Por Westley Roderick
Todos toman
decisiones de Año Nuevo desde el sillón. Eventualmente terminará en el
gimnasio. Sentado en el sillón no determinará si perderá 10 libras o no, el
resultado estará sujeto a poner en acción lo que dijo que haría. Si hay algo en
usted contrario a su identidad divina, Dios lo perfeccionará con amor y
compasión. Tomará cualquier cosa que no responda a su verdadera identidad como
su hijo o su hija y la llevará hacia la perfección. Debe confiar que ahora mismo está en un proceso a largo
plazo.
Filipenses 1:6 dice: “Estoy convencido
de esto: el que comenzó tan buena obra en ustedes la irá perfeccionando hasta
el día de Cristo Jesús”.
“Dios no terminó con usted.
El lugar donde se encuentra hoy no determinará el sitio donde terminará”
Usted se encuentra en
la mesa del Alfarero. Dios no lo está deteniendo en su proceso a mitad de
camino. Él opera a través de las impurezas en el barro. Las suaviza, las masajea
y las alisa hasta que vuelven a ser blandas como la carne. El Padre toma los
corazones de piedra y los reemplaza por corazones de carne. El mismo que lo
llamó caminará a su lado.
1 Tesalonisenses 5:23-24 dice: “Que Dios mismo, el
Dios de paz, los santifique por completo, y conserve todo su ser (espíritu,
alma y cuerpo), irreprochable para la venida de nuestro Señor Jesucristo. El
que los llama es fiel, y así lo hará”.
“Aquel que te
llamó por nombre es confiable y completará toda la obra en usted” (1 Tesalonisenses 5:24 Passion
Translation)
Dios nos conoce por
nombre. No somos solo un número, somos mucho más para Él. Algo ocurre cuando lo
oye mencionar su nombre, como cuando le dice que lo ama. El Señor tiene todo
bajo control. Una vez le pregunté a Dios: “¿Cómo es la confianza?”. Su respuesta fue: “Confianza es
quitar tus manos del arado y saber que el trabajo se terminará igual”. El reposo y la confianza son sinónimos. Aquel
que lo llamó por su nombre es confiable. No lo abandonará ni lo dejará, porque
habita dentro de usted. Hará todo lo que dijo que haría, porque Dios no es hombre
para mentir.
Los dones de Dios no tienen arrepentimiento
“Cuando Dios
escoge a alguien y le imparte graciosamente dones, nunca serán rescindidos” (Romanos
11:29 Passion Translation)
“Cuando Dios
entrega un don de gracia y le hace un llamado a una persona, nunca cambia de
opinión y lo retira” (Romanos 11:29 The Voice)
Dios no se está
disculpando por los dones que le entregó y luego busca cómo quitárselos. Nunca
cambiará de opinión. Así de fiel es Dios.
Esperando el futuro
¿Qué ocurrió luego
que el rey David fuera ungido siendo un niño? Tuvo
que servir a sus hermanos y volvió al campo con las ovejas. ¿Cuántos
de ustedes saben que fueron llamados a hacer algo, pero está tratando de
hacerlo en el lugar donde se encuentra? El lugar donde se encuentra ahora no
establece el lugar donde terminará. El que comenzará un proceso en su vida es
fiel para continuar ese proceso hasta el final. El lugar donde se encuentra hoy, no
determinará el lugar donde terminará.
Vuelva a mirar a David.
Llegó a ser rey y lo arruinó. Cometió adulterio y asesinó al esposo de la mujer
con la que había adulterado. En ese mismo lugar fue confrontado por Natán. Donde
se encontraba con Dios en ese momento (siendo confrontado por las consecuencias
de su pecado) no estableció donde terminó. Incluso si usted está cometiendo el
peor pecado, eso no establece dónde terminará. Todo lo que tiene que hacer es
arrepentirse. Cada vez que usted vive fuera de su llamado, es como ser
esclavo de la situación con la que se puso de acuerdo en ese momento.
Cuando lo venden sus hermanos
Puede ser como José en la prisión, quien fue
favorecido por su padre y tenía un gran sueño. En su sueño,
sus hermanos se iban a inclinar ante él. Los hermanos se reunieron y dijeron: “¿Qué haremos
con él, lo arrojamos en un pozo o lo matamos?”. Decidieron venderlo. Como dije, José fue
favorecido por su padre, pero luego fue entregado a los egipcios. ¿Qué dijo? Alguna
vez dijo: “tengo
este llamado asombroso sobre mi vida, tengo la unción y mi Padre me favorece,
pero ¿por qué estoy aquí en el mundo?”.
Egipto representa el
sistema mundano. Muchas personas no reconocen que el llamado y la unción sobre
su vida (el sueño que tuvo), y la razón por la cual tiene el favor de su Padre,
es para ir a hablarle al Faraón. Él tiene un sueño que necesita ser
interpretado. Esa es la apertura y el
ministerio sobre su vida.
Cuando José se volvió
a reunir con sus hermanos les dijo: “Lo que ustedes tramaron para mal, Dios lo transformó
para bien” (ver Génesis 50:20). Usamos este verso fuera de contexto
con mucha frecuencia. Sus hermanos lo vendieron como esclavo, no fue el diablo.
Escuche lo que Dios le dice cuando viene hacia su identidad. La voz del Señor está sobre el sonido de muchas aguas y
quiebra los cedros del Líbano. Es tiempo para salir de donde se encuentra ahora
y afirmarse donde se supone que debe estar.
Sueño sobre Australia
Hace unas semanas
tuve un sueño y en este sueño estaba viajando con gente del equipo Fresh Fire
Ministry. Fuimos hasta el aeropuerto, subimos al avión y sabíamos que era un
vuelo largo, entonces tomé una siesta. Cuando me desperté, en mi sueño, no
estaba donde se suponía que debía estar. Estaba en Australia. No sabía dónde se
suponía que debía estar, pero sabía que no era Australia.
Cuando bajé del
avión, hablé con el personal del aeropuerto y le pregunté cómo terminé en Australia.
Se disculparon y dijeron que mientras estaba dormido, alguien cambió los planes
y terminé en un avión que aterrizó en Australia. Todos estábamos perplejos. No
estaba enojado ni airado sobre la situación, pero no sabía qué hacer.
Debía permanecer allí
un tiempo antes de poder salir. Mientras estaba en Australia me dieron ropa y
comida y la gente me prestaba sus autos, sus casas y me dieron dinero para
gastar. Me dieron todo lo que necesitara. Hubo mucha gracia y favor durante mi
estadía en Australia, aunque se suponía que no debía estar allí. Quedé
estupefacto por la manera como me cuidaba esta gente.
Luego recibí una
llamada telefónica de la aerolínea. Mi vuelo estaba listo para llevarme hacia
donde debía ir originalmente y tenían buenas noticias para mí. Me sentarían en
la clase ejecutiva. ¡Elevaban mi status! Estaba excitado por las noticias y
luego me desperté. El Señor me habló luego del sueño y me dijo: “Debes abrirte
a un destino alternativo. Esto es lo que haces cuando estás estancado o en un
patrón de espera”.
Saliendo del estancamiento del patrón de espera
1. Manténgase en su asiento asignado
Mantenerse en su
asiento asignado es para su protección, porque siempre irán a buscarlo allí. Entonces,
no entre en pánico ni se agite.
“Debe confiar que ahora
está en un proceso de largo plazo”
2. Abróchese y asegure su cinturón de seguridad
Asegúrese de estar
seguro donde está sentado. Esto tiene más que ver con su identidad que con
sentirse seguro. Debe estar bien y confortable con el lugar donde se encuentra,
con lo que está haciendo y con lo que se está desarrollando en su vida, porque
esto es mucho más importante de lo que puede imaginar. Es verdaderamente
pertinente para su confianza. Es llegar a estar seguro con lo que Dios lo llamó
a ser.
3. Preste atención al Piloto
No es bueno discutir,
chillar o quejarse si no puede oír al piloto. El piloto sabe lo que está
ocurriendo. El piloto simboliza a sus líderes espirituales y a Jesús. Hará los
anuncios sobre dónde ir, quién debe ir y qué está ocurriendo. Debe prestarle atención al piloto.
4. Manténgase abierto a un destino alternativo
Debe estar dispuesto
a aterrizar en un aeropuerto, una ciudad o una tierra diferente. En Habacuc
dice que la visión debe ser sencilla y clara. Sin embargo, con frecuencia la hacemos
complicada y enrevesada, con una cantidad de detalles que probablemente surgen
de nuestros propios deseos y pensamientos. Cuando
hacemos sencilla a visión, tendremos una agenda ajustable. Cuando es
sencilla y nos permite ir hacia un destino alternativo, no se siente como un
cambio violento. Es como cambiar el timón de cola para ir hacia un lugar
diferente.
Volvamos a ver a
José. Tuvo un sueño pero terminó en un lugar completamente diferente al que
pensaba que iría. Pero así como ocurrió con José, en un destino alternativo
encontrará gracia y favor. Cuando haga todo lo necesario en ese destino
alternativo, regresará
con un status más elevado.
Jesús fue sembrado en
la tierra para morir en la Cruz después de ser bautizado y luego el Espíritu
Santo lo llevó al desierto. Aun así, Jesús regresó con un status más elevado.
Volvió en el poder del Espíritu Santo. Cuando permitimos que nos lleven hacia
un destino alternativo hay favor, provisión, seguridad y gracia para el lugar
donde estamos y hacia dónde vamos.
Estancados en una ballena en algún lugar
Ahora mismo muchos de nosotros estamos en un destino alternativo. Estamos
tratando de delinear dónde se supone que debemos estar y hacia dónde vamos. Pero donde estamos se ve diferente al lugar donde se supone que deberíamos
estar, haciendo lo que se supone que deberíamos hacer y hacia dónde se supone
que nos deberíamos dirigir. Las Escrituras nos presentan a alguien así llamado
Jonás.
Se suponía que Jonás
fuera a un lugar a entregar un mensaje, pero no quiso hacerlo. Terminó en un
destino alternativo y se encontraba en el vientre de una ballena (Jonás
2:1-10). Ser liberado del lugar donde se
encuentra es tan simple como hacer lo que originalmente debía hacer. Si
ahora mismo se encuentra estancado y siente como si atravesara el infierno, la
clave para su apertura es arrepentirse, vivir la vida que se supone debe vivir
y hacer lo que se supone que el Señor lo llamó a realizar.
Todavía Dios no
terminó con usted. Donde se encuentra ahora mismo, no indica que será el lugar
donde terminará. Si hay algo acerca de usted que es contrario a su identidad
divina, Dios lo perfeccionará con su amor.
Esta generación
En esta generación
hubo un tiempo de preparación que tuvo que ocurrir para hacernos madurar en las
cosas del espíritu y en lo natural. Son como el joven David, ungido para ser
rey pero volviendo a los campos a cuidar a las ovejas. Esta generación fue
ungida y llamada a la grandeza antes de su tiempo y estuvimos en los campos
cuidando las ovejas y peleando contra los leones y los osos. Pero Dios dice: “Si clamas a
Mí, vuelves a lo que se supone que debes ser y te arrepientes, encontrarás
gracia, favor, seguridad y provisión para donde estás ahora mismo y para el
lugar hacia dónde te diriges”.
El Señor le habló a
Ezequiel y le dijo: “Hijo de hombre, ¿vivirán estos huesos?”. Ezequiel respondió diciendo: “Dios, solo tú
lo sabes”. Entonces Dios volvió a
decirle: “Hijo
de hombre, ¿vivirán estos huesos?”. Ezequiel
volvió a responder: “Señor, solo tú lo sabes”. Dios le habló a Ezequiel y le dijo: “Hijo de
hombre, profetízale a estas ruinas. Profetízale a estos huesos secos para que
reciban aliento y vuelvan a la vida” (ver Ezequiel 37:3-14).
Le hablo de parte del
Señor: ¡Es tiempo de hablarle a sus ruinas!
Es tiempo de hablarles a los huesos secos que están en el valle de su alma y su
vida. Profetice que volverán a la vida y que el aliento del Señor
estará sobre ellos. Es tiempo para profetizar que el músculo, los tendones, los
tejidos y los órganos volverán sobre ellos y volverá a respirar una vez más. ¡Viva! Viva la vida que debe vivir. Viva para el llamado elevado que fue establecido sobre usted y viva
conforme al destino que está sobre su vida hoy.
Westley Roderick
(www.elijahlist.com)
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