Por Kim Clement
Profetizado el 17 de Enero del 2009 en Albany: Oigo al Espíritu del Señor diciendo, “Restauración”
Oigo al Espíritu del Señor diciendo: “Restauración”. Muchos oyeron palabras que dicen que la restauración vendrá. Pero Dios dice: “Albany, pude ver a esta casa y a la gente que se apartó descorazonada, pero puedo encontrar méritos y valor en ti para hacerte brillar como una corona de victoria para mostrarte a las huestes angelicales”.
Dios está haciendo algo llamado restauración. Un profeta no viene necesariamente a predicar. Un profeta viene con una palabra del Señor para decirnos lo que Dios tiene reservado para nosotros. Y si nunca antes ocurrió, quizá sea por la dureza del corazón de los hombres, porque la Biblia dice en Hebreos 3 y 4: “Les prometí que entrarían en Mi reposo si no endurecían sus corazones, pero endurecieron sus corazones y no entraron en Mi reposo” (parafraseado).
Por lo tanto, la promesa se mantuvo para otra persona u otra generación. Quizá nos dijo antes que traería una gran restauración y quizá por la dureza de nuestros corazones no ocurrió; pero no por la falta de exactitud del profeta o de la palabra profética.
Hay miles de personas que nos están observando por Internet y tú estás percibiendo literalmente una sensación en este salón dondequiera que estés sentado: “Si este milagro está a mi disposición…”. Dios te dice: “Si pude encontrar algún valor en la tierra, si pude tomar algo de polvo y hallar algo de valor en él para crear al ser humano, puedo hallar algo de valor en aquel por quien estás orando ahora mismo o en aquellas cosas por las cuales estás orando”.
No me importa si parecen muertos, no me importa si tus negocios parecen despedazarse. Personalmente creo esta noche que Dios está soplando sobre todo lo que parece muerto, lo que se ve como si no tuviera vida. Quiero que levante sus manos y todos los que nos miran por Internet, para que reciban el poder de la palabra profética que viene sobre sus vidas.
¡La restauración ocurrirá rápidamente!
Así como ese avión despegó de Long Island, así como ese avión despegó de New York, dio la vuelta y todos pensaron: “Se terminó”. Dios dijo: “Todos se salvaron”. ¡Eso es lo que sucederá con los Estados Unidos y con la economía de esta nación! No se rían cuando el profeta les dice que no hay recesión, ¡porque en el Reino de Dios no hay recesión!
Te estoy profetizando porque parece que muchas Iglesias despegan pero repentinamente descienden y dicen: “Es todo para América, nuestros negocios despegaron y repentinamente se hundieron”.
Pero Dios dice: “Ese avión representa a Estados Unidos, ese avión representa a las Iglesias, ese avión representa el mover de Dios que despegó a toda velocidad y repentinamente se ahogó”. Pero Dios dice: “Dieron la vuelta y aterrizaron sobre el río como un testimonio donde, en cuestión de segundos, salieron 150 personas”. ¿Qué tiene que ver eso con nosotros? ¡Le estoy diciendo esta noche que ocurrirá una restauración a toda velocidad!
Hablé con una azafata y me dijo que ella necesita 45 minutos para abordar el avión, ¡pero evacuaron 150 personas en 30 segundos! Esto es lo que les dice el Espíritu de Dios: “Despegó, parece que todo va bien, todos alababan y se regocijaban… pero luego oyeron las malas noticias: ‘Se detuvo, está cayendo, irá hasta el fondo, nadie sobrevivirá’”.
Dios dice: “La palabra que te entrego es que cada uno de los que clamen a Mí sobrevivirán y lo harán rápidamente, serán levantados como un testimonio de mi gloria en el 2009”.
Creo que no te das cuenta de lo que Dios está diciendo. El mover de Dios cayó y se estrelló, pero nada se estrella sin que Él rescate a los sobrevivientes. ¿Sabes lo que Él me dijo? El 2009 es el año de los milagros muy inusuales (comenzaron el año pasado). Comenzarán a ocurrir cosas que nunca antes ocurrieron y cantaremos esta canción:
“Esto nunca antes ocurrió, esto nunca antes ocurrió. Es un milagro, ¡un milagro sobrenatural!”
Tu economía se recuperará, pero lo hará a toda velocidad. “Dios, eso es completamente ridículo”. ¿Te parece? ¡Qué me cuentas de un avión que despega y 45 segundos después desciende sobre el agua y sobreviven todos los pasajeros! Eso es algo extraño, ¿cierto?
Esta noche el Señor dice: “Si recibes mi palabra, si recibes mi palabra profética, si recibes al profeta y dices ‘sí’, entonces ocurrirá”. Personalmente creo que esta palabra de restauración se cumplirá rápidamente. Dios dice: “Habrá una muerte en el 2010 y dirán, ‘¿qué es esta muerte?’ ¡Es la muerte de las deudas! Dirán, ‘hubo una muerte y es la muerte de las deudas’. Habrá un funeral antes de la primera parte del 2010 y enterrarán las deudas en esta nación. Enterrarán las deudas en sus propias vidas”. ¡Dios traerá la muerte sobre las deudas!
Percepción no visual, ¿qué es esto?
Estás enfrentando un gran adversario. Cuando enfrentamos un gran adversario en nuestras vidas, pensamos en términos de “algo está mal, entonces hicimos algo mal”. Pero no el apóstol Pablo. El apóstol Pablo tenía una percepción no visual. ¿Qué es la percepción no visual? Es la percepción que va más allá de nuestros cinco sentidos. Él recibió la información desde una luz que cegó sus ojos, pero lo alimentó con información. “Este es el lugar hacia donde te quiero llevar, quiero que vayas a la ciudad, ve a la calle que se llama Derecha y entres a una casa que le pertenece a un hombre llamado Judas y esperes allí, porque harás lo que te diga”. Él estaba confuso. No tenía otra cosa más que una luz no visual, una luz invisible.
Puedes pensar que esto es loco, pero hay un mover invisible y una luz invisible que existe justo a tu lado, alrededor de tu casa y en tus negocios. El hecho es que no percibimos esto. El apóstol Pablo, quien no era Pablo en ese tiempo, fue derribado por una luz brillante que cegó sus ojos y repentinamente tuvo percepción no visual. Oyó información que lo guió a ser el más grande apóstol que escribió las tres cuartas partes del Nuevo Testamento. Esa es la clase de información que usted y yo necesitamos. Esa es la clase de información que Dios está soltando en este día y en este tiempo. Somos profetas de esta nueva era. No somos profetas del tiempo pasado. No estoy hablando del movimiento de la nueva era, sino de la Era de la Gracia.
“Quiero desparramarte por toda la tierra, ¡quiero multiplicarte!”
En cada mover de Dios que parece colapsar… Él toma lo que era valioso y lo establece por todas partes, dispersándolo para todos puedan acceder a él. Todos los discípulos estaban detenidos en Jerusalén. Jesús dijo: “Quiero que vayan a Judea y hasta lo último de la tierra”; pero no, ellos querían permanecer allí. Y todos los que se quedaron fueron rasgados y destruidos.
Quiero que sepas que estaban construyendo una torre. Dios le dijo a su pueblo: “Quiero que se desparramen por toda la tierra, quiero que se multipliquen. Quiero que dominen. Quiero que se siembren”. Pero no, decidieron edificar una torre cuyo tope alcanzaría los cielos y se quedaron estancados en un lugar. Y lo que ocurrió fue que Dios se presentó y confundió su lenguaje, causando tal confusión que tuvieron que trasladarse.
Dios no quiere que nos estanquemos en un sólo sitio. No quiere que su mover se quede estancado en un sólo lugar. No quiere que el arca del pacto se quede en la casa de una persona. Quiere que esté disponible para las naciones de la tierra y no necesariamente tienen que venir hacia nosotros, debemos ir hacia ellas. Eso es lo que está ocurriendo.
No más límites. Dios hará un milagro tras otro, inusuales y desconocidos, sobre usted y su casa. ¡Esto nunca antes ocurrió! ¡Este es el tiempo, esta es la estación!
“Se revertirán los reportes negativos”
Vine a esta reunión esta noche y Dios me habló, luego le dije estas palabras a mi equipo: “Tú sabes, si no hubiera algo como el Reino de Dios, entonces no tendría ningún placer en lo que estoy haciendo, porque sólo sería una iglesia o una sociedad que se organiza por una causa”.
No somos una organización que se reúne por una causa. Lo que está ocurriendo en este edificio se está escribiendo en las piedras de esta nación, en los corazones de los hombres para que se reproduzca, penetre hasta sus espíritus y se suelte en las naciones de la tierra. No sólo sucede por la luz del Evangelio de Cristo o la gloria de Dios, sino porque Él nos dio la tecnología para poder hacerlo, ¡por todas partes del mundo!
Pude oír a Dios decir: “Revertiré los reportes negativos. Se revierten los reportes negativos sobre tu cuerpo y tu salud ahora mismo. ¡Revertiré los reportes negativos sobre muchos de ustedes y sobre millones que confían en Él!”
Kim Clement
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