Por Doug Addison
Entregada por Doug Addison el 14 de mayo de 2014
Mayo es el tiempo cuando las cosas nuevas brotarán y comenzarán a reunirse. Debemos poner atención a las puertas y a las oportunidades que se abrirán repentinamente. Estamos entrando en un tiempo nuevo donde las cosas ocurrirán repentinamente. El diccionario Webster define la palabra repentino como “algo que ocurre rápidamente y sin previo aviso”. Es tiempo de estar preparado para un cambio repentino.
Regresan los vientos de cambio
Tuve un encuentro con un ángel el martes 6 de mayo a la 1:30 am. Un ángel poderoso entró en mi casa y permaneció allí casi todo el día. El ángel que vino fue similar al que me visitó dos años atrás. Esa vez tuve un encuentro con un ángel llamado Viento de Cambio (no Vientos de Cambio). Fue en Denver, el 20 de abril del 2012, cuando entregué la palabra profética para mayo de ese año y obtuve una respuesta asombrosa por parte de los lectores.
Ahora, dos años más tarde, Viento de Cambio regresó. En el 2012 tuve una visión en un sueño donde venía un viento, soplaba cosas de una manera violenta y como resultado, todo se reorganizaba. Estará seguro si se mantiene cerca de Dios. Mayo es el comienzo del Viento de Cambio. Podría llamarlo con más precisión el viento de cambio repentino. Las cosas comenzarán a realinearse de una manera divina. Aquellos que oyeron a Dios decir “espera” y esperaron obedientemente durante largo tiempo, ¡ahora serán liberados! Está quebrando el desaliento, la depresión, los pensamientos suicidas y el auto sabotaje.
Sueño profético acerca de Chicago: La ciudad de los vientos
Tuve un sueño profético el mes pasado donde vivía en un edificio muy alto y los bomberos del programa de TV “Chicago Fire” venían a decirme que todos debíamos ser evacuados. Hermann y Mouch del programa de TV nos pedían disculpas porque no eran capaces de llegar a la cima del edificio a tiempo para salvarnos del fuego. Así como en la palabra profética para este mes, repentinamente tuvimos que movernos porque la cima de ese edificio enorme estaba envuelta en llamas. Dios me habló que de esa manera el fuego del Espíritu Santo estaba llegando sobre Chicago.
Sueño profético sobre la flexibilidad
Tuve un sueño el mes pasado sobre la necesidad de ser flexibles. En el sueño me estaba doblando en todas las posiciones y Dios me habló que era el momento de ser flexible. Este es un momento de cambio de paradigmas. Nos estamos moviendo hacia una nueva era, no sólo un nuevo tiempo, sino una nueva manera de hacer las cosas. Ser flexible nos permitirá tratar con los cambios repentinos que nos esperan.
El apóstol Pablo tuvo una revelación asombrosa. En Romanos 12:5, Pablo dijo que somos parte del mismo “cuerpo”. Simbólicamente, Pablo comparó a la Iglesia con un cuerpo. Entonces, en Cristo todos conformamos un sólo cuerpo y cada miembro le pertenece a todos los demás.
Romanos 12:5
John Wimber dijo: “En nuestra búsqueda de la pureza doctrinal, ya no tratamos con otros cristianos de la manera como Dios quiere. Él nos está llamando a la unidad porque quiere que seamos uno”. La historia de la Iglesia evolucionó y desde la reforma protestante de 1517 que trajo los cambios necesarios a la Iglesia, surgieron más de 33000 denominaciones diferentes. Aunque trajo muchos cambios importantes, nos transformamos en una mayoría dividida.
En 1 Corintios 12:20-26, Pablo habla acerca del hecho que aunque somos muchas partes, seguimos formando parte de un cuerpo de creyentes y no podemos decir que prescindimos de ciertas partes. Nos guste el otro o no, en realidad nos necesitamos.
1 Corintios 12:20-21 dice: “Lo cierto es que hay muchos miembros, pero el cuerpo es uno solo. El ojo no puede decirle a la mano: No te necesito. Ni puede la cabeza decirles a los pies: No los necesito”.
Para poder entrar en el nuevo tiempo o era a la cual Dios nos está llamando, debemos sanar nuestras divisiones. Somos “uno”, sin importar cuales sean nuestras diferencias doctrinales.
“Caín habló con su hermano Abel. Mientras estaban en el campo, Caín atacó a su hermano y lo mató. El Señor le preguntó a Caín: ¿Dónde está tu hermano Abel? No lo sé, respondió. ¿Acaso soy yo el que debe cuidar a mi hermano? ¡Qué has hecho!, exclamó el Señor. Desde la tierra, la sangre de tu hermano reclama justicia. Por eso, ahora quedarás bajo la maldición de la tierra, la cual ha abierto sus fauces para recibir la sangre de tu hermano, que tú has derramado. Cuando cultives la tierra, no te dará sus frutos, y en el mundo serás un fugitivo errante” (Génesis 4:8-12).
Cuando Caín mató a su hermano, Dios dijo: “La sangre de tu hermano clama ante mí”. Caín cayó bajo una maldición que lo llevó a trabajar arduamente y nunca pudo avanzar, no tuvo descanso y vagó por la tierra sin poder encontrar su destino. Esto mismo ocurre hoy espiritualmente. Cuando hablamos en contra de otros cristianos, cuando los herimos o tratamos de matarlos espiritualmente, podemos caer bajo esta misma maldición. Tenemos la teología donde el Cuerpo es uno, pero no vivimos esta realidad. Nuestro pecado por juzgar a otros nos afecta a todos.
Jesús dijo: “De este modo todos sabrán que son mis discípulos, si se aman los unos a los otros” (Juan 13:35).
Prepárese para los cambios repentinos. Prepárese para amar a la gente que es diferente a usted y prepárese para que Dios se mueva en su vida, realineándolo de una manera divina para que sea más efectivo.
Bendiciones,
Doug Addison
(www.elijahlist.com)
Se abrió una puerta nueva: ¡Lo nuevo está aquí!
Por Doug Addison
Una puerta abierta en la dimensión espiritual
Entregué una palabra profética en Mayo acerca de cambios repentinos que venían y acerca del ángel Viento de Cambio. Durante el fin de semana del 30 de Mayo, se abrió una nueva puerta en la dimensión espiritual que nos introducirá en un nuevo tiempo de cambios radicales para bien. Tuvimos dos terremotos en el sur de California y no sólo sentimos ambos, Dios me habló durante los sacudones.
El primero fue el viernes 30 de Mayo y tuvo una intensidad de 3.8, esto ocurrió cerca de San Pedro (la roca). Pude oír al Espíritu Santo que decía “prepárate para algo nuevo”. Dios va a “sacudir” las cosas y ocurrirán cambios radicales. Me sentí impulsado a “prepararme”, así que compré algunos elementos de prevención para terremotos. El domingo 1 de Junio, cerca de las 8 pm y justo cuando estaba instalando en mi televisor las correas de seguridad para terremotos, otro temblor sacudió el área de Los Ángeles.
Estos fueron terremotos muy tenues y no hubo mayores daños. Era una señal profética que anunciaba la llegada de algo nuevo. Esta no es una palabra de juicio. El primer terremoto fue de 3.8 y el segundo ocurrió mientras estaba asegurando mi “televisor” (el receptor de visiones). Esto simboliza que Dios está trayendo nuevas visiones y un nuevo fundamento en la manera de manifestar estas visiones en el plano natural.
El Señor me llevó hacia Apocalipsis 3:8, donde dice: “Conozco tus obras. Mira que delante de ti he dejado abierta una puerta que nadie puede cerrar. Ya sé que tus fuerzas son pocas, pero has obedecido mi palabra y no has renegado de mi nombre”.
Las puertas representan nuevas oportunidades y nuevos tiempos. Nuevas fuerzas y autoridad espiritual vienen sobre los que se sienten débiles y perseveraron en las palabras y las promesas proféticas. La puerta nueva se abrió y podremos ver que las cosas se activan.
Quiero compartir algunas cosas que aprendí sobre responder a algo de esta magnitud.
A menudo las cosas parecen lo opuesto
Como Dios se está moviendo y abriendo puertas nuevas, recuerde que a veces las cosas se ven opuestas, justo en el momento anterior a la apertura. Me mantuve diciéndole esto a la gente porque es crucial comprender esto ahora. Mientras Dios está soltando algo nuevo en su vida, no se sorprenda si el enemigo viene a tratar de distraerlo. Un espíritu hipnotizador está trabajando tiempo extra para hacer que veamos los problemas y no las soluciones. Esto hizo que volvieran a brotar recientemente los pensamientos y patrones de conducta antiguos. Aunque durante un tiempo nos sentimos excitados, terminamos sintiéndonos desalentados. Debemos tener mucho cuidado para no ponernos de acuerdo con los ataques del enemigo.
Mateo 18:18–19 dice: “Les aseguro que todo lo que ustedes aten en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo. Además les digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que está en el cielo”.
Estas son buenas noticias: Mantenga el curso y atravesará la niebla. El comienzo de Junio la levantará y entre Julio y Septiembre, tendremos un sentimiento diferente que dará paso a la libertad espiritual.
Se removieron los límites
Dios no tiene límites. En consecuencia, todo lo que hagamos por medio de su poder, su amor y su fuerza, tampoco tendrá límites. Tenemos acceso a todo lo que necesitamos para tener éxito. Tenemos paz con Dios, el poder que levantó a Jesús de la muerte está en nosotros, tenemos al Espíritu Santo y a la red de los ángeles de Dios. Tenemos la palabra y las promesas de Dios, tenemos amigos y gente que nos ama y ora por nosotros. Sí, tenemos una cantidad de recursos, entonces debemos asegurarnos de usarlos correctamente.
Filipenses 4:13 dice: “Todo lo puedo en Cristo que me fortalece”.
Mateo 19:26 dice: “Para los hombres es imposible, aclaró Jesús, mirándolos fijamente, más para Dios todo es posible”.
¡Vuelven los desterrados! ¡Vuelven los proscriptos!
Estuve hablando muchos años sobre el mover de Dios que está por venir sobre los que fueron desterrados o proscriptos dentro del cristianismo. Ahora mismo existe un grupo de personas que se mantuvo en reserva y hará cosas en el Espíritu que serán asombrosas. En este momento no encajan en ninguna parte y no se dan cuenta quienes son en realidad. Muchos de ellos parecen sin esperanzas. Algunos crecieron en la Iglesia pero fueron heridos y vagaron por la vida. La mayoría de ellos tiene un sentimiento profundo que hay algo más que cumplir en la tierra, pero no saben qué es.
Hace algunos años Dios me mostró que este grupo y este nuevo mover que viene, es similar al de Isaías 44:3-5: “… que regaré con agua la tierra sedienta, y con arroyos el suelo seco; derramaré mi Espíritu sobre tu descendencia, y mi bendición sobre tus vástagos, y brotarán como hierba en un prado, como sauces junto a arroyos. Uno dirá: ‘Pertenezco al Señor’; otro llevará el nombre de Jacob, y otro escribirá en su mano: ‘Yo soy del Señor’, y tomará para sí el nombre de Israel”.
Viene un nivel de compromiso sobre una generación de personas que vivieron tiempos de sequía. Pronto entrarán en escena y tendrán un compromiso asombroso con el Señor. Todo mi ministerio y mi llamado apuntan a ayudar a esta gente que son “desterrados o proscriptos espirituales”. Ya comenzaron a levantarse. En realidad no se encuentran en una repisa olvidados por el tiempo, son lo mejor de lo mejor que fue salvo para entrar en escena en el tiempo correcto. Las cosas que Dios está haciendo ahora mismo comienzan fuera de los locales donde nos congregamos y pueden parecer extrañas para aquellos que no tienen “ojos espirituales para ver”, como dijo Jesús.
Si conoce a alguien que encaja en la descripción de desterrado o proscripto, quizá sus hijos, sus nietos o alguien que ama que hoy se encuentra descarriado, aquí tiene una promesa de Dios para ellos. Esto es lo que el Señor dice en Jeremías 31:16-17: “Reprime tu llanto, las lágrimas de tus ojos, pues tus obras tendrán su recompensa: tus hijos volverán del país enemigo, afirma el Señor. Se vislumbra esperanza en tu futuro: tus hijos volverán a su patria, afirma el Señor”.
¡Lo nuevo está aquí!
Espere continuar viendo que estas cosas ocurren a un paso acelerado. Nos estamos moviendo hacia un tiempo donde podremos concretar más cosas con un menor esfuerzo. Las claves para este nuevo tiempo son mantener la paz, rechazando la duda y el temor. Pídale a Dios que le muestre en qué debe enfocarse, especialmente para este tiempo.
¡Estar vivo en un tiempo como este es asombroso!
Bendiciones,
Doug Addison
(www.elijahlist.com)