domingo, 28 de febrero de 2010

“Consejo apostólico de ancianos proféticos: Palabra del Señor para el 2010”

 

Por C. Peter Wagner, Cindy Jacobs, Harry Jackson, Bishop Bill Hamon, Will Ford, Sharon Stone y otros

clip_image002Esta es la palabra que surgió luego de la compilación de decretos proféticos en consenso con todos los ancianos del consejo. Algunos de los miembros son el Obispo Bill Hamon, Sam Brassfield, Harry Jackson, Rick Ridings, Greg Black, Will Ford, Mike Jacobs, Peter Wagner, Mary Glazier, Sharon Stone, Cindy Jacobs, John Sanford, Beth Alves, Gwen Shaw y Doris Wagner.

Miembros del consejo

Estas son algunas de las variables que pueden afectar el tiempo o la manifestación de estas palabras:

1. Toda profecía que no está dentro de la Escritura es condicional.

2. El momento de la manifestación de la profecía puede ocurrir luego de un largo período de tiempo, más allá del año calendario. Algunas requieren años para su cumplimiento.

3. Es posible que las advertencias proféticas lleven a las personas o a las naciones hacia el arrepentimiento y se revierta la profecía de juicio. Bíblicamente, esto ocurrió cuando Jonás profetizó sobre Nínive y la ciudad se arrepintió, entonces Dios retuvo el juicio.

Pasaje clave para el 2010

“Sin embargo, gracias a Dios que en Cristo siempre nos lleva triunfantes y, por medio de nosotros, esparce por todas partes la fragancia de su conocimiento” (2 Corintios 2:14).

2010 es el año de nuestra victoria. Este es el año del triunfo en Cristo y la difusión de la fragancia de su conocimiento en cada lugar.

2010 es el año para despertarnos. Es tiempo de despertar y ver tanto lo que el enemigo está tratando de hacer como lo que Dios quiere manifestar a través de nosotros. Este es el año cuando Dios nos ayudará a “ver” de una manera sobrenatural aquellas cosas que sentimos que no podemos comprender.

El año del viento

2010 será el año del viento. Se está por derramar un nuevo Pentecostés sobre el pueblo de Dios que tiene hambre por Él. El viento del Espíritu Santo soplará sobre nosotros en la dirección correcta y hacia el lugar donde Dios nos quiere. Veremos manifestaciones gloriosas de su poder divino con señales y maravillas.

Muchas naciones sentirán el impacto de este viento poderoso. El Espíritu Santo volverá a barrer Indonesia, Tailandia, Polonia, Corea del norte, Corea del sur y Gran Bretaña. Alaska verá un mover del Espíritu Santo entre sus nativos.

Se abrirán nuevos pozos de avivamiento y muchos beberán de esos pozos de salvación.

Muchos enseñarán sobre los dones del Espíritu. Necesitamos verlos funcionando en la Iglesia en este día para cumplir nuestra misión. Veremos un aumento especial de la palabra de sabiduría. Esta es una visión sobrenatural en lo que debemos hacer para asegurar nuestro futuro. La manifestación de este don será tal que desde un momento al siguiente, tendremos la “hoja de ruta” de lo que tenemos que hacer por nuestro futuro.

El tercer gran despertar

Creemos que el derramar del Espíritu Santo que vino el 11 de Noviembre del 2009 en Kansas City, señaló el comienzo del tercer gran despertar que profetizamos sobre América y el mundo. El 11 de Noviembre fue el día donde los peregrinos hicieron pacto con Dios en Plymouth, Massachusetts. Muchos intercesores están clamando a Dios por la nación para que vuelva a ser “una ciudad sobre la colina”. Si continuamos orando y clamando a Dios, la nación cambiará.

Evangelismo

Muchas Iglesias se despertarán y evangelizarán a los perdidos en sus ciudades y naciones. Miles entrarán en el Reino a través de este nuevo “evangelismo de poder”, donde la gente demostrará que Dios es real.

Las Iglesias que no bautizaron en años, comenzarán a ver mucha gente llegando a los pies de Cristo. Las iglesias muertas resucitarán bajo la operación del fuego y el poder del Espíritu Santo. Muchos perdidos entrarán en el Reino de Dios.

Quebrando el ciclo de las deudas

Pasaje clave de la Escritura:

“El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas nuevas a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos” (Lucas 4:18).

Sentimos que el Señor nos entregaba un período de tiempo como el “ojo de una tormenta” para salir de las deudas. Mientras discutimos varias advertencias sobre un segundo sacudón económico, sentimos que el Señor en su misericordia extendió un período de gracia sobre su pueblo porque muchos no estaban listos para otra crisis.

Se soltará una habilidad sobrenatural para salir de las deudas. Si comienza a pagar sus deudas, aún en montos pequeños, Dios respaldará sus esfuerzos de una manera sobrenatural y lo ayudará a pagar sus deudas.

Erradicación de la pobreza sistémica

Es tiempo de cumplir el mensaje que predicó Jesús y traer justicia a los pobres. Dios nos habló acerca de los misioneros de justicia social, llamados a ayudar a eliminar la pobreza sistémica. Existe un matrimonio entre la rectitud y la justicia, Dios levantará a los que están llamados a pelear contra temas como el tráfico de humanos y la pobreza.

El llamado conjugará ganar a los perdidos con su mandato por justicia. Las iglesias comenzarán a modelar el cuidado de los pobres, así como poner los sistemas en su lugar para ayudar a su gente a salir de las deudas.

Choque de Reinos

Así como el año pasado, el Señor nos habló sobre un gran “choque de reinos” por todo el mundo, el Reino de Dios y el imperio edificado por el espíritu del Islam. Satanás está concentrado en edificar imperios.

Preste atención a su entorno. Se levantará el terrorismo interior. Existe un mover hacia la “Jihad de civilización” por todo el globo en las ciudades que tienen gobiernos democráticos.

Prueba y juicio

Pasaje clave de la Escritura:

“El jefe de oficiales le ordenó a un guardia atender a Daniel, Ananías, Misael y Azarías. Por su parte, Daniel habló con ese guardia y le dijo: Por favor, haz con tus siervos una prueba de diez días. Danos de comer sólo verduras, y de beber sólo agua. Pasado ese tiempo, compara nuestro semblante con el de los jóvenes que se alimentan con la comida real, y procede de acuerdo con lo que veas en nosotros. El guardia aceptó la propuesta, y los sometió a una prueba de diez días. Al cumplirse el plazo, estos jóvenes se veían más sanos y mejor alimentados que cualquiera de los que participaban de la comida real. Así que el guardia les retiró la comida y el vino del rey, y en su lugar siguió alimentándolos con verduras” (Daniel 1:11-16).

Daniel y sus amigos fueron probados por 10 días y luego obtuvieron el favor del Rey. Pero se dieron cuenta que estaban diez veces mejor que el resto. Esto sucederá con los que son fieles para afirmarse en tiempos de prueba. Al final, se levantarán sobre los demás y avanzarán.

Nehemías

A Nehemías le hablaron diez veces para detener su trabajo en el muro. No se sienta intimidado por los asaltos del maligno. Termine la tarea que Dios le encomendó. Dios nos habló una y otra vez en nuestra reunión para que no seamos intimidados en el tiempo de prueba y conflicto que se avecina.

Activismo de adoración

Pasaje clave de la Escritura:

“Después de consultar con el pueblo, Josafat designó a los que irían al frente del ejército para cantar al Señor y alabar el esplendor de su santidad con el cántico: Den gracias al Señor; su gran amor perdura para siempre. Tan pronto como empezaron a entonar este cántico de alabanza, el Señor puso emboscadas contra los amonitas, los moabitas y los del monte de Seír que habían venido contra Judá, y los derrotó. De hecho, los amonitas y los moabitas atacaron a los habitantes de los montes de Seír y los mataron hasta aniquilarlos. Luego de exterminar a los habitantes de Seír, ellos mismos se atacaron y se mataron unos a otros” (2 Crónicas 20:21-23).

Venceremos por medio de la adoración, porque es la clave para triunfar. Existe un matrimonio entre la adoración y el activismo que se está manifestando, así como en los días de Martin Luther King, Jr. La Iglesia marchará y cantará.

Se escribirán nuevos himnos de batalla como “El himno de batalla de la República”. Su Verdad está marchando, porque existe un llamado para establecer la verdad bíblica a través de la adoración.

La adoración abrirá los cielos y los jóvenes liderarán el llamado a ser “misioneros de la música” para ir hasta los confines de la tierra, fundando casas de adoración 24/7. Un gran gozo irrumpirá en medio de la adoración mientras Dios se ríe de sus enemigos a través de su pueblo (Salmo 2, Salmo 149).

Gran conflicto

Por cada avance del Reino este año, veremos al enemigo presionando y agitando los conflictos a nuestro alrededor. No tema la confrontación y el conflicto. Combata la intimidación. Avance contra los Goliats en su vida y recuerde que está llamado a triunfar este año. El activismo se manifestará mientras se levantan los nuevos ejércitos del Señor, encuentre su lugar y haga oír su voz.

Durante los próximos años en los Estados Unidos, se levantará un tercer partido político. El Señor está preparando su liderazgo para este partido que surgirá entre los ciudadanos de los Estados Unidos, cansados de la corrupción de la guardia vieja. Muchos líderes están siendo probados en el fuego justo ahora y asumirán el liderazgo en el momento justo, porque no será tanto como un partido político, sino un movimiento. Con el tiempo llegará a ser un partido.

Tiempo de transición

Este es un tiempo de transición para el Cuerpo de Cristo. Para los Estados Unidos será un tiempo de transición para bien y para mal. La nación está en la “cúspide” de la civilización como la conocemos. Depende de esta generación regresar a la visión original de nuestros fundadores. Una mujer debe dilatarse diez centímetros para dar a luz. En el año 2010 y los siguientes, habrá una presión intensa, pero resultará en el nacimiento de muchas cosas nuevas.

Dios también acomodará a su pueblo para la obra en los días por venir. Habrá algunos que se mudarán repentinamente. Otros tendrán una transición en sus trabajos y carreras. Habrá una gracia especial que se derramará sobre los que sean obedientes y le permitan a Dios reposicionarlos en su ejército. Para aquellos que no se muden pero ven a sus seres queridos haciendo cambios, Dios también los ayudará en la transición hacia esta nueva temporada y enviará una nueva ayuda para su vida.

Ante la transición hacia la nueva temporada, ordene su casa y su visión. Asegúrese de estar bien alineado para las nuevas batallas que vienen por delante.

Prepárese

Pasajes clave de la Escritura: Mateo 25:14-30.

Acomode todo para las victorias y los avivamientos. Enfóquese más en su propósito central y viva una vida sencilla. No acumule lo que puede usar otra persona. Este es el tiempo para compartir y cuidarnos entre nosotros. Asegúrese que el Cuerpo de Cristo se puede levantar con el llamado del Novio, como las cinco vírgenes que estuvieron preparadas.

Debemos comenzar a pensar más como una comunidad que a nivel individual. Ponga su casa en orden y arréglela para la nueva temporada. Hoy la movilidad es la clave para el Reino. Muchos que no están correctamente ante la ley, perderán edificios, tierras, etc. Si esto lo ocurrió a usted, Dios lo ayudará a comenzar otra vez.

Viene una nueva temporada de poda para el crecimiento. La poda pueda ser dolorosa y a veces es así, pero confíe que el Señor está obrando en todas las cosas para su bien.

Consejo apostólico de ancianos proféticos

“2010: El año de la restauración”

 

Por Carol Kelley

clip_image002A principios de Noviembre del 2009, el Señor me dijo: “2010 será un año de restauración”. La restauración de lo que perdimos en el pasado vendrá en muchos niveles, tanto para los creyentes individualmente como para el resto de la Iglesia. Observa expectante cómo la restauración y el aumento de Dios se establecen durante los próximos meses en las relaciones, la salud, la fe, las familias y las finanzas. ¿Quieres recuperar la esperanza que el Señor cumplirá el sueño o la visión que te entregó? Pon tus ojos en Él para que restaure, reviva y traiga a la realidad los sueños que murieron, se perdieron, abandonaron o quebrantaron.

Durante el otoño y el principio del invierno del 2009, el Señor me habló no menos de 70 veces sobre restauración. Aquí vemos un resumen de lo que dijo:

“Tengo planes para la doble restauración. Hubo muchas pruebas, pero habrá restauración. Mantengo viva la esperanza en ti. Estoy redimiendo los tiempos y las relaciones, estoy edificando y preparando. Yo soy el Señor, ¿habrá algo difícil para Mí?” (Jeremías 32:27).

“Ten una completa fe en Mí. Te estoy dando gracia, estoy redimiendo situaciones para mi propósito. Viene la restauración, cree en mis promesas. Sí, viene la restauración de las relaciones. Abriré puertas, verás cómo se manifiestan Mis promesas. Viene una revelación plena mientras se cumple cada promesa”.

“Traeré restauración, no abandones tu esperanza. Puedo redimir todas tus situaciones. Afírmate ahí durante esta transición, ¡las cosas ya están allí! Sí, este fue un tiempo de prueba, pero también de redención, gracia y misericordia. Esta prueba terminará en victoria. Sigue orando, creyendo y enfocándote en Mí. Recibe y camina en mi gracia y reposo”.

“Tengo planes para la restauración plena: ¡No retrocedas!”

A principios del Año Nuevo, el Señor me dijo:

“No abandones, porque durante este tiempo es prioritario para el aumento y la restauración. Te daré una medida completa de mi bendición”.

“Descansa en Mí (Salmo 37:7), no te desgastes por los errores de los demás (Salmo 37:1). Confía en Mí y continúa haciendo el bien (Salmo 37:3). No retrocedas, continua afirmándote y arraigándote en Mí. Continúa con tus actos de fidelidad”.

“Deléitate en Mí. Yo conozco los deseos de tu corazón y los honraré (Salmo 37:4). Comprométete conmigo, confía en Mí (Salmo 37:5). Actuaré a tu favor. Recompensaré tu confianza y tu fidelidad en Mí (Salmo 37:6)”.

“Aprende a descansar en Mí, aprende a esperar pacientemente en Mí (Salmo 37:7), aprende a no preocuparte. Confiar en Mí no siempre es sencillo para ti. Yo sé y entiendo esto, por eso estoy trabajando para ayudar al crecimiento de tu fe. No te condeno por tus luchas, pero te estoy llamando a un nuevo nivel de fe. Probé mi fidelidad sobre tu vida una y otra vez, por eso te invité a confiar en Mí de una nueva manera”.

“No abandones tu esperanza. Conozco los deseos de tu corazón y estoy trabajando. Te estoy dando gracia y misericordia en tu tiempo de necesidad (Hebreos 4:16). Viene la completa restauración y mi gloria se revelará en este proceso. ¡Nunca, nunca, nunca abandones! Mantendré mis promesas para que pases la prueba final en victoria. No te desanimes durante estas pruebas, porque terminarán en victoria. Tengo planes para una restauración completa”.

“Estoy trabajando todas las cosas para tu bien (Romanos 8:28). Tengo misericordia sobre tu vida, mi amor por ti es eterno (Jeremías 31:3). Nunca te fallaré o te dejaré (Deuteronomio 31:6, 8; Josué 1:5; Hebreos 13:5). Estoy contigo siempre, aún hacia el fin de los tiempos (Mateo 28:20)”.

Escrituras en las que meditar para reclamar la restauración del Señor

Deuteronomio 30:3: “… entonces el Señor tu Dios restaurará tu buena fortuna y se compadecerá de ti. ¡Volverá a reunirte de todas las naciones por donde te haya dispersado!”.

Salmo 14:7: “…Cuando el Señor restaure a su pueblo, ¡Jacob se regocijará, Israel se alegrará!”.

Salmo 23:3: “Él restaura mi alma”.

Salmo 41:3: “El Señor lo confortará cuando esté enfermo; lo alentará en el lecho del dolor”.

Salmo 51:12: “Devuélveme la alegría de tu salvación; que un espíritu obediente me sostenga”.

Salmo 53:6: “¡Quiera Dios que de Sión venga la salvación para Israel! Cuando Dios restaure a su pueblo, se regocijará Jacob; se alegrará todo Israel”.

Salmo 60:1: “¡Restáuranos!”.

Salmo 71:20: “¡Vuelve a restaurarme!”.

Salmo 80:3, 7, 19: “Dios, restáuranos”.

Salmo 85:1,4: “Tú restauras las fortunas de Jacob. Restáuranos, Dios de nuestra salvación”.

Salmo 126:4: “Ahora, Señor, haz volver a nuestros cautivos como haces volver los arroyos del desierto”.

Isaías 57:18: “He visto sus caminos, pero lo sanaré; lo guiaré y lo colmaré de consuelo. Y a los que lloran por él”.

Jeremías 15:19: “Si regresas, te restauraré”.

Jeremías 16:15: “Los restauraré a su propia tierra”.

Jeremías 27:22: “Los traeré de regreso y los restauraré”.

Jeremías 29:14: “Me dejaré encontrar y restauraré tus caminos, te reuniré de todas las naciones”.

Jeremías 30:3: “Vienen los días cuando restauraré las riquezas de mi Pueblo”.

Jeremías 30:17: “Restauraré tu salud y sanaré tus heridas”.

Jeremías 30:18: “Restauraré las riquezas de las tiendas de Jacob”.

Jeremías 31:18: “Hazme regresar y seré restaurado”.

Jeremías 31:23: “Una vez más, hablarán esta palabra… cuando restaure sus riquezas”.

Jeremías 32:44: “Restauraré tus riquezas”.

Jeremías 33:7: “Restauraré las riquezas de Judá y las riquezas de Israel, las reedificaré como eran al principio”.

Jeremías 33:11: “Restauraré las riquezas de la tierra como al principio”.

Jeremías 33:26: “Restauraré sus riquezas y tendré misericordia de ellos”.

Jeremías 42:12: “También te mostraré compasión y te restaurare a tu propia tierra”.

Lamentaciones 5:21: “Permítenos volver a ti, Señor, y volveremos; devuélvenos la gloria de antaño”.

Oseas 6:11: “¡A ti también, Judá, te espera la cosecha de tu maldad! Cuando cambie yo la suerte de mi pueblo”.

Joel 2:25-27: “Restauraré los años que comieron la oruga… y mi pueblo nunca más será avergonzado”.

Joel 3:1: “Cuando restaure las riquezas de Judá y Jerusalén”.

Sofonías 2:7: “En aquellos días, en el tiempo señalado, cuando restaure yo la suerte de Judá y de Jerusalén”.

Sofonías 3:20: “Daré a ustedes fama y renombre entre todos los pueblos de la tierra cuando yo los restaure ante sus mismos ojos”.

Zacarías 9:12: “Vuelvan a su fortaleza, cautivos de la esperanza, pues hoy mismo les hago saber que les devolveré el doble”.

Malaquías 4:6: “Él hará que los padres se reconcilien con sus hijos y los hijos con sus padres…”.

Gálatas 6:1: “Hermanos, si alguien es sorprendido en pecado, ustedes que son espirituales deben restaurarlo con una actitud humilde. Pero cuídese cada uno, porque también puede ser tentado”.

Santiago 5:15: “La oración de fe sanará al enfermo y el Señor lo levantará. Y si ha pecado, su pecado se le perdonará”.

Reciba la bendición y la restauración de Dios en cada área de nuestra vida durante el 2010 y en adelante.

Carol Kelley

sábado, 20 de febrero de 2010

“¡Quiebra las limitaciones!”

Por Kim Hadaway

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Meses atrás, el Espíritu Santo me despertó y me susurró una frase sobre 2 Reyes 6. Este capítulo comienza con los hijos de los profetas cayendo en la cuenta que el lugar donde habitan era demasiado pequeño. Entonces le pidieron permiso al profeta Eliseo para extender su territorio. Comenzaron a cortar árboles para alargar su lugar y a remover los obstáculos que bloqueaban su visión.

El Señor me habló muchas cosas sobre este pasaje, pero sólo tocaremos este punto. Proféticamente, creo que el Señor me mostró que es el tiempo para remover las cosas que obstruyen nuestra visión acerca de quién es Dios y todo lo que puso a nuestra disposición. Es tiempo para extendernos en el Reino de Dios que se está soltando en nuestro interior. Me puse a clamar por una expansión en mi territorio, pero comencé por expandir mi visión acerca de Él.

Él nos entregó todas las cosas pertenecientes a la vida y la piedad, pero nos limitamos por el lugar donde estuvimos viviendo y por nuestra percepción del Reino. No sé de usted, pero ya no quiero vivir en un lugar de limitación en ninguna área. Esto fue algo asombroso, Dios me mostraba que quería ensanchar mi territorio, pero en realidad, quería ensanchar todos nuestros territorios.

¿Se siente limitado? ¡Camine en la plenitud!

¿Se siente limitado? ¿Hay veces donde siente que no puede acceder a todo lo que tiene Dios para usted por causa de las limitaciones?

Creo que todos nos sentimos limitados a veces, pero servimos a un Dios que nos entregó todo. Él desea que caminemos en la plenitud de lo que nos entregó. También hizo un camino para que caminemos en completa libertad, sin limitaciones. La Palabra dice que Jesús vino para que pudiéramos tener vida en abundancia (Juan 10:10). Si no caminamos y vivimos en la vida abundante, necesitamos saber por qué.

La Palabra también dice: “Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres” (Juan 8:36). Jesús vino para darnos libertad plena. Pongámonos de acuerdo para ser libres de todas las limitaciones, este es parte del plan de Dios para cada uno de nosotros. Otra cosa poderosa que Jesús estableció es que nosotros también haríamos las cosas que hizo (Juan 14:12).

Por eso nuestro corazón clama: “Dios, queremos caminar en la plenitud de lo que pusiste a nuestra disposición. Queremos ver venir a tu Reino en plenitud en todas las áreas de nuestra vida, queremos modelar esto y afirmarnos en la plenitud de todo para lo que fuimos creados para ser y hacer. Queremos ser demostraciones de tu Reino y tu poder en la tierra”.

Vimos cómo esto ocurría poderosamente en el pasado, pero hay más. Si no vemos salvaciones, sanidades, limpieza de leprosos, sanidades de SIDA y resurrecciones de una manera corriente, entonces no estamos caminando en la plenitud de lo que Jesús logró para nosotros. Podemos vernos tan atrapados en la vida diaria que perdamos la realidad que está ante nosotros: Jesús nos dio todas las cosas y tiene grandes planes para nosotros.

Predique el evangelio dondequiera que esté

Hay una gran comisión y todos estamos llamados a cumplirla: Ir por todo el mundo predicando el Evangelio, las buenas nuevas de Jesucristo. Algunos de ustedes pueden decir que eso los limita. Pero no es así. ¿Dónde está su mundo? Puede alcanzar a aquellos donde vive. Algunos pueden decir, soy discapacitado y no puedo salir de mi casa. Puede influenciar su mundo siendo una luz para aquellos con quienes entre en contacto. Si está leyendo esto en Internet, esa puede ser una forma de alcanzar su mundo y las naciones. No debemos permitir que los pensamientos equivocados gobiernen lo que percibimos para ser efectivos.

Hace años, recuerdo un joven que tomaba literalmente cada palabra que habló Jesús en Mateo 10. Este joven se fue como misionero hacia otras naciones, porque la parte de la Palabra respecto de limpiar a los leprosos era para él. Buscó a los leprosos, ¿se sanaron la primera vez que fue? No, ¡pero vio la salvación de toda la villa! Podría decir que eso es muy grande. Una vez más, no permita que el desaliento lo limite. Si no lo ve la primera vez, habrá una segunda.

Vivo en Norteamérica. No puedo decir que vi un leproso, pero sí gente con SIDA. Creo que esta es parte de esa comisión: sanar a los enfermos y limpiar a los leprosos. ¿Vimos alguna vez el cáncer? ¿Vimos alguna enfermedad? Una vez más, exponga la mentira. Si está postrado, ¿cómo puede hacer esto? ¡Ore! Puede encontrar una necesidad y orar desde donde se encuentra. Dios no está limitado por su ubicación, nosotros tampoco deberíamos.

Una vez más, ¿está batallando con algunas limitaciones en alguna área de su vida? Este es el día para ser libre de ellas. Persevere hasta que lo grande se manifieste en su vida. Este joven podría decir que no conocía a nadie en esa nación extraña, que no tenía las finanzas, que era un desconocido o que un hombre bloqueó su paso. Lo que Dios tiene para nosotros, ningún hombre lo puede detener si lo buscamos a Él y su Reino.

“Su autoridad es con Dios, no con los hombres”

Muchos años atrás tuve una palabra profética que Dios me habló muchas veces. Era esta: “Tu autoridad viene de Dios, no de los hombres”. Permítame compartir la interpretación. Hay un lugar donde sentí que los hombres me descalificaban y no me alentaban, me sentí limitada por la percepción de los hombres sobre mis dones o habilidades. ¡Pero Dios siempre supo los planes que tenía para mí y para usted! Comencé a buscar ese plan y Dios comenzó a abrirme las puertas. Este es un proceso continuo, si miramos al hombre y vemos cómo no siempre nos celebra, ve nuestros dones o sentimos que no nos celebran por nuestras debilidades o por la falta de entrenamiento, estaremos limitados.

Conozco dos historias que pueden sacar esa teoría del agua. Uno fue Gedeón y el otro David. Dios envió al profeta Samuel para ungir al siguiente rey de Israel. Pero mientras recuerda la historia, no fue el candidato que elegirían los hombres, porque era un pastorcito que atendía las ovejas. En este capítulo, Dios establece: “No te dejes impresionar por su apariencia ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente se fija en las apariencias, pero yo me fijo en el corazón” (1 Samuel 16:7). David era un hombre según el corazón de Dios. Busquemos el corazón de Dios en cada área, sin permitir que las limitaciones pasadas o los obstáculos nos bloqueen o nos retengan.

Cuando buscamos a Dios con todo nuestro corazón, todas las cosas del mundo quedarán a un costado. ¡Enfoquémonos en Él, su rostro, su piedad, su gloria, su verdad, su provisión y su pacto hacia nosotros!

Tengo otro testimonio que debería inspirarnos a todos. Conocí a una mujer de Dios que su hijo tiene síndrome de Down. El deseo de su familia es verlo sano y restaurado, pero mientras tanto, no permiten que ninguna limitación les impida vivir la plenitud de esa bendición. Mientras este joven crecía, su madre oraba por él y profetizaba que era un hombre de Dios bendecido, fuerte en el Señor y un ministro del evangelio a las naciones.

Pero lo asombroso y dulce para mí fue esto. A veces este joven venía donde su madre y apoyaba su cabeza en su hombro para decirle: “Mamá, vuelve a decirme cómo llegaré a ser un hombre de Dios y ministrar las buenas nuevas de Jesús a las naciones”. Así lo hizo. Cuando este joven llegó a los dieciocho, le preguntaron qué quería para su cumpleaños y respondió: “Quiero predicar”. Entonces su familia le regaló una tarima para que así lo hiciera. Lo llevaron a una habitación, invitaron a la familia y a sus amigos y su madre le dijo: “Busca al Señor para recibir el mensaje y lo escribiré para ti, pero tú le debes preguntar lo que Él quiere que compartas”.

Cuando lo hizo, la gente fue muy bendecida por este joven. Más tarde su familia fue de viaje misionero y él les dijo que el Señor también quería que fuera. También tenía una palabra de conocimiento del Señor para un muchacho con síndrome de Down y Dios lo tocaría con su poder sanador. Hasta llegó a ver el rostro del niño. La última noche del viaje misionero conoció al niño que Dios le mostró. El punto es este, Dios usó a este joven con síndrome de Down para llevar las buenas nuevas de Jesucristo a todas las naciones. ¿Quién estaba limitado? Ni este joven ni su familia. Sabían a quién servían, creían que es fiel y que sus palabras son verdad.

Estoy cortando a los enemigos del pasado

En este último tiempo, pude oír que el Señor me decía que estaba cortando a los enemigos del pasado. En este último tiempo, sentí que el Señor me mostraba que las cosas de nuestro pasado que nos persiguieron, ya no podrían gobernar nuestra vida. ¿Su pasado lo limita? Lea Éxodo 14:13-16 e Isaías 43. Los antiguos enemigos de Israel los perseguían, pero Dios mostró su poder a su favor. También les mostró la autoridad que les entregó a sus siervos y cómo necesitamos usarla, sin quedar atrapados por nuestro entendimiento o por las trampas del enemigo.

¿Cómo ocurre eso? Conozca a Dios y su Palabra, su pacto, búsquelo a Él y su rostro, alábelo. Somos instrumentos de alabanza, soltemos los nuevos sonidos de alabanza dentro de nosotros. Además, necesitamos cambiar nuestra manera de pensar y enfocarnos en todo lo que hizo Jesús por nosotros. Alábelo todos los días por ello. Lea el Salmo 103 y Zacarías 3.

Necesitamos cambiar nuestro enfoque. Aquello en lo que se concentre, lo llenará de su poder. Mire al Señor y sus promesas, pídale que le dé una revelación más profunda de Él y su Reino. Este es un tiempo de una pasión renovada y mientras entramos en el corazón de Dios todos los días, encontramos una revelación más profunda de todo. Oremos.

Oración sobre uno mismo y sobre el Cuerpo de Cristo

Señor, te agradezco por exponer todas las limitaciones que operaron en nuestras vidas y te agradecemos por removerlas. Te agradecemos por invitarnos a este lugar de expansión.

Señor, elegimos este día renovar nuestra manera de pensar y clamamos para remover todos los pensamientos que nos atraparon en el pasado. Te agradecemos porque estás eliminando a los enemigos de nuestro pasado ahora mismo. Elegimos enfocarnos en Ti, en tu Reino y en todo lo que nos entregaste, sin enfocarnos más en nuestras limitaciones. Tú eres la Palabra viviente y ella es verdad.

Gracias por cuidarnos y ocuparte de nosotros. Gracias por proveer todo lo que necesitamos. Gracias por una unción fresca para cada tiempo y por expandir nuestra capacidad de amar y recibir amor. También te damos gracias por este tiempo de una intimidad renovada contigo y te agradecemos por habernos invitado a este sitio. Gracias porque nos estás llevando más profundo dentro de tu corazón y por la revelación de quién eres, así como lo hiciste por Juan en el libro de Apocalipsis.

Danos claridad de visión y ojos abiertos, Señor. Estamos hambrientos por verte como nunca antes. Deseamos las cosas profundas de Dios, desechando un entendimiento entenebrecido o limitado. Deseamos unirnos a Ti en este lugar de iluminación, con una intimidad renovada y profunda, por eso aceptamos Tu invitación. Te agradecemos por habernos mostrado las realidades de tu Reino. Gracias porque estableces tu Reino en nosotros como nunca antes.

Señor, te agradecemos por oír el clamor de nuestro corazón y por respondernos cuando clamamos a Ti.

Kim Hadaway

“La cercanía de nuestro Dios”

 

Por Francis Frangipane

clip_image002En el Salmo 73, el salmista Asaf expresó un problema que todos nosotros solemos sentir. Se preguntó por qué los malvados prosperan mientras los justos son castigados. La idea lo molestaba mucho hasta que entró en el santuario de Dios. Cuando estuvo en la presencia de Dios, Asaf se dio cuenta de su error. Mientas se comparaba a sí mismo con un incrédulo, pudo ver que, aparte de la influencia de Dios, no tenía nada de qué alardear. Dijo: “Se me afligía el corazón y se me amargaba el ánimo por mi necedad e ignorancia. ¡Me porté contigo como una bestia!” (Salmo 73:21-22).

Finalmente, su alma se iluminó mientras consideraba que sólo Dios era su salvación y su relación con Él era su fortaleza. Escribió, “Pero yo siempre estoy contigo, pues tú me sostienes de la mano derecha. Me guías con tu consejo y más tarde me acogerás en gloria. ¿A quién tengo en el cielo sino a ti? Si estoy contigo, ya nada quiero en la tierra. Podrán desfallecer mi cuerpo y mi espíritu, pero Dios fortalece mi corazón; él es mi herencia eterna” (Salmo 73:23-26).

El pensamiento que resume la revelación de Asaf y el punto de este capítulo, es el verso 28: “Para mí el bien es estar cerca de Dios. He hecho del Señor Soberano mi refugio para contar todas sus obras”.

Pongámoslo claro: La cercanía de Dios produce nuestro bienestar. Dios nunca diseñó el cristianismo para gente linda que trata de parecer buena. No somos así de buenos. No somos así de inteligentes y no somos así de bonitos. Lo único que puede sostener al verdadero cristianismo es una verdadera unidad con Jesucristo. Nuestra cercanía hacia Él en todas las cosas produce nuestro fruto espiritual.

Si somos honestos debemos admitir que, aparte de la influencia y la obra de Dios, no existe nada moralmente superior o alguna virtud importante acerca de nuestras vidas. Nuestra carne tiene las mismas pasiones carnales que la gente en el mundo, nuestra alma carga las mismas inseguridades y temores. Por tanto, aparte de la influencia de Cristo en nosotros, no existe diferencia entre los cristianos y los no cristianos (salvo que los cristianos, cuando viven separados de la presencia de Dios, pueden llegar a ser más odiosos). Sólo nuestra relación con el Señor puede mantenernos alejados de la lujuria y los deseos de la carne, porque lejos de Él no podemos hacer nada (Juan 15:5).

Por tanto, la fortaleza de nuestro andar no se origina dentro de nosotros, viene de nuestra relación con Cristo. Nuestra virtud, si se puede definir como tal, es que aprendimos a priorizar la búsqueda de Dios, nuestro carácter es la expresión de nuestra unidad con Jesús. Por eso quiero decir que Jesús no sólo es el primero en nuestra lista de prioridades, su influencia gobierna sobre todas nuestras prioridades. Él inspira amor en nuestras relaciones, su voz se transforma en la convicción sobre nuestra integridad. Dios hizo que Cristo sea para nosotros nuestra “sabiduría… justicia, santificación y redención” (1 Corintios 1:30).

Entonces, los que buscan a Dios desean encontrar el placer del Señor atrayéndolos hacia cada aspecto de sus almas. También saben que si alguna área de sus vidas permanece aislada de Dios, será vulnerable a la manipulación del enemigo. Permítame subrayar la verdad del salmista y digamos con nuestra propia voz de convicción: La cercanía de Dios es nuestro bienestar.

Dios mío, eres el amante de mi alma. Extendiste tus manos hacia mí con fidelidad. Aún así, a veces me alejé y estuve distante. Maestro, este día te agradezco porque los tiempos más maravillosos que pasé, fueron junto a Ti. Cuando mi corazón se acerca a Ti, participo del néctar de la vida.

Francis Frangipane

martes, 16 de febrero de 2010

“Dios te guardará a ti y a tu destino”

 

Por Victoria Boyson

clip_image002Cuando el Señor comienza a cumplir tu destino, el enemigo tratará de destruirlo desde su infancia. “Con la cola arrastró la tercera parte de las estrellas del cielo y las arrojó sobre la tierra. Cuando la mujer estaba a punto de dar a luz, el dragón se plantó delante de ella para devorar a su hijo tan pronto como naciera” (Apocalipsis 12:4).

Existen muchas similitudes entre dar a luz a un niño en lo natural y dar a luz nuestro destino en la realidad del espíritu. Hay un tiempo de concepción, otro de espera, luego el trabajo de parto y finalmente el alumbramiento. En el espíritu, cuando damos a luz las promesas de Dios en nuestra vida, nuestro destino se encuentra en nuestro estado más vulnerable. Es en ese momento que el enemigo tratará de ganar acceso para devorarlo.

El momento del nacimiento de nuestro destino, es su estado de mayor indefensión. No podemos hacer nada por nosotros mismos y si nos dejan solos, con toda seguridad seríamos destruidos. Así como un niño recién nacido necesita un cuidado cercano para mantenerse saludable y feliz, necesitamos a nuestro Señor más que nunca. ¿Por qué el Señor permite que su plan para nosotros sea probado en un tiempo tan vulnerable como ese? Es porque en este estado Él es el más fuerte, es cuando más lo necesitamos.

Necesitamos su ayuda desesperadamente. No sabemos qué hacer y a Él le agrada que sea así. Es en este estado y a través de este método que Dios busca introducir en nuestro método operativo una confianza y una seguridad singular en Él. El Señor está a cargo y con cada prueba somos cada vez más fuertes en Él, acercándonos más y más a Dios. Sabemos que nuestra necesidad de Él es grande. Ahora vemos cuán vulnerables somos y cuánto necesitamos obedecerlo a Él.

Niños pequeños

El niño Jesús no fue la excepción. Sí, era muy especial, pero este pequeño niño no podía salvar al mundo en este estado, aunque ese era su destino. Ni siquiera era capaz de cambiarse sus propios pañales, pero tres reyes, muchos pastores y huestes de ángeles lo honraron como el Salvador de la raza humana. Herodes le temía y se dio cuenta que no había un mejor tiempo para tratar de destruirlo que matar al Salvador mientras era un niño indefenso. Herodes mató cientos o quizá miles de bebés mientras trataba de destruir a Jesús. Aún con todos sus esfuerzos horrorosos por matar a Jesús y detener la concreción de la promesa… falló. Pero Herodes no lo destruyó porque Dios lo salvo una y otra vez.

Sabemos que esto fue verdad, cuando el Señor comienza a concretar una promesa, el enemigo tratará de destruirla durante su infancia. Cuando das a luz tu destino, todo el infierno parece levantarse en contra de ello. Tu destino, aún en su infancia, es el blanco principal del enemigo. Él quiere destruirlo mientras es pequeño y está aparentemente desprotegido… debemos esperar que así sea. Cuando el ataque llega, sabremos que es sólo eso y no el final de nuestro destino.

No debemos temer este ataque, porque de hecho es parte del proceso de nacimiento. Quizá no te veas muy amenazador para el enemigo ahora, incluso puedes sentir que fallaste. Sin embargo, así como Herodes, satanás está aterrado con tu futuro.

La protección de Dios

Verdaderamente creo que la visión del dragón esperando que la mujer diera a luz en Apocalipsis 12:4, es una imagen profética de Cristo, pero como es frecuente en la Escritura, este pasaje tiene más de un significado. Creo que esta Escritura también es una imagen de las tácticas del enemigo en contra de nuestro futuro en Cristo. Sabemos que no juega limpio y nos golpeará en nuestro punto más débil. No peleó limpio con Jesús y tampoco lo hará con nosotros.

“Pero ahora, así dice el Señor, el que te creó, Jacob, el que te formó, Israel: No temas, que yo te he redimido; te he llamado por tu nombre; tú eres mío. Cuando cruces las aguas, yo estaré contigo; cuando cruces los ríos, no te cubrirán sus aguas; cuando camines por el fuego, no te quemarás ni te abrasarán las llamas” (Isaías 43:1-2). Cuando caminamos a través de las aguas de la persecución, vemos a Dios con una mayor claridad y experimentamos una gran medida de su poder para protegernos. No debemos temer ante estas circunstancias, en lugar de ello, tenemos que confiar más en nuestro Señor.

Cuando Cristo nació, su derrota parecía inevitable. Era el Salvador, pero era sólo un niño indefenso. No olvides al Dios del destino. El Dios de todo el universo te está observando. Cualquier cosa que venga en tu contra, verás el amanecer de la luz del destino y no tendrás temor porque Dios está contigo.

“Yo estoy contigo. Te protegeré por dondequiera que vayas, y te traeré de vuelta a esta tierra. No te abandonaré hasta cumplir con todo lo que te he prometido” (Génesis 28:15).

Más allá de todo lo que la vida te pueda arrojar, sabes que estás en los brazos amorosos de un Padre Celestial y usará todas las batallas que debes atravesar para fortalecerte. A través de las pruebas diarias, adquieres conocimiento. Con cada prueba, sea que la pases o falles, conoces más la misericordia y la gracia de Dios. El deseo de Dios es que poseas más del carácter de su Hijo a través de las pruebas que atraviesas.

Nuestro destino

“Estaba encinta y gritaba por los dolores y angustias del parto” (Apocalipsis 12:2).

El destino de esta mujer era dar a luz un niño. Tenía mucho dolor, pero este dolor era parte del plan y tenía un propósito. Cuántas veces queremos que el dolor se detenga. Duele y no lo entendemos. Pero es parte del plan de Dios para nosotros y necesitamos confiar en Él. Nuestras pruebas producen un poder en nosotros que no se puede obtener de otra manera.

No te desesperes, te ayudaremos a atravesar cada valle y a subir cada monte. No pierdas tu energía o tu ánimo tratando de escapar o alejarte de tu dolor. Trabaja con ello para producir el propósito y el poder de las intenciones de Dios.

Cuando el Señor edifica la casa

“… porque él habló, y todo fue creado; dio una orden, y todo quedó firme” (Salmo 33:9).

Dios puso en movimiento los días que vivimos, habló y separó la luz de las tinieblas. Llamó a la luz día y a las tinieblas noche. Cada mañana cuando despertamos y el sol se levanta con nosotros, experimentamos la fidelidad del plan que Dios habló sobre nuestra vida. No importa si cometemos errores, Dios es fiel para defender lo que estableció.

“El Señor frustra los planes de las naciones; desbarata los designios de los pueblos. Pero los planes del Señor quedan firmes para siempre; los designios de su mente son eternos” (Salmo 33:10-11). Cuando el Señor lo establece en su lugar, estará firme. ¡Lo guardará!

“Si el Señor no edifica la casa, en vano se esfuerzan los albañiles. Si el Señor no cuida la ciudad, en vano hacen guardia los vigilantes” (Salmo 127:1).

Sólo Dios puede ayudarte. Si Él te estableció en ese lugar, será fiel para guardarte. Dios será fiel para proteger lo que estableció. Tu destino está en las manos de Dios y no te fallará.

El único destino que vale la pena tener es el que Dios planeó para ti. La única casa que tiene valor para ti es la que Dios edificó.

Amado Padre, bendigo lo que estás edificando en tu amado hijo. Oro para que completes y defiendas lo que creaste en su corazón. Amén.

“Que tu gran amor, Señor, nos acompañe, tal como lo esperamos de ti” (Salmo 33:22).

Victoria Boyson

“¡El día de los soñadores! Dios quiere llenar de poder a los soñadores en el 2010”

 

Por John Belt

clip_image002Los sueños que Dios imparte, llevan dentro de sí la semilla de la gloria celestial. Debemos buscar a Dios de tal manera que pueda depositar dentro de nosotros los sueños hechos a la medida para nuestras vidas. Estos sueños tienen un rol clave para nuestra vida, entretejidos en el hermoso tapiz de su Reino revelado en la tierra hoy.

Llenando de poder a los soñadores

Dios quiere llenar de poder a los soñadores en el 2010. Los soñadores muchas veces son anulados por ser demasiado sensitivos a las opiniones de los demás. A veces pueden escoger a los amigos equivocados, haciendo que se oculten los planes del Señor para sus vidas. Pero Dios ama a los soñadores y busca oportunidades para llenarlos de poder.

Así como José era un soñador, Dios lo hizo atravesar una serie de situaciones para formar su carácter, su estabilidad y su fe. Luego de muchas pruebas, Dios encontró una joya sin precio en el corazón de José. Encontró una persona capaz de perdonar, avanzar y confiar en Él, que nunca se rendiría. Estas son las cualidades que Dios busca en todos nosotros. Dios también nos llama a ser soñadores. Si no soñamos, nuestras vidas están muertas. No existe propósito para una vida sin sueños. Si no tiene un sueño, ¡pídale a Dios que le entregue uno!

Perseverando en sus sueños

Sea grande o pequeño, todos los sueños tienen el potencial para crear una vida de fe, porque se necesita a Dios para realizar el sueño. Debemos soñar más allá de los límites de lo que podemos hacer para que Dios pueda ser el único que se lleve la gloria cuando se cumpla. Debemos perseverar en nuestros sueños y nunca dejarlos a un lado. Tuve muchas buenas ideas, pero las que vienen de Dios nunca me abandonan. La voz de Dios llama a nuestro espíritu para que se despierten estos sueños y así poder introducirnos en la tierra prometida de su propósito.

Nunca debemos sobrestimar el potencial de un sueño y tampoco subestimar el poder de nuestro Dios para cumplirlo. No necesitamos fe para lo posible, sino para lo imposible. Si es imposible, entonces sabemos que necesitamos a alguien más para que se cumpla. Aquí es donde nuestra dependencia con Dios se hace real. Dios quiere establecer soñadores que confíen en su habilidad para cumplirlos. Él desea sacarlos de su encierro para que puedan ver su grandeza, eludiendo la duda y la incredulidad de la gente miserable que está cegada a la verdad. La miseria ama la compañía, la gente miserable desea anular a un soñador porque los hace sentir inferiores.

Los soñadores tienen una cualidad superior porque la semilla y la vida en un sueño de Dios, nacieron en el cielo. Dios siempre proveerá las pruebas para un soñador. Pero un soñador trae esperanza y la gente sin esperanza pasa mucho trabajo con los sueños. Jesús es nuestra esperanza, es nuestro sueño hecho realidad. También es el principio de nuestros sueños, porque todas las cosas son hechas nuevas en Cristo. En Él somos nuevas criaturas donde todas las cosas son nuevas. Eso significa que todo es posible con Dios, ¡todo! No existe sueño demasiado grande para que Dios lo pueda cumplir.

“Pastel en el cielo”

La bendición está en los cielos con Dios. Debemos verla para atraparla. Dios le entregó a José un sueño como un “pastel en el cielo” donde todos se inclinaban ante él. Fue un sueño de prosperidad donde sería cabeza y no cola. Sería capaz de administrar y distribuir recursos. Pero Dios también sabía que José debería pagar un alto precio para creer en el sueño. Sabía que tendría que sufrir el rechazo de su familia y el tiempo que serviría en la prisión. Su propia familia rechazó sus sueños diciéndole que era un orgulloso. Quizá él tenía algo de orgullo, pero el de ellos era mucho mayor. Pero José tuvo un sueño porque estuvo en contacto con Dios.

Dios lo visitó y le entregó una invitación para creer en algo que estaba más allá de sus habilidades. Escogió creer y las pruebas lo siguieron. Luego llegó el día del cumplimiento en una noche. Dios quiere llenar de poder a sus soñadores luego que sus corazones atraviesen el proceso de sus tratos. Los que tienen sueños deberían alinearse con el corazón del Señor de tal manera que pueda llevarlos a su tierra prometida este año. Dios es bueno. Como dijo José: “Las cosas que ustedes tramaron para mal, Dios las transformó para bien”.

Génesis 50:20 dice: “Es verdad que ustedes pensaron hacerme mal, pero Dios transformó ese mal en bien para lograr lo que hoy estamos viendo: salvar la vida de mucha gente”.

Todas las cosas son posibles para los que creen y nada es posible para los incrédulos.

John Belt

lunes, 8 de febrero de 2010

“2010: Año de apertura, restauración, fe y misterios revelados”

 

Por Bill Burns

clip_image002La siguiente palabra es lo que me reveló el Espíritu Santo acerca de lo que acontecerá en la Iglesia durante el año 2010 (vea Juan 16:13).

El número cinco representa la gracia de Dios (fortaleza, poder y bendición); entonces, diez es el número de la doble gracia. Una doble porción estará disponible para el pueblo de Dios en el 2010. Romanos 5:2 nos dice que “por fe, tenemos acceso a esta gracia”. Por tanto, cada persona debería establecerse en una posición de fe para recibir una doble porción de la gracia de Dios que se está soltando ahora.

Aporte de Marsha Burns: “Te estoy entregando una medida extra de la gracia. Derramaré mi influencia Santa sobre tu vida para fortalecer y reforzar tu fe”, dice el Señor. “Si la disciernes, podrás hallarla y te regocijarás en la fragancia inusual de mi compañía. Recíbelo con gozo y caliéntate en la dulzura de mi presencia. Ven y encuentra tu deleite y reposo conmigo”.

2 Juan 1:3: “Sea con vosotros gracia, misericordia y paz, de Dios Padre y del Señor Jesucristo, Hijo del Padre, en verdad y en amor”.

En el 2009, el año de la plenitud, algunos cristianos comenzaron a ejercitarse en una medida más plena y completa de fe. Sin embargo, muchos en el Cuerpo de Cristo atravesaron crisis de fe debido a la dureza de las circunstancias en las que se encontraron.

Fe fracturada

El Señor usó el término “fe fracturada” para describir la condición de muchos dentro de su pueblo. Esto es lo que pude ver:

“Gente que estaba orando y levantando sus copas (representando la fe) con sus oraciones dentro de ellas (Apocalipsis 5:8). Sin embargo, cuando levantaron sus copas ante el Señor, estaban fracturadas y se quebraron. Las oraciones se cayeron desde las copas porque no tuvieron la fe necesaria como para sostenerlas”.

“Luego pude comprender que estos eran cristianos que conocían la Palabra de Dios (Romanos 10:17). Pero también sabían que la fe obra por el amor (Gálatas 5:6)”.

“Estas personas deberían funcionar en la fe, pero no fue así. Entonces, le pregunté al Señor por qué y me dijo que muchos se desgastaron y desalentaron por la intensidad y la duración de la batalla”.

Luego le pregunté cómo podían recobrar la fe cuando conocen la Palabra y el amor de Dios, pero su fe está fracturada.

Restauración de la fe

Pude ver al Espíritu Santo venir como un viento y recoger las piezas de las copas para restaurarlas con pegamento, mientras decía: “Este es mi regalo para la gente de fe”.

Luego me dijo, ‘este es el proceso de restauración de la fe’:

1. Arrepiéntete del desánimo, porque esto da a luz la duda y todo lo que no sea fe, es pecado (Romanos 14:23).

2. Clama en el nombre de Jesús porque es el Autor y Consumador de tu fe (Hebreos 12:2). Pídele que restaure tu fe y envíe al Espíritu Santo sobre tu vida (Juan 16:7).

3. Pídele al Espíritu Santo que te imparta el Don de Fe (1 Corintios 12:9). Esta es la fe que restaura. Es la fe de Dios y no la de los hombres. Esta es la fe que se transforma en la sustancia de las cosas que se esperan y en la evidencia de las cosas que no se ven (Hebreos 11:1).

2010 será el año de la restauración de la fe, mientras seguimos el proceso de restauración del Señor.

Mateo 7:7 dice: “Pide y se te dará”.

Aporte de Marsha Burns: “No soy un Dios que no puedo ver o comprender las pruebas y circunstancias que atravesaste. Te veo y te sostengo a través de la prueba, porque estoy contigo. Y ahora, pronuncio bendición sobre tu vida de una manera tangible, sólo abre tu corazón y recíbela”, dice el Señor. Proverbios 10:22: “La bendición del Señor trae riquezas y nada se gana con preocuparse”.

Un año de apertura

El número 10 también significa la perfección del orden divino. El Señor me entregó la siguiente palabra acerca de su “orden divino” para el 2010:

15 de Diciembre del 2009: La trompeta, por Bill Burns:

“Las cosas que te entrego serán completamente tuyas, porque ese es mi corazón hacia ti, para que puedas poseer por completo el Reino hacia el cual te traslado. Prepárate para este nuevo año. Por cierto, será un año de triunfos para muchos, porque será conocido como el año de la apertura para aquellos que me siguen. Ya se establecieron las sendas de Sión. Síguelas por medio de mi palabra mientras te guía el Espíritu. Todas las cosas se manifestarán en Sión. Hijo mío, ven a ese monte. Allí te transfiguraré y te transformaré. Ven y ve, ven y prueba, ven y cena, ven y regocíjate por lo que estoy a punto de hacer”, dice el Señor.

El Señor me dijo que nos iba a dar un “nuevo punto de referencia” desde el cual trabajar. Será un nuevo punto de entrada hacia la realidad sobrenatural del Reino.

El Espíritu Santo nos moverá y centrará en una posición que nos alineará con los portales celestiales. Esto es como su antena satelital que debe estar perfectamente alineado con el satélite para recibir la señal. Mientras entramos en los cielos a través de estos portales, veremos con mayor claridad los propósitos de Dios. Al atravesar el portal, las experiencias, visiones, sueños y palabras proféticas serán más reveladoras que nunca antes.

Entraremos en un nivel espiritual más elevado que hasta ahora desconocemos. Mientras se establecen estos portales, habrá visitaciones angelicales más frecuentes. Estas experiencias acelerarán nuestra fe y establecerán tal realidad espiritual del Reino, que comenzarán los avivamientos en todos los niveles. Los avivamientos ocurrirán primero en nuestras finanzas y en nuestra salud, luego en las demás áreas.

El Señor del Avivamiento viene en este año para guiar a su pueblo hacia la victoria que resultará en la recuperación de todas las cosas perdidas.

Un año de recuperación

El ladrón fue implacable durante este tiempo y les robó a muchos hijos de Dios. Sin embargo, el Señor está llamando al 2010 el año de la recuperación. Él nos está hablando de la misma manera que le habló a David en 1 Samuel 30. Mientras David y sus hombres estaban en el campo de batalla, el enemigo vino y les robó sus mujeres, sus hijos y sus posesiones.

David se deprimió cuando sus hombres lo maldijeron y quisieron apedrearlo.

La senda hacia la victoria:

1. Como David, debemos aprender a vencer el desaliento, afirmándonos en el Señor.

2. David inquirió al Señor. Dios le dijo: “Recuperarás todo”. ¡Esto es lo que también te dice a ti!

3. David persiguió al enemigo. La recuperación vendrá debido a la guerra espiritual. David atacó al enemigo, recuperó todo lo que le robaron y mucho más.

Este será el año de la recuperación para aquellos que hagan guerra espiritual y demanden el retorno de lo que perdieron. ¿Perdiste tu salud? ¿Perdiste tus finanzas? O, ¿perdiste algo más? ¿Quieres todas estas cosas que te robaron? ¡Entonces pelea y recuperarás todas las cosas!

Un año de equipamiento

El año pasado el Señor me dijo que los años 2009, 2010 y 2011, serían de equipamiento. El Espíritu Santo nos está equipando con más de la autoridad del Señor para derrotar al enemigo.

Lucas 10:19: “Sí, les he dado autoridad a ustedes para pisotear serpientes y escorpiones y vencer todo el poder del enemigo; nada les podrá hacer daño”.

Esta es una de las razones por las cuales tantas personas atravesaron tiempos difíciles en el 2009. El equipamiento se produce en la adversidad. En otras palabras, la adversidad es el campo de juego del equipamiento. De hecho, la adversidad es necesaria para el crecimiento espiritual. La adversidad es la fuerza que se opone a nuestro crecimiento. La adversidad son los problemas, las persecuciones y las tribulaciones que vienen en contra nuestra.

Hechos 14:22: “Es necesario pasar por muchas dificultades para entrar en el reino de Dios”.

Estamos saliendo de la Era de la Iglesia (la era del compromiso) y entrando proféticamente en la Era del Reino (el gobierno de Cristo). Al hacer esto, encontraremos mucha más oposición de satanás. Él no quiere que accedamos a la autoridad del Reino con la que nos están equipando.

Si queremos ser equipados con la autoridad de Cristo, también debemos abrazar la adversidad.

Romanos 5:3-4: “Y no sólo en esto, sino también en nuestros sufrimientos, porque sabemos que el sufrimiento produce perseverancia; la perseverancia, entereza de carácter; la entereza de carácter, esperanza”.

El enemigo vendrá, pero no temas, porque el Señor vendrá hacia nosotros en su gloria.

Isaías 59:19: “Desde el occidente temerán el nombre del Señor y desde el oriente respetarán su gloria. Porque vendrá como un torrente caudaloso, impulsado por el soplo del Señor”.

En la versión King James dice: “… El Espíritu del Señor levantará estandarte en contra de él”. La palabra “estandarte” significa establecer una vía de escape, hacer desaparecer o esconder.

Nos esconderá la gloria del Señor mientras viene a pelear junto a nosotros y a nuestro favor para que podamos recibir su autoridad. Creo que el próximo mover de la gloria del Señor será en el Occidente, al oeste de Jerusalén, en los Estados Unidos.

El clamor del Espíritu en este tiempo de equipamiento es:

Isaías 60:1-2 dice: “¡Levántate y resplandece, que tu luz ha llegado! ¡La gloria del Señor brilla sobre ti! Mira, las tinieblas cubren la tierra, y una densa oscuridad se cierne sobre los pueblos. Pero la aurora del Señor brillará sobre ti; ¡sobre ti se manifestará su gloria!”.

Permite que el Señor te equipe. Abraza la adversidad confiando que el Señor te protege. Camina en la gloria y crece en tu autoridad. Este es tu destino.

El año del diezmo

El diezmo es la décima parte de nuestros ingresos, con la que honramos al Señor y a aquellos que realizan sus obras. En este año 2010, Dios honrará a todos aquellos que diezmen. Él me habló estas palabras: “Honraré a aquellos que me honraron con sus ofrendas. Los beneficios del diezmo se multiplicarán y amplificarán este año. Como está escrito, ‘dad y se os dará’”.

Lucas 6:38 dice: “Den, y se les dará: se les echará en el regazo una medida llena, apretada, sacudida y desbordante. Porque con la medida que midan a otros, se les medirá a ustedes”.

Presta atención a los beneficios de entregarle tus diezmos a Dios:

Malaquías 3:10-11 dice: “Traigan íntegro el diezmo para los fondos del templo, y así habrá alimento en mi casa. Pruébenme en esto, dice el Señor Todopoderoso y vean si no abro las compuertas del cielo y derramo sobre ustedes bendición hasta que sobreabunde. Exterminaré a la langosta, para que no arruine sus cultivos y las vides en los campos no pierdan su fruto, dice el Señor Todopoderoso”.

Algunos podrían decir que el diezmo no es un principio del Nuevo Testamento, pero ¿qué dice Jesús en el Nuevo Testamento? En Mateo 23:23 dice que diezmar es “algo que debes hacer”.

Algunos dirían que diezmar era parte de la ley y se eliminó cuando Jesús cumplió la ley. Sin embargo, diezmar era parte del pacto de Abraham con Dios (Génesis 14:20) antes de la ley y esta “… no anula el pacto que Dios había ratificado previamente; de haber sido así, quedaría sin efecto la promesa” (Gálatas 3:17).

Gálatas 3:14 dice: “Así sucedió, para que, por medio de Cristo Jesús, la bendición prometida a Abraham llegara a las naciones, y para que por la fe recibiéramos el Espíritu según la promesa”.

Gálatas 3:29 dice: “Y si ustedes pertenecen a Cristo, son la descendencia de Abraham y herederos según la promesa”.

Instrucción: No entregues los diezmos por obligación, sino porque quieres honrar al Señor con gran gozo.

2 Corintios 9:7: “Cada uno debe dar según lo que haya decidido en su corazón, no de mala gana ni por obligación, porque Dios ama al que da con alegría”.

Cuando diezmes, cúbrelo con fe y luego entrégalo con gozo, esperando que Dios te bendiga por causa de tu obediencia. Luego Dios reprenderá al devorador a tu favor y derramará bendiciones sobre tu vida.

“Muchos recibirán una recuperación financiera en el 2010 por causa de los diezmos”

Misterios revelados

2010 será un año donde se revelarán los misterios. Algunas de las cosas que Dios ordenó en el 2009 no se comprendieron. Sin embargo, la revelación de los propósitos de Dios que ocurrieron en medio de nuestras circunstancias, se comprenderá por completo en el 2010 y se recibirán los beneficios de esos cambios durante este año.

El Señor usualmente me entrega un capítulo de su Palabra que revela lo que ocurrirá el año siguiente. Este año, recibí Apocalipsis 10.

En el capítulo 10, el apóstol Juan oyó siete truenos que hablaron.

Apocalipsis 10:4 dice: “Una vez que hablaron los siete truenos, estaba yo por escribir, pero oí una voz del cielo que me decía: Guarda en secreto lo que han dicho los siete truenos y no lo escribas”.

Los siete truenos son misterios revelados antes por la séptima trompeta.

Apocalipsis 10:7 dice: “En los días en que hable el séptimo ángel, cuando comience a tocar su trompeta, se cumplirá el designio secreto de Dios, tal y como lo anunció a sus siervos los profetas”.

Los siete truenos pueden revelar siete misterios diferentes, pero creo que serán más que eso. Digo esto porque siete es el número de la perfección de Dios que refleja la plenitud. Creo que los siete truenos representan la voz del Señor que revela muchas cosas ocultas.

Apocalipsis es el libro de los sietes (compleción o plenitud) donde Dios termina (por medio de Jesucristo) todas las cosas que pertenecen a su creación.

Por tanto, creo que se revelará una multitud de estos misterios concernientes a las vidas de los creyentes. Estas revelaciones los liberarán de las ataduras, revelando sus propósitos, soltando dones y muchas otras cosas.

Se revelarán los misterios que darán dirección a la Iglesia (a nivel corporativo) y se revelarán los misterios personalmente para cada creyente.

2010 será el año de los misterios revelados, misterios que traerán sabiduría y dirección, muchos de los cuales vendrán proféticamente.

En el verso 11, Juan nos dice: “Entonces se me ordenó: Tienes que volver a profetizar acerca de muchos pueblos, naciones, lenguas y reyes”. ¿Oyen esto profetas? Muchos de ustedes fueron silenciados por el enemigo. Pero Dios dice que deben volver a profetizar.

El don de profecía vendrá con una mayor revelación en estos días. Vivimos tiempos de anunciamiento divino. ¿Oirás, atenderás y hablarás?

Estas son las cosas que el Señor me mostró para el 2010. ¡Te deseo un año próspero y lleno de bendición!

Bill Burns

“La palabra con T: Una profecía para el 2010”

 

Por Sean Feucht

clip_image002La palabra con “T”

Estoy cansado de esto. Es una palabra que honestamente estoy enfermo de oír una y otra vez en los últimos meses y años, simplemente me cansó. A pesar de mis sentimientos personales sobre el tema, no me pude despegar de este sonido. Cuando observo las noticias, leo los periódicos, hablo con mis amigos o paso algún tiempo en oración y ¡allí está de nuevo! Esta expresión me estuvo rondando por meses y continúa resonando en mis oídos ahora. También se utilizó con frecuencia en casi todas las esferas de la sociedad para describir el estado de la humanidad en nuestros días. El mundo de la política, la economía, los deportes, la medicina y aún la Iglesia, están utilizando esta palabra para describir el cambio significativo que está sucediendo: Transición.

Revelación en el mundo

Cada líder y director del movimiento Arde 24-7 por todo el mundo, estuvo buscando el corazón de Dios de una manera consagrada, pidiéndole una perspectiva fresca para el año 2010. Fue un tiempo donde hubo encuentros muy fuertes en la presencia de Dios. Nuestro equipo tenía la carga y la resolución para no ser haraganes y tropezar con el letargo de decir que un año más se limita a cambiar el 9 por el 10 en nuestros calendarios. Debemos ser guiados por una revelación, una intuición y una unción frescas, mientras literalmente nos introducen en un nuevo tiempo por todo el mundo, ¡estemos listos o no! Así como José, Daniel y aún los hijos de Isacar en la Biblia, anhelamos ser un pueblo que aún la gente del mundo nos convoque a interpretar “los tiempos y las estaciones”.

Durante nuestro ayuno tuve que desempacar una cantidad ridícula de cajas en mi nuevo hogar y allí Dios comenzó a hablarme. Estaba cansado, un poco irritado y muy ofuscado por todo el trabajo que tuve que realizar durante los días que estuve en mi casa. En este lugar incómodo, Dios decidió mostrarse y entregarme algunas cosas frescas en mi espíritu. Pienso que es gracioso ver cómo a Él le encanta elegir el momento menos indicado para revelarnos su perspectiva celestial. No siempre ocurre durante momentos de oración profunda, adoración o búsqueda, cuando sentimos que estamos más preparados para oír. Creo que a Dios lo atraen nuestra rutina, nuestras actividades normales y aún las partes más aburridas de nuestra vida. ¿Qué sucedería si Él se deleita en habitar con nosotros durante el 98% de nuestro tiempo que pasamos fuera de los servicios en la Iglesia o cuando no estamos orando? Ese es sólo un pequeño pensamiento en el cual podemos meditar.

Aquí está una vez más

Hace poco, mi esposa Kate y yo nos mudamos a Harrisburg, Pennsylvania por un sueño, una palabra y un antojo. ¡En serio! Dios secuestró violentamente nuestros sueños de California y nos llevó de regreso a la Costa Este para impartir su fuego sobre jóvenes predicadores y músicos como David, llenándolos con su gracia y su fe para derribar al gigante del humanismo que se levantó sobre una generación. Una hermosa comunidad de amados nos recibió con los brazos abiertos y nos sentimos atrapados por el remolino del destino.

Aquí me encuentro, en medio de la tundra fría y llena de nieve del Noreste (muy lejos de Texas). Mientras pasaba el tiempo desempacando los últimos cuatro años de mi vida (en realidad nunca se desempacaron) en una casa antigua, poco familiar y llena de polvo; Dios me habló. La palabra infame, repetitiva y fastidiosa que me esforcé por alejar de mis oídos, volvía una vez más: Transición. Pude oír las palabras del Espíritu: “Es el año de la mayor transición en la historia de la humanidad”.

Inmediatamente vino a mi mente el pasaje de 2 Corintios 3:18: “Así, todos nosotros, que con el rostro descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor, somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la acción del Señor, que es el Espíritu”.

El estado perpetuo

Aunque oí este verso muchas veces antes, la revelación fue que somos hijos e hijas de Dios que vivimos como mortales en la tierra, pero en un estado perpetuo de transición. No es la mayor o la última retórica cristiana, sino una verdad bíblica fáctica. Con cada respiración y latido, y con cada tarea mundana de la vida, está ocurriendo una gloriosa transformación. Fuimos atrapados en una “gloria creciente” y estamos en transición para vernos más y más radiantes, ¡así como Él! Quizá por ahora no nos sintamos siempre radiantes (especialmente cuando desempacamos una casa), pero está ocurriendo con seguridad.

Mientras estaba sentado en el piso de madera de 70 años y muy frustrado con la lista de “cosas por hacer” delante de mí, era como si Dios me dijera: “¡Mejor te adaptas a esto y no te sientas muy cómodo con tu vida! Hijo, ¡no te olvides por qué estás aquí y hacia dónde vas! Este es el año donde harás la transición más grande y más profunda de tu vida. Así que, ¡prepárate!”.

En ese preciso momento, descendieron sobre mi corazón una gracia sobrenatural y una perspectiva celestial para recibir y atrapar esta revelación. Me permitió la oportunidad de regocijarme en este camino como una criatura peculiar y extraterrestre, en un planeta que no es mi verdadero destino final. Comencé a desechar los sentimientos de fastidio e invite a la transición del Espíritu a barrer mi vida para sincronizarme con el corazón del Señor.

Hasta el mundo lo sabe

Así como muchas estructuras, sistemas y criaturas en la tierra pueden sentirla y están profetizando acerca de esta transición global, debemos estar más dispuestos a recibirla. Están buscando respuestas, un sentido claro y a la Persona que vendrá. Me sentí sacudido por esto hace unos días mientras caminaba por Times Square en New York. Estuve charlando con una empleada de una tienda de descuentos, sólo unos días antes de la reunión mundial en sus calles para recibir el año nuevo.

En ese momento nos reunimos cruzando el río Hudson en un gran depósito lleno de cientos de adoradores salvajes que gritaban apasionados. Era una combinación intensa, cruda y hermosa mientras clamábamos al Cielo para que el Espíritu se derramara sobre la nación a través de 100 horas de adoración y oración furiosas. Fue la celebración más épica de año nuevo de la cual participé.

Volví a preguntarle a la trabajadora de la tienda qué pensaba sobre el año nuevo. Me respondió diciendo: “No estoy muy segura… pero siento que viene algo grande… todos lo sentimos”. Estaba asombrado por su percepción profética y me di cuenta que Dios estaba soltando el mismo sentir de anticipación, aún entre los perdidos del mundo. Por eso Romanos 8:19 resalta: “La creación aguarda con ansiedad la revelación de los hijos de Dios”.

Padres a hijos

Bien, ¿adivine qué? Aquí estamos. Es tiempo de despertar a la revelación de nuestro llamado supremo y quitarnos el yugo del cinismo, la desesperanza y la falsa humildad. Esas excusas y enredos no le servirán en el año 2010. Permita que el Espíritu de fe y la gracia se levanten para concentrarse en la desesperanza de la humanidad. ¡Estas son las horas más grandiosas de la historia del mundo!

Con la desaparición física de muchos grandes hombres y mujeres de Dios en nuestros días, hay una gran cantidad de mantos, llamados y comisiones que están esperando que una generación atrevida los recoja. Esta transición es de padres a hijos y de madres a hijas. Entre ellas podemos ver evangelistas, predicadores, pioneros y hombres y mujeres de una gran fe como Jill Austin y Oral Roberts. Conocí a Jill por algunos años y viajé con ella a Tierra Santa. También estudié en la Universidad Oral Roberts en Tulsa, Oklahoma, donde obtuve mi título. Por eso trabajo con una generación para alcanzar este legado desde donde ellos lo dejaron. El testigo cambió de manos y no tenemos otra opción que correr la carrera marcada para nosotros.

Abracémoslo

Los sacudones, cambios y transiciones actuales continuarán y debe ser así. No sólo continuarán en esta hora, aumentarán y acelerarán. ¡Abracémosla! Permita que el Señor limpie su corazón con agua pura y limpia, preparándolo para la transición más grande y dinámica que el mundo haya visto en este año.

Viene una excitación genuina, una emoción increíble y lo impredecible del Espíritu a la Iglesia en Occidente, ¡por eso debemos darle la bienvenida! China, Nepal y partes de Medio Oriente están listas para cosechar el fruto de esta explosión del Reino y la transición en nuestros días. Los milagros, señales, maravillas y salvaciones, están ocurriendo en una cantidad sin precedentes. Ahora es el turno del resto del mundo para entrar en ello. Por eso se está derramando un mayor nivel de gloria en la accesibilidad de su presencia que ni siquiera nos reconoceremos a nosotros mismos por su gloria sobre nuestra vida durante este año.

Abracemos y demos la bienvenida a la mayor transición de la historia de la humanidad.

Sean Feucht

lunes, 1 de febrero de 2010

“Pude ver cómo cada uno de nosotros se despojaba de la armadura vieja y estropeada para recibir nuevos escudos de fe”

 

Por Sandie Freed

clip_image002Amados, me estoy dando cuenta que no necesitamos recordar que estamos en medio de un cambio. La mayoría de nosotros comprende que estamos experimentando un cambio espiritual y natural. Junto a todo esto, estamos en transición… y eso implica mucho movimiento, ¿cierto?

Las estadísticas prueban que el 90% de la población rechaza el cambio… sin embargo, no podemos negar el hecho que está aquí. Aún así, creo que Dios está utilizando estos tiempos inciertos para atraernos hacia Él, para poder afilar nuestra espada del Espíritu y darnos la estrategia para utilizar nuestras armas espirituales en contra de nuestro enemigo. Gran parte de los cambios que estamos experimentando desafía nuestra fe en la habilidad de Dios para proveer para nosotros y restaurar lo que parece perdido. Discutiremos luego la importancia de usar nuestro escudo de fe durante este tiempo donde experimentaremos la fiereza del enemigo, pero por ahora comencemos por las saetas y las nueces del cambio.

El cambio es la línea de base más simple para describir palabras como transformación y transición. No intento apartarme de las definiciones de otras palabras para describir cómo se mueve Dios. Este artículo pretende ser básico y está escrito con una visión simple para que podamos comprender cómo mantenernos conectados con nuestra fe durante tiempos como estos.

Cambios

El diccionario describe al cambio como: “una causa para ser diferente, dar una forma o apariencia diferente”. También usa la palabra “transformar” (en relación con la palabra metamorfosis, el proceso que ocurre cuando el gusano se convierte en mariposa). Otras definiciones para cambio son: “intercambiar para o reemplazar con otro” (como cambiar de trabajo, iglesias, alineamientos; reemplazándolo con otra cosa). Permítame escribir definiciones más selectivas para poder comprender mejor el cambio que estamos experimentando durante estos tiempos de incertidumbre. Mientras lee, comience a ver si está experimentando alguno de estos cambios:


Cambio también significa:

“Poner una tapa fresca encima”. Una vez más, esto puede referirse a realineamientos espirituales. Debemos conectarnos con nuestro destino. Muchos de nosotros seremos alentados por Dios para reconectarnos y buscar nuevas conexiones. Además, ¿el enemigo lo cubrió falsamente con sus mentiras? ¿El enemigo trató de cubrirlo con sus palabras mentirosas? Es tiempo de levantarse, denunciando lo que el enemigo está hablando sobre nosotros y declarar lo que Dios dice sobre nuestro futuro. Declare el Salmo 91 sobre su vida y permita que lo cubra con sus alas.

“Alterarse”. ¿Alguna vez guardó sus ropas para reformarlas? Quizá hubo alguna lágrima y necesitó remendar la ropa. Algunos de nosotros necesitamos remiendos en este tiempo. Dios permitirá el cambio para que pueda ser remendado. Algunos necesitan un “dobladillo” en su ropa. Dios usará el cambio para completarlo, doblándolo hacia su voluntad divina.

“Colocarse otros vestidos”. Creo que estamos en un tiempo donde Dios está cambiando nuestros vestidos. Estamos removiendo y quitando lo viejo para ponernos lo nuevo. La Biblia se refiere al cambio de vestido durante los “tiempos de limpieza”. Dios está purificando el sacerdocio. Los sacerdotes están en medio de un gran cambio (Hebreos 7). Estamos abrazando la libertad que nos saca del legalismo y la ley, para buscar la verdad. Dios está revelando los misterios concernientes a su gloria para dirigirnos hacia la verdad por los días que vendrán. No podemos vestir las vestiduras antiguas en este tiempo nuevo. Utilice este tiempo como una oportunidad para arrepentirse y volverse hacia Dios. Arrepentirse implica cambiar. Durante un gran cambio, podemos pedirle a Dios que nos muestre nuestros corazones. El arrepentimiento abre la puerta para que podamos cambiar y transformar nuestro futuro.

“Profundizar en el tono”. Amo esta definición de cambio porque se refiere a una voz adolescente que se va profundizando (cambiando) mientras madura. Un abismo llama a otro abismo. En este tiempo, experimentaremos una voz de cambio. Mientras profundizamos en Dios, nuestra voz cambiará; hablaremos de una manera diferente y con un nuevo sonido. Develaremos los misterios de Dios hacia aquellos que tienen oídos para oír. Esto provocará la atmósfera a nuestro alrededor que cambiará y transformará a otros a la imagen de Dios.

“Experimentar algo diferente, como un cambio de estación”. Vivimos tiempos de incertidumbre. Nuestra situación económica parece dictar nuestro futuro. Sin embargo, no debemos temer. Este puede ser un tiempo para desarrollar una gran fe si nos concentramos en Él, en lugar de hacerlo en la economía. Use estas oportunidades para conocer a Dios con una mayor intimidad para que se eleve su fe.

“El reemplazo de una cosa por otra, sustitución”. El diccionario usa un ejemplo de “cambio de atmósfera”. Amo eso. Como lo expliqué anteriormente, podemos utilizar las oportunidades de cambio para madurar, crecer en Dios, usar nuestra fe y transformar la atmósfera de temor en una de gran fe, desde las tinieblas hacia la luz del Señor.

“Alterar la actitud o el enfoque de alguien”. Aquí es donde terminaremos las discusiones de varias definiciones que describen el cambio. Esta definición nos lleva hacia el punto donde realmente quiero discutir nuestra necesidad de transformar nuestro temor a lo desconocido y la incertidumbre de hoy, para ir hacia la fe que debemos desarrollar en nuestro Dios que no cambia. Debemos alterar nuestras actitudes si ofendemos a Dios por nuestras circunstancias o si lo juzgamos erróneamente durante los tiempos de incertidumbre. Dios usará el cambio y la incertidumbre para llevarnos a orar y buscar su rostro, pero debemos ser cuidadosos para no juzgarlo equivocadamente. Él dice que usará todo (aún la economía u otras pérdidas) para nuestro bien:

“Ahora bien, sabemos que Dios dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman, los que han sido llamados de acuerdo con su propósito. Porque a los que Dios conoció de antemano, también los predestinó a ser transformados según la imagen de su Hijo, para que él sea el primogénito entre muchos hermanos” (Romanos 8:28-29)

Desarrollando una fe mayor

Durante nuestras reuniones de fuego que realizamos todos los primeros viernes de cada mes en Bedford, Texas; tuve una visión del Cuerpo de Cristo experimentando un cambio de vestiduras. Cada uno de nosotros necesita verdaderamente un cambio de vestiduras para el tiempo que viene. No podemos movernos el año que viene con nuestra armadura pasada de moda.

Pude ver que cada uno de nosotros, como integrantes del ejército de Dios, nos quitábamos las armaduras viejas y deterioradas para cambiarlas por una totalmente nueva. La armadura nueva brillaba con la gloria de Dios. El pectoral tenía mucho brillo, la espada estaba muy afilada… todo brillaba como el sol (Hijo) sobre cada pieza designada de una manera intrincada. Lo que más me llamó la atención fue el escudo. Tenía tantas marcas de los encuentros fieros anteriores que Dios tuvo que entregarnos un escudo nuevo.

Durante el cambio de armadura, el escudo que recibíamos no sólo era nuevo… había cambiado. Supe que debíamos transformarnos hacia nuevos niveles de fe para este nuevo tiempo. El escudo de fe brillaba con la gloria de Dios… pero había más… pude ver el rostro de Jesús en el escudo. Fue como si el escudo en sí mismo fuera a la imagen de Jesús.

Cuando comencé a estudiar más sobre el escudo de la fe, me di cuenta que Jesús es nuestro escudo. Debemos darnos cuenta que si no confiamos completamente en Él, podemos dejar a un lado nuestro escudo de la fe y, aunque citemos toda la Escritura de memoria, perderemos la batalla. ¿Por qué? Porque estamos descansando en “nuestras palabras” y no nos relacionamos con Él. Saber que Jesús es nuestro escudo, nos equipará para las batallas por venir.

Satanás atravesó todos los límites… utilizará todas las tácticas para derrotarnos. Vendrá con tormentas de gran adversidad para desalentarnos y hacernos “volver a lo viejo”. Pero cuando recordamos que Jesús ganó la batalla contra satanás en la Cruz, podemos tomar nuestro escudo de fe y usarlo en contra de las mentiras del enemigo… ¡para ganar la batalla!

Como puede ver, nuestra fe descansa sobre la obra terminada de Cristo. En otras palabras, nuestra fe debe tener pegada la “imagen de Jesús”. Si sólo pegamos saltos, recitando la Escritura sobre una situación y llamamos a eso fe; experimentaremos la derrota. Hacer eso significa que oramos y declaramos desde el conocimiento intelectual y no desde el conocimiento de nuestra fe. ¿Cómo estamos seguros de ello? Bien, ese tipo de conocimiento viene por una adoración íntima que nos lleva a relacionarnos con Dios. Debemos adorar y guerrear. Adorar nos llenará de poder espiritual para la batalla. No podemos entrar en este tiempo sin ser adoradores puros. El adorador siempre desarrollará la imagen de Cristo en nosotros y nos llenará de poder para la victoria. Continúe leyendo, ¡se pondrá mucho mejor!

Utilizando nuestros escudos con forma de puertas

Cuando el Apóstol Pablo describió nuestro escudo de fe, utiliza la palabra “thureos”. En griego, esta es la palabra para “puerta”. Es interesante ver que los soldados romanos usaban escudos con forma de puertas. Se refiere a las puertas de un castillo, simbolizando una fortaleza móvil. Los escudos con forma de puerta atrajeron mi atención. ¿Por qué? ¡Porque Jesús es la puerta! Su victoria es la fortaleza en contra del enemigo. Cuando sostenemos nuestros escudos, ¡el enemigo ve el reflejo de Jesús! ¡Ningún diablo puede sostenerse ante eso!

Además, mientras sostenemos nuestros “escudos-puertas” que reflejan la imagen de Jesús, se tienen que abrir las puertas que cerró el enemigo. Jesús, el Abridor, va delante de nosotros a través de nuevas puertas de oportunidad y umbrales de nuevas victorias. Conocer a Cristo en la intimidad, nos llena de poder para declarar con osadía el pasaje de Miqueas 2:13:

“El que abre brecha marchará al frente y también ellos se abrirán camino; atravesarán la puerta y se irán, mientras su rey avanza al frente, mientras el Señor va a la cabeza” (Ex.23:20-21, 33:14, Isaías 63:8-9, Oseas 3:5, Amós 9:11).

Como Jesús es nuestro Sol y Escudo, seremos llenos de poder para pelear la buena batalla de la fe. El Salmo 84:11 describe al Señor como el sol y el escudo, prometiendo que protegerá y proveerá para aquellos que caminen sin culpa, sin que les falte nada.

Línea de base: Como Él es Quien dice que es, un Dios que no miente, no retendrá ninguna cosa buena de nosotros. Sin importar la economía, el gobierno o las circunstancias de la vida diaria, declara que es Dios y no cambia. El Salmo 34:9 nos promete a cada uno de nosotros: “A los que temen al Señor, no les faltará nada”.

¡Saquen sus escudos de fe y úsenlos!

Permítame terminar con algunas directivas:

1. Use este tiempo de cambio para desarrollar un mayor nivel de fe.

2. Identifique las tácticas que el enemigo está utilizando para impedir su avance.

3. Pase tiempo adorando en intimidad. Durante la adoración, permita que Dios le hable desde las Escrituras para declarar y afirmarse. Estas Escrituras y declaraciones serán parte del escudo que utilizará en la batalla.

4. Use su tiempo de adoración para permitirle a Dios que lo transforme a su imagen.

5. Póngase de acuerdo con lo que dice Dios acerca de usted, permita que sea parte de su arsenal físico en contra del diablo mientras se levanta su verdadera identidad ordenada por Dios. Permita que Dios reemplace su viejo escudo por uno nuevo con “forma de puerta”.

6. Por fe, comience a declarar y decretar lo que Dios le habló. Declare sus promesas con osadía. Recuerde, pasó tiempo con Él en el lugar secreto y lo estuvo transformando su imagen. Ahora se ve más como Jesús, suena más como Jesús… entonces, puede reprender al enemigo y tendrá que huir.

7. Recuerde que mientras declara su victoria, Jesús tomó su pobreza, su enfermedad, su escasez y sus pecados para clavarlos en la Cruz. Él murió para que pudiera caminar en libertad.

8. Por fe, crea que Jesús derrotó a su enemigo. Elija rechazar todo el desaliento y el temor. Jesús es nuestro “escudo con forma de puerta”, para quebrar nuestro pasado. ¡Camine a través de la puerta abierta hacia su futuro!

Usted tiene una voz nueva y más profunda en el Espíritu. ¡Es tiempo de usarla!

Bendiciones,

Sandie Freed