lunes, 22 de mayo de 2023

“Oí al Señor que decía: ‘¡Bienvenido de nuevo!’”

 

Por Lana Vawser

¿Te sientes noqueado?

Escuché al Señor hablando sobre muchos que sintieron que estuvieron experimentando tanta guerra, oposición y dificultades últimamente, que se sintieron como “noqueados”. Hubo un ataque fuerte sobre la autoridad del creyente y su posición en Cristo, así como a lo que el Señor los está llamando a construir en esta hora.

Los bancos están a punto de romperse

Podía oír a muchos clamando al Señor, sintiendo que la batalla nunca se iba a romper. Fue entonces cuando oí hablar al Señor: “Los bancos se están a punto de romper”.

No solo vi un gran cambio que ocurría por el decreto del Señor sobre sus vidas para sacarlos de este lugar donde se sienten atorados en la batalla, pude ver que los bancos que el enemigo había puesto para impedir el gran derramamiento del Señor, se rompían repentinamente. Mientras estos bancos se rompían, una enorme marejada del Espíritu de Dios (un poderoso derramamiento), se estaba desatando en sus vidas y escuché al Señor haciendo un decreto. La autoridad de ese decreto podría haber derrumbado montañas.

“Bienvenidos de vuelta” y un regreso divino

Oí al Señor que decía: “Bienvenidos de nuevo”. Supe al instante que se trataba de un regreso divino. Vi que muchos se sintieron como estancados. Cuando el Señor declaraba “bienvenidos de nuevo”, estaban siendo catapultados hacia un avance acelerado.

El enemigo vino con mucha fuerza y de muchas maneras para obstaculizarlos y retrasarlos, pero ahora se estaban moviendo hacia un avance acelerado con el Señor. Estaban entrando en un tiempo para ver que lo que el Señor les había llamado a construir, finalmente se estaba construyendo y estaba naciendo a un ritmo más acelerado que nunca. Me di cuenta de que no era un “edificio” que surgió de la lucha y la prisa por delante del Señor. Este edificio se basaba en la declaración de que el Señor venía con un poder sobrenatural y la restauración para llevar a cabo lo que Él había prometido. Dios los había invitado a construir con Él de una manera mayor y más acelerada.

Entonces me rodeó la sensación de que a pesar que la batalla era tan intensa y tan difícil, con muchas pérdidas, el Señor estaba obrando. Lo que el enemigo hizo para su daño, Dios lo transformó para su aumento.

Entonces estas palabras me volvieron a rodear: “Los bancos están a punto de romperse”. Pude ver la provisión fluyendo con abundante aceleración.

La provisión abundante para el avance acelerado

El Señor habló de nuevo: “Es la provisión abundante para el avance acelerado”. Era provisión financiera, pero también era provisión en cada área que el enemigo había atacado.

El Señor me mostró que la asignación del Señor vino sobre las vidas de los creyentes en esta temporada para construir con Él, pero el enemigo vino a robar, matar y destruir. Sin embargo, el Señor estaba trayendo provisión para construir con Él en esa visión de una manera acelerada.

Todo el tiempo, el enemigo vino a matar la visión, pero el corazón del Señor era hacer que la visión fuera extendida y aumentada en maneras más grandes que lo que imaginó esta gente.

El volvió a hablar: “Un poderoso derramamiento de Mi Espíritu está irrumpiendo en estas mismas áreas que el enemigo trató de abortar, pero no lo logró. Bienvenidos de nuevo”.

Ampliando la visión

Cuando las palabras “bienvenidos de nuevo” volvieron a tronar, no sólo vi el regreso divino de estos hombres y mujeres, fue como si la visión misma escuchara el decreto del Señor, y repentinamente volviera a cobrar vida. Al cobrar vida de nuevo, las estacas de la tienda de campaña de la visión se extendieron más que nunca.

Sus palabras volvieron a rodearme: “Estas áreas van a ser las del mayor mover de Mi Espíritu en esta hora. Apóyate, sé tierno y sensible a Mi guía, porque estoy aumentando el plano de estas visiones ahora mismo, para llevar más de lo que imaginaste”.

Las palabras que el Señor me dijo muchas veces en los últimos años, seguían resonando fuertemente en mi espíritu: “¡Todo y más! ¡Todo y más!”. Él estaba restaurando todo y más. Las líneas fronterizas de la tierra que Dios les había asignado para ocupar y que el enemigo trató de robarles, no sólo estaban siendo restauradas, sino extendidas. ¡Aumento! ¡Todo y más!

No estás atascado. En realidad, te moviste del lugar de sentirte estancado en la batalla, hacia un lugar de avance (al lugar de avance acelerado con Dios). Verás florecer con mayor incremento la asignación que el Señor te entregó.

Muchos pensaron en términos “locales”, pero el Señor está hablando en términos “globales”. Estuvieron viendo la visión ante ustedes en 2D, pero ahora el Señor está haciendo que esa visión se convierta en 3D. Verás la visión en formas más profundas y grandes. Es mayor y más grande que lo que piensas.

Lana Vawser

(www.elijahlist.com)

 

1 comentario:

carmen Morela Ibarra Hernández dijo...

GLORIA A DIOS POR TODO LO QUE ESTÁ HACIENDO Y POR TODO CUANTO HARÁ; ALELUYA...