“Una carga profética para Junio del 2016”

Por Steve Porter

Visión de la siembra de semillas

En una visión pude ver un campo enorme listo para que se sembraran las semillas que darían una cosecha. El sol alumbraba gentilmente, el campo estaba arado y listo para alguien que tuviera una visión para algo más que solo una parcela vacía, anhelando hacer la obra y perseverar hasta que algo ocurriera.

Pude percibir que el Señor me mostraba que también tenía un campo espiritual que es necesario sembrar para una cosecha futura. ¿Encontrará obreros lo suficientemente tenaces para que en este Junio siembren la semilla, con un sentido de desesperación algo mayor al resto de la Iglesia? Dios quiere plantar mucho más y tiene una cosecha abundante para nosotros.

También pude ver una desesperación que golpeaba al Cuerpo de Cristo en Junio del 2016, un deseo creciente por buscar al Señor y ver su mano moviéndose por toda la tierra como nunca antes. Pude oír la palabra “perseverar”. Pude ver reuniones corporativas convocadas fuera de la agenda de los hombres para buscar con frescura al Señor, perseverando en un mover profundo en la gloria, buscando humildemente lo que Dios quiere que hagamos, dejando a un lado los planes y propósitos humanos.

Percibí que el Señor decía: “Mientras mi pueblo busca mi rostro en primer lugar, con un corazón hambriento y sincero, los sorprenderé con una visitación. Cuando me mueva, mi pueblo alcanzará contentamiento solo en mí y no deseará menos que la plenitud de lo que quiero para ellos”.

¡Perseveren!

Percibí al Espíritu impartiendo un deseo profundo por perseverar. Pude ver un deseo renovado de buscar y perseverar, para descubrir las profundidades de los planes de Dios. ¿Qué significa perseverar? ¿Qué significa constreñir al Señor? Cuando oímos la palabra “constreñir”, a veces pensamos en términos de restricción o limitación sobre la actividad de alguien. Pero cuando uso la palabra “constreñir”, estoy hablando de tironear o empujar a alguien.

Constreñir, empujar o presionar habla de una actitud de corazón que desesperadamente quiere acercarse a Dios, alguien que anhela y está excitado por ser su amigo. Pude sentir que el Señor decía: “Anhelo ver una generación con un hambre profunda por perseverar. Tienen el deseo de constreñirme, acercándose para habitar conmigo para siempre”.

En la Concordancia de Strong, la palabra “constreñir” se define como compeler, urgir y presionar. Este no es un pedido ordinario, sino persistente, un clamor profundo que como resultado los lleva a perseverar y mantenerse cerca, oyendo la voz suave y pequeña del Espíritu. Es un corazón que Avanza hacia un nivel más profundo de comunión que no se puede satisfacer con un encuentro casual.

¿Cuánta gente conocemos ahora mismo que no quiere más que un encuentro casual con Dios? “Oh, Dios, solo ven y bendíceme. Oh Dios, solo haz algo”. Pero no le reclaman que venga y se mantenga cerca. Encuentro que si lo buscamos profundamente y perseveramos, Él vendrá y se encontrará con nosotros. Sentí que el Señor cortejaba a su pueblo para que se acerque a Él en Junio, porque tiene mucho para revelarnos en los días por venir, si tenemos oídos para oír y esperamos en Él.

El problema es que amamos nuestros relojes. Si el Señor no se manifiesta después de cinco minutos, nos retiramos cansados para ir hacia la siguiente actividad. Si no vemos resultados luego de una hora, nos desalentamos. Necesitamos preguntarnos: “¿Hay algo tan profundo dentro de mí que no puedo resolver sin clamar al Señor?”. Clamemos a Él y digamos: “Jesús, Hijo de David, ven a mi vida y muévete por tu Espíritu. Ven por tu Espíritu y háblame. Ven por tu Espíritu y habla a través de mi casa. Quiero tu presencia 24/7. Jesús, trastorna mi vida en este tiempo”.

¡Siembre semillas en Junio para los tiempos que vienen!

¿Es solo una oración, algo que decimos sin convicción o en realidad lo deseamos profundamente con todo nuestro corazón? Si esto significa todo para nosotros y no bajamos los brazos derrotados, Él vendrá y se moverá en nuestra vida durante este tiempo, pero Él quiere que usted sepa cuál es el negocio central. ¿Realmente quiere decir negocio? Muchos dicen que quieren perseverar, pero cuando son probados, la verdad es que solo fue un mero servicio de labios.

Vale la pena buscar a Jesús, el dulce Maestro, sin importar lo que requiera. Si necesitamos perseverar en oración y ayuno durante semanas, entonces debemos hacerlo. Solo debemos hacerlo. Persevere y constriña al Señor para que se presente y se manifieste en este tiempo, resistiendo la tentación de abandonar antes de ver qué ocurre. El Señor dice: “No desperdicies otro tiempo, ¡persevera!”.

Sentí que el Señor le pedía a su Iglesia que sembrara semillas este Junio para los tiempos que vienen. Él está buscando que perseveremos con tenacidad para estar en el lugar secreto. Si queremos más de Dios, no podemos aceptar un no como respuesta, porque Él quiere esa clase de comunión con nosotros, más de lo que podemos soñar. ¡No abandonemos!

Steve Porter

(www.elijahlist.com)