriste este camino antes!

En Josué 3, leemos que llegó el momento de cruzar el Jordán. Como Dios lo ordenó, los sacerdotes que llevaban el arca del Pacto debían cruzar primero el Jordán. El arca era un símbolo de la presencia de Dios; así que el Señor le estaba demostrando a su pueblo que su presencia iba delante de ellos, como había prometido estar con ellos. Josué le dijo al pueblo: “Cuando vean el arca del pacto del Señor su Dios, y a los sacerdotes levitas que la llevan, abandonen sus puestos y pónganse en marcha detrás de ella. Así sabrán por dónde ir, pues nunca antes han pasado por ese camino. Deberán, sin embargo, mantener como un kilómetro de distancia entre ustedes y el arca; no se acerquen a ella” (Josué 3:3-4).

El pueblo debía fijar su mirada en el arca de la alianza, pues Dios redirigía el foco de su viaje desde sus incertidumbres hacia su constancia. Les decía lo siguiente: “Sé que no hicieron esto antes, pero si mantienen sus ojos en mí, les mostraré el camino”.

Su presencia es más importante que sus regalos

Era la forma en que Dios decía, una vez más: “Como fui... así seré”. El Dios “que Es, que Era y El que ha de venir” (Apocalipsis 1:4) sigue prometiendo lo mismo para nosotros hoy. Si su presencia va con nosotros, ¿cómo podemos fallar? Donde Él va, lo sigue su gloria. Durante muchas décadas nos hemos centrado en sus dones, sus “regalos” (dones para la Iglesia). Sin embargo, nos pide que confiemos en su presencia. Durante años nos hemos centrado en nuestra “tierra”. Pero, si mantenemos nuestros ojos fijos en su presencia y clamamos por ella, ¡Él nos dará la tierra! Puede que nunca hayamos estado así antes, pero podemos entrar en el descanso de saber esto: “Como fui... así seré...”.

Mi oración por nosotros

“Padre Dios, danos el poder para buscarte a Ti y a tu presencia divina. Le prometiste a Josué que lo guiarías y estarías con él. Le prometiste que estarías con él como estuviste con Moisés. Esa promesa le dio poder a Josué para que pudiera levantarse, tomar valor y convertirse en Tu líder. Señor, cada uno de nosotros cree que, en nuestro tiempo de transición, mientras cruzamos hacia nuestro nuevo territorio y destino completo, Tú estás con nosotros. Nos darás el poder para convertirnos en lo que Tú dices que somos”.

“Tomamos valor y nos levantamos, sabiendo que Tu presencia va delante de nosotros. Te honramos, confiamos en Ti y te amamos. Mientras permanecemos fijos en Ti, confiamos en que Tú nunca nos dejarás o nos abandonarás, y todo lo que prometiste hacer, seguramente lo harás. Mientras todos hacemos la transición, estamos decididos a ser fuertes y valientes, y a hacer avanzar Tu Reino. En el poderoso nombre de Jesús te lo ruego, ¡amén!”.

Sandie Freed

(www.elijahlist.com)