lunes, 1 de noviembre de 2021

“Guerreros de fuego: ¡Dios los está reivindicando!”

Por Nate Johnston

Palabra profética entregada el 12 de octubre de 2021:

Reivindicación

Ayer mientras conducía hacia Los Ángeles, tuve una visión de gente de pie dentro del fuego, con la cabeza baja. Habían soportado una larga temporada de oposición, persecución y guerra interminable; una temporada donde los robaron, los saquearon y los despojaron, quitándoles hasta la última pizca de dignidad que les quedaba. Sentí su dolor y pude oír que decían: “No puedo caer más bajo que esto. No puedo estar más vacío que esto. No sé cuánto más podré soportar”. 

Son los que se sienten muy aplastados en su espíritu y lucharon por salir. Son los que se sienten más allá de la ayuda, viviendo completamente en modo de supervivencia. Entonces, en respuesta a sus gritos, escuché al Señor que decía: “Estoy a punto de reivindicar a los que pasaron por el fuego”.

Reivindicar: “Liberar de la acusación, la culpa, la sospecha o la duda; defender; demostrar o probar la inocencia; justificar; liberar; recuperar posesiones y títulos perdidos o robados”.

Este es el movimiento del Señor para limpiar tu nombre y limpiarte de la temporada detrás de ti, donde el enemigo buscó arrastrarte por el lodo. Este es el movimiento del Señor para defenderte, sostenerte y justificarte. Este es el movimiento del Señor para liberarte de todo lo que te retuvo, te atacó implacablemente y guerreó contra tu llamado, tu misión, tu mandato y tu unción. Este es el movimiento del Señor para restaurar lo que te robaron de manera lenta y sutil durante los últimos 2 años.

Entonces lo vi... un paso de fe inició una transición en sus vidas para pasar a una dimensión de impacto completamente nueva, cambiando el curso de su legado. Pero la guerra por ello fue más de lo que habían registrado. A estas alturas, el precio les parecía demasiado alto. Sólo vieron el fuego de la guerra y la oposición, y no el terreno que cubrieron y lo que se estableció entre bastidores.

Los justos siempre superan el fuego

Entonces, en mi visión, miré y vi que Jesús estaba de pie con sus brazos alrededor de ellos, cubriéndolos de la misma manera que cubrió a los tres hombres justos “Sadrac, Mesac y Abednego”, cuando se negaron a inclinarse ante la estatua del rey Nabucodonosor y ante las leyes del hombre en ese tiempo (Daniel 3).

Siento que Dios me lo mostró de esta manera porque le estaba hablando al remanente que defendió la justicia en este tiempo y fue avergonzado, ridiculizado y abofeteado por ello, y luego los enviaron al horno. Este horno contenía los fuegos de la persecución, enviados por el enemigo para apagar a los radicales y apasionados, haciendo que se sientan abandonados por Dios, amargados y perdidos, para que pierdan su lucha. Pero Dios está convirtiendo el mismo fuego que vino contra ellos, en un medio para forjarlos como armas poderosas contra los planes del enemigo en los días venideros.

El fuego falso

El fuego del enemigo fue un movimiento falso, en un tiempo donde Dios envió el fuego de Pentecostés sobre la Iglesia, para recordarles quiénes son en realidad. Fue una distracción para poner a la Iglesia en modo de defensa, en lugar de modo de ataque. Incluso trajo confusión y condenación, haciendo que muchos se sometan al juego de la vergüenza del enemigo y lo identifiquen como del Señor.

Sí, el fuego del Señor está limpiando la casa. Sí, el fuego está refinando y purificando, pero la distinción es esta: “el fuego del Señor te revive, te libera y te acerca a Él; mientras que el fuego del enemigo trae muerte, destrucción, opresión y esclavitud”.

Malaquías 3:3 dice: “Se sentará como fundidor y purificador de plata; purificará a los levitas y los refinará como se refinan el oro y la plata. Entonces traerán al Señor ofrendas conforme a la justicia…”.

En la fundición está el trabajo

Pero, como de costumbre, el enemigo siempre exagera su mano y al final, todo lo que hace sólo funciona para su ventaja. Siento que vamos a ver a Dios haciendo algo muy especial y único en este tiempo. Este es un tiempo donde el calor aumentó para muchos, incluso en los últimos meses. La palabra que sigo escuchando es “fundición”, el proceso de utilizar el calor para extraer o separar elementos. Asimismo, Dios está usando esto para extraer cualidades y elementos dentro de ti que no sabías que tenías. Dios está usando este tiempo para construir, edificar y hacer que las personas se conviertan en lo que fueron llamadas a ser. Sin el fuego, nunca lo habrían descubierto.

De esta época saldrán movimientos que impactarán en la tierra durante generaciones. Surgirán expresiones y corrientes únicas que fueron “arrancadas” o extraídas por el calor y la presión. ¡Los guerreros que antes dormían se pondrán de pie!

Están surgiendo del horno los guerreros marcados por el fuego

Entonces el Señor dijo: “¡Y ahora voy a usarlos como mi hierro para marcar!”. No entendí el término “hierro para marcar”, porque no sabía que existía tal cosa; pero intuí que era un juego de palabras con “gancho para podar”. Este término se utiliza unas cuantas veces en la Escritura, pero en concreto, esto me llamó la atención: “Forjen espadas con los azadones y hagan lanzas con las hoces. Que diga el cobarde: ‘¡Soy un valiente!’” (Joel 3:10).

Sentí que el Señor combinaba el hierro para marcar (usado para marcar profundamente), con el podador (usado para cortar y purificar), como una herramienta para levantar guerreros poderosos.

Dios está diciendo que en esta temporada está usando a los que pasaron por el fuego, como sus “atizadores de fuego”. Ellos rescatarán a los que se sintieron débiles y quebrados en el campo de batalla, forjándolos como armas; ¡renovados y bautizados en el Espíritu Santo y el fuego!

Mateo 3:11-12 dice: “Yo los bautizo a ustedes con agua para que se arrepientan. Pero el que viene después de mí es más poderoso que yo, y ni siquiera merezco llevarle las sandalias. Él los bautizará con el Espíritu Santo y con fuego. Tiene el rastrillo en la mano y limpiará su era, recogiendo el trigo en su granero; la paja, en cambio, la quemará con fuego que nunca se apagará”.

Serán los siervos que la gente podrá testificar que estuvieron ante la misma puerta del infierno y regresaron, y ahora son los rescatadores de aquellos que caminan hacia el infierno y los que el enemigo estuvo oprimiendo.

Sacarán a la gente de las tinieblas y la devolverán a la vida. Reanimarán a los que se sienten muertos y más allá de toda esperanza, como ocurrió antes con ellos. Serán los dispensadores del fuego del Espíritu Santo para aquellos cuyas llamas se extinguieron.

Pero no me siento como un guerrero, sólo me siento quemado

Quiero hablarles a los que se sienten quemados, como si un veneno hubiera comenzado a entrar en ellos para contaminarlos. Te sientes quemado de hacer algo por Dios, quemado ante tus promesas, quemado por creer que volverás a ver algo bueno y quemado de querer seguir el camino pionero.

Esto te dice el Señor: “Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: ‘No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío. Cuando cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas; cuando camines por el fuego, no te quemarás ni te abrasarán las llamas. Yo soy el Señor, tu Dios, el Santo de Israel, tu salvador; yo he entregado a Egipto como precio por tu rescate, a Cus y a Seba en tu lugar’” (Isaías 43:1-3).

Dios te está llevando de regreso al momento anterior al fuego, al momento anterior a la temporada traumática por la que caminaste y al momento anterior a la batalla. Serás como Sadrac, Mesac y Abednego, cuando salieron del horno de fuego de Nabucodonosor. ¡Saldrás sin oler siquiera a humo!

Al igual que después de que el fuego quema la tierra y surge una nueva vida, ahora vas a ver la nueva vida brotando de las cenizas y las ruinas. Una nueva canción va a brotar de ti. Al igual que un gallo canta para anunciar la mañana, tu espíritu anunciará el nuevo día con una canción y un himno. Así como el fuego viene y limpia los escombros, Dios usó el fuego que el enemigo envió contra ti, para limpiar los mismos escombros que él puso como una trampa a tu alrededor.

Pronto se va a despejar el humo. Podrás ver lo que antes no podías ver. Pronto verás el camino hacia adelante y el futuro que estaba velado. Esto no es un callejón sin salida. La prueba de fuego está llegando a su fin y pronto verás cómo Dios la utiliza para tu beneficio. Tu pena y tu dolor van a empezar a retirarse de ti, como una túnica vieja y andrajosa que ya no necesitas. Dásela a Jesús, ahora mismo. Deja que Él la tome.

Ordeno que el trauma de la temporada te deje ahora, en el Nombre de Jesús. Que cada lugar agrietado y fracturado de tu alma, tu corazón y tu mente, sea restaurado. El aceite del Cielo está fluyendo sobre tu cabeza y sacándote del lugar al que te acostumbraste. Fuego del Cielo cae sobre cada esclavitud y actividad demoníaca ahora, mientras lees esto. Atamos y enviamos al fuego a cada demonio que te aflige y atormenta, en el Nombre de Jesús.

¡Ahora sé lleno y bautizado con el Espíritu Santo y fuego!, en el Nombre de Jesús

Nate Johnston

(www.elijahlist.com) 

2 comentarios:

Unknown dijo...

pues espero que hacia sea en El Nombre de Jesús, todo lo que describiste...

Rincón profético dijo...

Cree, solo cree en lo que el Señor te habló