Por Curt Landry
Para todos aquellos que no están
familiarizados con el período llamado “Bein Hametzrim” o el tiempo de las
“situaciones desesperadas”, es un tiempo de tres semanas entre el 17 de Tammuz y
el 9 de Av, en el calendario bíblico hebreo. En el 2017, el año hebreo 5777, el
tiempo de “situaciones
desesperadas” cae entre el 10 de Julio y el 1 de Agosto. Ahora mismo
nos encontramos en un período de tiempo apartado para arrepentirnos y pedir
perdón por los pecados de nuestros padres, como hizo Daniel en Daniel 9:3-19.
Experiencias históricas durante “tiempos
desesperados”
Es interesante notar
que ocurrieron cinco grandes catástrofes en la historia bíblica durante el 17
de Tammuz:
• Moisés destruyó las
tablas con los Diez Mandamientos al pie del Monte Sinaí, luego del acto de
pecado de los israelitas cuando adoraron al becerro de oro en el campamento (ver
Éxodo 32).
• En el año 586 AC se
suspendieron las ofrendas diarias en el Primer Templo, durante el sitio de
Jerusalén por el ejército de Nabucodonosor, quienes luego el 9 de Av incendiaron
el Santo Templo.
• En el año 69 DC los
muros de Jerusalén fueron derribados por el Imperio Romano, marcando el
comienzo de la destrucción y el final del Segundo Templo en el 70 DC.
• Antes de la
revolución de Bar Kokhba, la Gran revolución, el líder militar romano Apostamos
quemó los rollos de la Torah. Este acto aborrecible estableció un estándar para
quemar los libros judíos y los rollos de la Torah por todo el mundo en los
siglos siguientes.
• Las fuerzas
opositoras levantaron una imagen en el Santo Templo como un acto de blasfemia y
execración.
¿Cuál es la advertencia aquí?
En este período de
tres semanas necesitamos impedir que el enemigo dañe nuestros templos
espirituales o nuestro andar en el espíritu. Necesitamos estar en guardia,
sabiendo que el enemigo tratará de mancillarnos. Por tanto, es importante
conocer que las cosas como nuestro temperamento y nuestro carácter estarán bajo
ataque durante este tiempo… ¡Necesitamos mantenernos despiertos y alerta!
Compartiré con usted
una palabra profética que recibí, pero quiero desafiarlo a recibirla para usted
mismo. Esto es lo que dice el Señor para los tiempos desesperantes durante el 5777:
“En las
próximas tres semanas, en los días del tiempo desesperante, habrá un tiempo de
arrepentimiento, ayuno y liberación de las maldiciones (que ocurrieron durante ese tiempo). Pero
debido a la sangre de mi Hijo, revertiré la maldición en tu vida y todo lo que
fue cortado. Te multiplicaré diez veces. Las cosas que te
retuvieron serán removidas ahora mismo y durante los próximos tres meses, verás
la manifestación física de Mis promesas y Mi honor”.
“Te estoy llevando hacia un alineamiento
apropiado con tu llamado y tu propósito, porque me lo pediste, te estoy
liberando. El enemigo no espera que te libere durante los tiempos desesperados,
pero los caminos del enemigo no son mis caminos. Mis caminos son más elevados
que los del enemigo o los caminos del hombre. Espera recibir bendiciones desde
lugares desconocidos y que se abran puertas que ni sabías que existían. Todas
aquellas cosas que estuviste soñando y no esperabas que ocurrieran en un tiempo
de sequía como este, el tiempo de prueba entre el presente y Tisha B’Av,
vendrán con seguridad”.
“Te estoy introduciendo en un nuevo
comienzo y un nuevo tiempo de gozo y abundancia, porque te estoy sanando de
todos los temores del tiempo de desesperación. No temerás a los problemas,
porque literalmente los estoy arrancando de tu alma conforme al Salmo 103:1: ‘Bendice, alma mía,
a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre’. ¡Estoy arrancando todos los
temores y las ansiedades!”.
Ore conmigo: “Señor, decretamos y declaramos que este
tiempo de situaciones desesperadas se transforma en un tiempo de oportunidades
divinas. Señor, hablamos protección sobre Israel y hablamos protección sobre
nuestra nación. Hablamos protección sobre la Iglesia perseguida en todo el
mundo. Negamos el derecho del enemigo en las naciones para atacar el templo de
Dios. Declaramos, decretamos e intercedemos por el Cuerpo de Cristo en la
tierra. Porque Dios ama tanto a la Iglesia que le entregó a su Hijo amado.
Gracias Señor que en el año 5777 no habrá maldición y no habrá motivos para que
se manifiesten tiempos desesperantes. En el Nombre de Yeshúa, Amén”.
¡Anímese! Las
promesas del Señor son sí y amén durante este tiempo de desesperación...
Zacarías 8:19: “Así
ha dicho Jehová de los ejércitos: El ayuno del cuarto mes, el ayuno del quinto,
el ayuno del séptimo, y el ayuno del décimo, se convertirán para la casa de
Judá en gozo y alegría, y en festivas solemnidades. Amad, pues, la verdad y la
paz”.
Rabbi Curt Landry
(www.elijahlist.com)
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