Por Jamie Rohrbaugh
¿Aprendió a sobrevivir sin favor?
¿Aprendió a vivir sin
favor? ¿El Señor lo está bendiciendo con su propio favor, incluso cuando perdió
el favor que solía tener con ciertas personas? Si es así, el Padre me entregó
una palabra profética para usted en este mes de Marzo: El Señor le está impartiendo el favor que no necesita.
Percibo en el
espíritu que usted atravesó el infierno y volvió, y en el proceso de ese viaje
el diablo le robó algunos niveles de favor (no todo su favor, sino algo). Sin
embargo, aprendió a caminar sin el favor que perdió. Usted dependía del favor
de Dios, no de la gente. No tambaleó ni se desmayó. Lo tomó con calma y dijo: “Bendito sea el
nombre del Señor”.
Hizo un progreso
tremendo mientras dependía solo del Señor por su favor. Aprendió y creció. El
Señor partió el Mar Rojo proverbial para usted. Él hizo un camino en el
desierto y una senda a través de las aguas poderosas.
El Señor lo está vistiendo con favor y honor
A través de todo
esto, usted pudo lograr mucho más de lo que soñó. Algunos de esos logros se
evidenciaron por un crecimiento interno. Lo logró a través de cosas que
pensaron que eran demasiado fuertes para usted y como resultado, creció
tremendamente. Sin embargo, algunos de estos logros también se pueden ver por
fuera. Hizo algunas cosas que dejaron a otros con la boca abierta de asombro
hacia su vida y hacia la obra del Señor.
Pero ahora, el Señor le dice: “Te estoy dando el
favor que ya no necesitas. Yo sé que tú tienes tu propio favor conmigo y eso es
verdaderamente todo lo que necesitas. Pero en este tiempo te estoy dando el
favor que no necesitas. Hago esto porque deseo honrarte. Déjame recordarte el
Salmo 91:15: ‘Él me invocará, y yo le responderé; estaré con él en momentos de
angustia; lo libraré y lo llenaré de honores’”.
“Me llamaste y Yo te respondí. Estuve
contigo en los problemas. Te liberé y te honré públicamente. Pero ahora te
honraré más. Te estoy honrando porque quiero hacerlo y porque tú dependes de
Mí. Debes estar atento por mi favor, el favor que no necesitas, pero elijo
darte de todas maneras. Te estoy vistiendo con favor. Te estoy cubriendo,
envolviéndote y rodeándote con favor como si fuera un escudo. Estoy haciendo
estas cosas porque Soy el Señor y nada está fuera de mi alcance. Nada es
demasiado difícil para Mí. Ninguna bendición está más allá de Mi habilidad para
derramarla sobre tu vida”.
Busca el favor en los cuatro cuadrantes
El Señor dice: “En este tiempo
experimentarás Mi favor en los cuatro cuadrantes de tu vida. Estos cuadrantes son:
1. El cuadrante espiritual. “Siempre bendeciré tu vida espiritual
primero, porque es más importante. En este tiempo
de favor tendrás encuentros más profundos conmigo y con mi Espíritu que en
cualquier otro tiempo. Pídeme por los tipos de encuentros que solo soñaste,
las cosas dramáticas y sobrenaturales que ves en las Escrituras, y te las daré”.
“Además, me gustaría recordarte que los
primeros pájaros son los que arrebatan los gusanos. Estuviste peleando y
peleando temprano en las mañanas conmigo, y ahora el premio por lo que
estuviste peleando estallará repentinamente”.
2. El cuadrante del
aprendizaje. “Estuviste
aprendiendo en un rango, pero ahora estás por aprender a un paso acelerado. Te
encontrarás graduándote de algunas lecciones este mes y entrando en otras”.
“Te lo vuelvo a decir: Te graduarás. Ya
no darás más vueltas alrededor del monte de la adversidad. Aprendiste bien las lecciones y pasaste la prueba. Como pasaste la
prueba este mes, te estoy entregando autoridad gubernamental para guiar a otros
a salir del desierto. Asegúrate de enseñarle bien a la gente que te envío.
Confío en ti, estás completamente equipado y habilitado para hacerlo. ¡Creo en ti!”.
3. El cuadrante de la familia. “Verás la victoria en tus hijos este mes. Mis alas se
estiraron sobre ellos todo este tiempo, incluso cuando no lo viste. Pero este
mes verás a tus hijos experimentando la victoria y la apertura. Prepara la
corona de laureles para sus cabezas. Prepárate para apoyarlos y alentarlos mientras
experimentan la victoria de una manera completamente nueva”.
“Tu rol está cambiando de ser un intercesor sin voz, a ser un fortalecedor
con gran influencia. Encontrarás oportunidades a cada lado para alentar a tus
hijos. Toma ventaja de
cada una”.
4. El cuadrante financiero. “Este
mes volarás alto con tus finanzas. En el lugar donde estuviste sentado mirando
al cielo, ahora te encontrarás volando en medio de las nubes. Otros observarán y se
asombrarán. Tendrás un testimonio”.
“Este será el primer vuelo de muchos en
tus finanzas. No digas ‘espero que dure’. En lugar de ello, debes decir:
‘¡gracias Padre, por la lluvia temprana y la lluvia tardía que derramas juntas
sobre mi vida!’. Debes agradecerme y confiar en el viento de mi Espíritu, porque
no es por fuerza, no es por poder, sino por mi Espíritu que puedes experimentar
estas cosas”.
“Mientras vuelas alto en tus finanzas,
experimentarás una ‘espina debajo de tu montura’ ocasional. Las cosas
comenzarán a verse como si te fueran a derribar, pero estas cosas son solo
ilusiones. Son dardos lanzados por el
enemigo para atacarte. Recházalos en el nombre de Jesús y ordénales alejarse
de tu vida. No son reales, solo son distracciones”.
“Es el enemigo ofreciéndote la
oportunidad de dudar de Mí. Rechaza estas ofertas perversas y ríete por lo que
dice, porque no tiene autoridad o poder sobre tu vida. Rechaza las ‘espinas’
que el enemigo trata de poner debajo de tu montura y continúa volando alto
conmigo. Debes mantener tus ojos en Mí ofreciendo una melodía continua de
alabanza y gratitud hacia Mí, porque nada podrá derribarte”.
Romanos 8:38-39 dice: “Pues estoy
convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni
lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa
alguna en toda la creación, podrá apartarnos del amor que Dios nos ha
manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor”.
“Nada puede separarte de Mí y este mes verás que en todo este tiempo, nunca
me aparté de tu lado. Nada te puede separar de mi amor o mi bondad, porque Yo
soy el dador de dones buenos y perfectos. Créeme. Recibe de Mí. Acércate a Mí
como tu vida, tu salud, tu fuerza y tu provisión. Yo soy todas estas cosas y
más, y las recibirás mientras te acercas a Mí”.
¡Gracias Jesús! ¡Recibo
esta palabra! ¿Usted también? Si es así, ¡ore por ella, escriba sus puntos de oración en su diario y
agradézcale al Señor por ello ahora mismo!
Jamie Rohrbaugh
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