miércoles, 24 de enero de 2018

“2018 es una año para discernir, liberar, restaurar y recuperar”



Por Jennifer Eivaz

Mientras analizaba el 2017, definitivamente probó ser un año de reajuste como lo profetizaron muchos. También fue un año de recompensa y lo que parecía ser un año tipo “todo lo que quieras”. Creo que esta afirmación profética sigue muy activa mientras entramos en el 2018. Por esa razón, veremos muchas palabras proféticas diversas que se impartirán en los próximos días. No es una falta de unidad profética, sino más bien una abundancia profética que se imparte en el tiempo y el propósito de Dios, en respuesta a las oraciones llenas de esperanza de su pueblo.

“Estamos siendo restablecidos. Regresa la honra sobre nuestra vida”

Una de las directivas más fuertes que recibí personalmente para el 2017, fue orar este verso sobre mí misma y para alentar a otros a hacer lo mismo: “Crea en mí un corazón limpio, Oh Dios” (Salmo 51:10).

Estemos atentos a los ladrones de la gloria
Mientras oraba sobre esto, el Espíritu Santo comenzó a hablarme sobre el orgullo y especialmente sobre el espíritu de Leviatán. El Leviatán es un principado, también conocido como el príncipe del orgullo. El pasaje de Job 41 lo describe con detalle, comenzando con la pregunta: “¿Puedes pescar a Leviatán con un anzuelo, o atarle la lengua con una cuerda?” (Job 41:1) y termina diciendo “mira con desdén a todos los poderosos; ¡él es rey de todos los soberbios!” (Job 41:34). El orgullo es una actitud, pero también es un espíritu. Este espíritu quiere altura y busca invadir los lugares altos. Quiere infectar a la gente en los lugares altos porque es un ladrón de gloria. Roba la gloria que debería ir hacia Jesucristo.

La gente infectada por el Leviatán actuará con mayor altura, mejores y superiores a usted. Tendrán una actitud altanera y poderosa. Pelearán con fuerza para ser correctos, pero a expensas de nosotros. Santiago 4:6 dice que Dios resiste a los orgullosos, pero honra a los humildes. El pasaje de Lucas 14:11 dice que Dios exalta al humilde. Dios quiere a su pueblo humilde en los lugares altos y no a la gente gobernada por el orgullo.

Mientras observaba a este espíritu surgiendo en algunos a mi alrededor, el Señor me enseñó cómo asumir un “perfil bajo” en situaciones donde prefería más ser elevada. Me dijo: “No puedes pelear contra el orgullo con más orgullo. Debes pelear contra el orgullo con humildad, aprendiendo a pelear sobre tus rodillas”. Decir esto es más fácil que hacerlo, porque los que están alineados con el Leviatán exhibirán un comportamiento muy similar.

En resumen, una vez que aflora el espíritu de orgullo, la persona deja de ser razonable, racional o incluso alcanzable. El orgullo endurece el corazón y aprisiona la mente con un pensamiento altanero falso. El orgullo resiste el consejo. El orgullo resiste la convicción del Espíritu Santo. El orgullo provoca conflictos locos, porque es el cuchillo que mata las relaciones y los ministerios.

Debemos rechazar el orgullo. La Biblia nos muestra que un corazón endurecido no puede ver o discernir al Espíritu del Señor. Si no tratamos con el orgullo, seremos inefectivos para caminar en la dirección profética clave del Señor para el 2018.

2018 es el año para discernir, liberar, restaurar y recuperar
Durante los últimos tres años, sentí un llamado claro para entrenar y equipar profetas, especialmente videntes, y hemos abierto varias escuelas para hacerlo. Sin embargo, cuando observo la primera mitad del año 2018, sentí un cambio y una carga distinta del Espíritu Santo. El Señor impresionó mi corazón con esta palabra: “2018 es el año para discernir, liberar, restaurar y recuperar”. Esta es la razón por la cual en Marzo desarrollaremos una “Escuela de sanidad interior y liberación”, en lugar de una escuela para entrenar profetas. El Espíritu del Señor me mostró que está impartiendo claves nuevas desde el Cielo para sanar y liberar a su pueblo, algo que caminará junto al ministerio profético en general. El Señor insistió en mi corazón que el ministerio profético debe tener un fuerte perfil de liberación. 

Por la unción y la sabiduría del Espíritu, sanaremos las almas fragmentadas y destrozadas para cerrar las puertas abiertas que usan los demonios para atormentar a sus víctimas. Echaremos demonios con una nueva autoridad en el Nombre de Jesús. Puedo ver un efecto dominó de esto. Puedo ver la restauración de la gente, las familias, las ciudades y las naciones. Pude ver la recuperación de las cosas que fueron robadas por generaciones.

Podremos discernir
Viene sobre el Cuerpo de Cristo el don de discernimiento de espíritus como nunca antes. El Señor nos está dando ojos para ver lo que está en la oscuridad, para no quedar en la oscuridad. No podemos pelear efectivamente hasta conocer contra qué estamos peleando. El Señor también está añadiendo dimensión a nuestro discernimiento espiritual. El diccionario Google describe la dimensión como: “Tener longitud, anchura, profundidad y altura”. Básicamente, estamos madurando y ya no seremos estrechos o unidimensionales en la operación del don de discernimiento de espíritus.

“No es una falta de unidad profética, sino una abundancia profética que desatará todo en el tiempo y el propósito de Dios, en respuesta a las oraciones llenas de esperanza de su pueblo”

Por ejemplo, si usted está repentinamente afectado por un dolor de espalda, alguien que se mueve en el discernimiento dimensional podría reconocer que se trata de un problema de salud, un ataque demoníaco o una palabra de conocimiento para otro que necesita sanidad física. Podría ser una señal física de Dios que indica que estamos siendo apuñalados por la espalda por alguien más o un punto de discernimiento que esto le está pasando a alguien más y nos está advirtiendo para que comencemos a interceder. Los que tienen discernimiento dimensional desarrollaron una relación fuerte con el Espíritu Santo y pueden ver y sentir microscópicamente la verdadera raíz de todas las cosas.

Libertaremos
Por la obra de Jesús somos salvos, libres y sanos (usualmente en ese orden). Todos, incluidos los cristianos, necesitan liberación y volverá un énfasis en el ministerio de liberación en el Cuerpo de Cristo. Jesús fue ungido por el Espíritu Santo para sanar a los quebrantados de corazón y liberar a los cautivos (Lucas 4:18). Demasiados cristianos sufren año tras año la persistencia de las artimañas demoníacas y no pueden servir a Jesús victoriosamente, aunque son salvos y cuando mueran entrarán en el Cielo.

Este es un asunto espiritual y requiere la unción del Espíritu para quebrar el yugo. Esta unción viene con énfasis una vez más sobre el Cuerpo de Cristo, pero caminará junto a un discernimiento tremendo. El Señor está elevando el estándar en esta área porque nos ama. El ministerio de liberación es un ministerio de amor.

Restauraremos y recuperaremos
La gente con discernimiento son libertadores e intercesores. Vemos y percibimos las cosas que están ocultas para tratar con ellas. No podemos ceder hasta que el espíritu del asunto sea revelado. El resultado es la restauración. El resultado es la recuperación de las pérdidas. El Espíritu Santo me habló esto el verano pasado y creo que vale la pena repetirlo: “Estoy restaurando, ¡pero con un punto de exclamación!”.

El diccionario describe la palabra “restaurar” como: “Volver a un punto anterior, volver a poner y volver a entregar”. Dios nos está volviendo a establecer en nuestra condición de excelencia. Nos está restaurando a nuestro rango. Recibiremos todo lo que nos robaron. Seremos reparados y renovados de tal manera que será una afirmación muy clara para los que dudaron de nosotros, los que se burlaron y para nuestros enemigos. Estamos siendo restablecidos.

Volverá la honra a nuestra vida
El 2018 será un año para discernir, liberar, restaurar y recuperar. Esta es una directiva profética que requiere nuestra cooperación para ver su manifestación. La sanidad interior y la liberación pueden ser incómodas y desordenadas. Para afirmarnos en la directiva del Espíritu Santo, primero debemos eliminar el orgullo y rendir verdaderamente nuestro ser interior al bisturí del Espíritu de Dios.

Los verdaderos libertadores son aquellos que fueron liberados. Los restauradores son los que fueron restaurados. ¿Está listo?

Oremos: Padre celestial, en el Nombre de Jesús, nos arrepentimos del orgullo. Nos arrepentimos por la dureza de nuestro corazón, por resistirnos al consejo piadoso, persistiendo y demandando en nuestro propio camino. Te pedimos perdón. Rendimos nuestros corazones a tus pies hoy como nunca antes. ¡Queremos que seas el arquitecto de nuestro corazón! Hoy permitimos que el bisturí de tu Palabra y el toque del Espíritu Santo nos transformen desde adentro hacia afuera. Úngenos para ser poderosos en discernimiento, como una nueva generación de libertadores. Impártenos tu gracia para traer una restauración sin precedentes y recuperar las pérdidas. Te damos toda la gloria. ¡Amén!

Jennifer Eivaz

(www.elijahlist.com)

No hay comentarios: