“Dios dice: Quiero que mi pueblo se ponga de acuerdo con el Cielo”

Por Sandie Freed

La Navidad está llena de mucho gozo. Amo las luces, los árboles de Navidad y los adornos, sin mencionar las reuniones con los amigos y la familia.

Entre todos los festejos de Navidad y los programas ministeriales, le pedí al Señor que me diera la dirección profética para el año que viene. Creo que el Señor le habló a mi corazón sobre un mayor acuerdo con Él y su Palabra para el 2011. Pude oírlo decir: “En el 2011, quiero que mi pueblo se ponga de acuerdo con el Cielo”. No estoy escribiendo sobre este tema porque rima o porque suena bien para el año. Creo que Dios es muy serio sobre el entendimiento que cada uno debe tener sobre la importancia del acuerdo con lo que Él dice sobre nosotros, nuestro futuro y nuestras relaciones con Él, especialmente para este próximo año.

Estar de acuerdo con Dios significa tener sus pensamientos. En otras palabras, desarrollaremos la mente de Cristo en nosotros como nunca antes. Algunas de las definiciones de la palabra “acuerdo” son: “tener la misma mentalidad, armonizar en opinión, vivir en concordancia o sin contención, asentir”. Hay tres palabras que el diccionario Webster usa para definir la palabra acuerdo: “concordia, armonía y conformidad”.

La unidad desata vida y victoria

Creo que el Señor nos está pidiendo que nos rindamos a su dirección divina en los próximos años y nos determinemos a vivir en concordia o unidad con su Palabra. ¿Qué significa esto? Bien, si observamos lo que Dios dice sobre la unidad, nos damos cuenta que trae vida. El Salmo 133 es un ejemplo perfecto de cómo la unidad desata la vida de Dios sobre el pueblo. Si sólo comprendiéramos que cuando nos ponemos de acuerdo absolutamente con la voluntad de Dios y su Palabra, sopla vida sobre nosotros, así como sobre nuestras situaciones. Aunque hay mucho más sobre ponernos de acuerdo con Dios. Mateo 18:18-19 explica el principio del poder del acuerdo para la guerra espiritual: “Les aseguro que todo lo que ustedes aten en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desaten en la tierra quedará desatado en el cielo. Además les digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen de acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi Padre que está en el cielo”.

En este pasaje Jesús estaba diciendo que tenemos el poder para atar al enemigo si nos ponemos de acuerdo con el Cielo. La palabra acuerdo en este pasaje es el término hebreo sumphoneo, el cual una vez más significa estar en unidad o en armonía. Sin embargo, está conectado con la palabra phone, que se describe como ruido, sonido o voz. Podemos decir que Jesús nos instruía para entrar en unidad con el sonido y la voz del Cielo, ¡con la voz de Dios! Ahora esto tiene mucho más sentido cuando atamos los poderes de las tinieblas, ¿cierto?

Quiero que el 2011 sea un año de apertura. Creo que será así si nos ponemos de acuerdo con la voz de Dios. Debemos estar en unidad con lo que Dios nos instruya o lo que dice su Palabra para que podamos experimentar vida y victoria.

¡Nuestro odre necesita estar de acuerdo con los planes de Dios!

En otro estudio sobre el acuerdo, usé el pasaje con el que comienzo esta página. Enseñé sobre los odres varias veces, pero creo que hay una revelación actual para nosotros en este pasaje: “Les contó esta parábola: Nadie quita un retazo de un vestido nuevo para remendar un vestido viejo. De hacerlo así, habrá rasgado el vestido nuevo, y el retazo nuevo no hará juego con el vestido viejo. Ni echa nadie vino nuevo en odres viejos. De hacerlo así, el vino nuevo hará reventar los odres, se derramará el vino y los odres se arruinarán. Más bien, el vino nuevo debe echarse en odres nuevos. Y nadie que haya bebido vino añejo quiere el nuevo, porque dice: El añejo es mejor” (Lucas 5:36-39).

Veamos de cerca el primer verso. Léalo en voz alta. ¿Notó que lo nuevo no está de acuerdo con lo viejo? Analizándolo espiritualmente, podemos concluir que mientras Dios está derramando su vino nuevo (nueva revelación y entendimiento fresco de su Palabra) donde todo entendimiento, revelación o manera de pensar vieja, no estarán de acuerdo o en unidad con lo nuevo. En otras palabras, no habrá vida en nuestros odres si no abrazamos por completo lo nuevo. Colgarnos en algo viejo (viejos hábitos, creencias, etc) impedirá nuestra habilidad para caminar plenamente en unidad con Dios. Debemos ponernos de acuerdo en todo con Dios para que pueda hacer de nosotros un odre nuevo, sólo ahí podremos experimentar la vida abundante.

Si lee el último verso, leerá que muchos desearán colgarse de lo viejo por creer que es mejor. Habrá una gran tentación para mantenernos en lo que nos es familiar. Abrazar lo nuevo requerirá cambios y algunos se resisten a avanzar en unidad con Dios. Sin embargo, creo que si nos ponemos de acuerdo con lo que Dios dice, nos llenará de poder para movernos en lo nuevo con gran confianza.

Venciendo pensamientos de pobreza

Estoy completamente segura que muchos cristianos están pasando por momentos financieros difíciles durante este tiempo. En Navidad la presión moneraria es más difícil. Quiero desafiarlo a no permitir que la depresión le impida gozarse en este tiempo. Escribí un libro completo sobre cómo vencer la mentalidad de pobreza y caminar en victoria.

En mi libro, “Destruyendo los espíritus de codicia y pobreza: cómo discernir y derrotar los poderes de Mamón y Babilonia”, ministré específicamente al corazón de los creyentes que están peleando con las finanzas. Por favor no permita que sus errores financieros le roben las oportunidades de ponerse de acuerdo con Dios sobre su futuro. Su viejo odre, remojado en las decepciones y la amargura, no estará de acuerdo con la voluntad de Dios que lo removerá de los desafíos del pasado. Dios quiere que camine en una victoria y paz absoluta.

Es tiempo para que su odre se ponga de acuerdo con la Palabra de Dios sobre su futuro. Mientras “deja ir lo viejo”, permita que mueran los errores del pasado. Usted no puede cargar las derrotas de su pasado hacia su futuro y caminar en victoria. Cada derrota que lleve hacia el nuevo tiempo, saboteará sus nuevos comienzos. Tome un momento para confesarle al Señor sus derrotas del pasado y luego reciba su amor y poder para avanzar. Será renovado mientras se pone de acuerdo con su Palabra sobre su futuro.

Permítame hacerle esta pregunta: ¿Cuánto tiempo pasó desde que trabajó por sus profecías personales y oró por ellas? Creo que antes de entrar en el año nuevo, debemos hacer esto. Mientras lo hacemos, recibiremos una visión fresca para los tiempos por venir. Rescate esas profecías y póngase de acuerdo con Dios. Esto lo posicionará correctamente para el año que comienza.

Poniéndonos de acuerdo con otros

Particularmente amo este pasaje en 2 Corintios 13:11-14: “En fin, hermanos, alégrense, busquen su restauración, hagan caso de mi exhortación, sean de un mismo sentir, vivan en paz. Y el Dios de amor y de paz estará con ustedes. Salúdense unos a otros con un beso santo. Todos los santos les mandan saludos. Que la gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios y la comunión del Espíritu Santo sean con todos ustedes”.

Cuando nos ponemos de acuerdo con los demás se desata la paz. No quiero decir que debemos ponernos de acuerdo sin pensar con cualquier viento de doctrina u opinión. No, este pasaje se relaciona con vivir en armonía. Cuando existe armonía hay combinación. Una sinfonía tiene diferentes instrumentos y cada uno con un sonido único, cuando se toca cada uno, armonizan y se combinan para hacer un sonido único. A esto se refiere este pasaje: un sonido. Este sonido único debería reflejar el sonido del Cielo. Cuando nos ponemos de acuerdo con otros, se suelta aún más vida.

El Príncipe de Paz

Jesús es el Príncipe de Paz. Vino para danos paz. Esta no es la paz que el mundo nos puede dar, es una paz sobrenatural. Sin embargo, sólo podremos experimentar este tipo de paz cuando estamos de acuerdo con Él.

Creo que en el 2011 experimentaremos mucho gozo y paz mientras caminamos en unidad con el Cielo. Podremos ser desafiados con algunas dificultades porque vivimos en un mundo caído, pero si estamos de acuerdo con lo que dice Dios, experimentaremos esperanza, paz y vida abundante.

Oro por cada uno para que tenga un hermoso año 2011.

En Él,

Sandie Freed